CAPÍTULO III
EL CONTENIDO PLANETARIO - LAS SIETE ESFERAS DE SHAMBALLA
SHAMBALLA, la Morada del SEÑOR DEL MUNDO, es el Centro más
íntimo e incluyente del planeta, la más secreta y misteriosa
de las siete Esferas que constituyen el contenido planetario.
Es el Centro vital, coordinador, organizador y ejecutor de las
decisiones del Logos planetario con respecto a Su esquema
terrestre del cual nuestro planeta en su totalidad constituye
la expresión más densa.
Hay que tener en cuenta, sin embargo, que cada una de estas
siete Esferas es la proyección o reflejo de alguno de los
siete Planos del Sistema solar estudiados en el capítulo
anterior. Así, cuando en el devenir de este estudio sobre
SHAMBALLA hagamos referencia a la séptima Esfera, la más
periférica dentro del “círculo-no-se-pasa” planetario,
estaremos considerando en realidad aquella parte dentro del
Plano físico solar que nuestro Logos planetario “ha absorbido”
- utilizando aquí una muy correcta expresión- para poder
manifestarse a través del planeta físico llamado Tierra.
Obviamente pues, ya que en la totalidad de este estudio
utilizaremos el principio de analogía, la sexta Esfera de
SHAMBALLA será un reflejo del Plano astral del Sistema, la
quinta lo será del Plano mental y así sucesivamente hasta
abarcar todos los Planos del Universo.
Otro dato muy interesante a tener en cuenta al iniciar el
estudio de las Esferas de SHAMBALLA, es la identidad mística
de SANAT KUMARA, el Señor del Mundo, y la mística relación
“kármica” que tiene con el Logos planetario del esquema de la
Tierra. Pese a la extraordinaria evolución cósmica de SANAT
KUMARA, la función que realiza dentro del Sistema solar es
únicamente la de representar físicamente en el planeta Tierra,
el Alma o la Conciencia del Logos planetario, QUIEN -según se
nos dice esotéricamente- es uno de los SIETE ESPÍRITUS ANTE EL
TRONO DE DIOS a los cuales hace referencia la Biblia
cristiana, es decir, uno de los siete HOMBRES CELESTIALES
Regente de uno de los siete Esquemas planetarios que
constituyen la evolución inmediata del Logos solar. Tal como
se ha dado a entender frecuentemente en los estudios
esotéricos, la posición de SANAT KUMARA en relación con el
Logos planetario es similar a la de la personalidad del hombre
en los tres mundos con respecto al Yo superior o Angel solar
en el plano causal. La identidad de esta función mediadora,
coordinadora y organizadora de actividades físicas, fue
expresada de manera sublime e indescriptible hace dos mil años
-si nos atenemos a cómputos históricos- por el Iniciado JESÚS
DE NAZARET, al ofrecer Su triple Vehículo purificado, físico,
astral y mental para que CRISTO, el Instructor del Mundo
pudiese expresar objetivamente Su mensaje de Paz, Amor y Buena
Voluntad en el mundo de los hombres.
Aclarado este punto, que irá siendo ampliado durante el curso
de nuestro estudio sobre SHAMBALLA, pasemos a considerar
ahora, tan detalladamente como nos sea posible, el contenido
histórico, psicológico y místico de este desconocido e
inexplorado Centro espiritual planetario, con la seguridad de
que si el estudiante espiritual o el discípulo siguen con
atención todas las fases del proceso de investigación y pueden
efectuar las correspondientes analogías, les será posible
extraer de las mismas, ideas y conceptos prácticos del estudio
que vamos a realizar sobre los Misterios de SHAMBALLA.
La Séptima Esfera de Shamballa
La Esfera Física
Constituye en su totalidad el Cuerpo físico del Logos
planetario del esquema terrestre cuya organización, función y
desarrollo evolutivo son llevados a cabo por SANAT KUMARA
desde Su excelsa Morada física “LA ISLA BLANCA”, situada
geográficamente en el Desierto de GOBI, en el Asia Central.
En el profundo y misterioso seno de este emplazamiento
geográfico se halla objetivada en materia etérica del tercer
subplano físico, la historia completa del planeta, que
contiene -en lo que al estudio esotérico se refiere- todos los
“secretos revelables” al investigador espiritual. Este
emplazamiento físico está constituido por una inmensa e
intrincada red de profundísimas cuevas subterráneas, surcadas
por largos túneles y amplias galerías, iluminadas todas ellas
por un tipo de esplendente luz desconocida por completo
todavía por los científicos modernos la cual -a falta de un
término descriptivo conocidodenominaremos “luz etérica”. Cada
uno de los subplanos etéricos del Plano físico tiene su propia
e inconfundible luz, la cual es una emanación o reflejo de la
cualidad vibratoria del aura etérica del Logos planetario
irradiada a través de SANAT KUMARA en aquel definido nivel.
Estas antiquísimas cuevas fueron construidas, según se nos
dice esotéricamente, por aquellos gigantescos Devas
planetarios procedentes de la Cadena lunar, a quienes la
tradición oculta ha asignado el nombre de ASURAS. El trabajo
de construcción fue dirigido por expertos Devas planetarios de
índole solar, siguiendo las ocultas instrucciones de los
Grandes Señores Venusianos que instituyeron la Gran
Fraternidad de SHAMBALLA aquí en la Tierra.
En estas inmensas cuevas o misteriosas estancias secretas, se
hallan maravillosamente archivadas todas las “Memorias o
Experiencias Históricas” del Logos planetario, constituyendo
lo que esotéricamente se denomina “EL AULA DEL CONOCIMIENTO” o
campo de experiencia de los discípulos espirituales del mundo.
La Esfera Física de SHAMBALLA o Archivo físico de las Memorias
del Logos planetario, contiene:
a. Muestras de minerales diversos, desde los toscos minerales
provenientes de la primera cadena del esquema terrestre hasta
las más bellas piedras preciosas y ejemplares de los elementos
minerales radiactivos a través de los cuales ciertas especies
minerales podrán penetrar un día en el reino vegetal.
b. Ejemplares de todas y cada una de las especies vegetales,
desde los insignificantes musgos que cobraron vida por vez
primera en la segunda cadena del esquema, hasta las más
extraordinarias variedades vegetales que ciertos Devas
venusianos transportaron desde su planeta de origen a la
Tierra, siguiendo ocultas indicaciones solares. Entre tales
variedades pueden contarse las flores más bellas y de más
delicado perfume y las semillas de las especies que produjeron
el trigo, el arroz y los árboles que ofrecieron los plátanos y
cierto tipo especial de manzanas... La belleza de las flores,
sus encendidos colores y la magia de sus perfumes constituyen
una prueba de la esplendente e incomprensible evolución del
excelso DEVA, Señor del reino vegetal y de la maravillosa
sensibilidad de ciertas especies definidas, a través de las
cuales algunas determinadas variedades vegetales serán
introducidas a su debido tiempo, en el reino animal.
c. Prototipos o modelos de cada uno de los tipos animales
aparecidos en la Tierra a través de las edades, desde las
gigantescas y toscas especies que iniciaron su evolución
animal en la tercera cadena (lunar) del esquema terrestre,
hasta las más bellas y estilizadas formas de los animales
superiores, dotados de “instinto racional” y aptos para poder
ingresar en el reino humano durante el curso de la siguiente
ronda planetaria.
d. Prototipos originales de seres humanos procedentes de todas
las razas que aparecieron en el planeta durante el curso de la
evolución, desde las formas etéricas y semietéricas de las dos
primeras razas, la polar y la Hiperbórea -de las que nos habla
la tradición esotérica- todavía sin rasgos humanos, hasta las
delicadas y bellas formas que se aprecian en ciertos definidos
tipos raciales. Pueden observarse allí a los gigantescos
ejemplares lemures de hasta cuatro metros de estatura y a los
soberbios y altivos tipos atlantes, de achatada nariz y color
amarillo y los de nariz aguileña y tez cobriza, todos ellos
desarrollados a través de la actividad espiritual de la Cuarta
Jerarquía Creadora que produjo a la humanidad y que la va
desarrollando física y espiritualmente a través de las edades
cíclicas de la evolución.
e. Todas las conquistas humanas obtenidas en el transcurso de
las edades condensando las diferentes fases evolutivas del
saber humano, escritas sobre tablillas de piedra, papiros o
pergaminos, hasta llegar a los rudimentarios libros realizados
con la primitiva imprenta de GUTENBERG y proseguir hasta
nuestros días, en los que las publicaciones literarias de
todos los órdenes relativos a los conocimientos humanos se
realizan a través de medios extraordinariamente sofisticados y
utilizando mecanismos electrónicos de alta precisión técnica.
f. Todas las expresiones humanas en los departamentos del
arte, la ciencia, la cultura y la civilización se hallan
también allí, cuidadosamente archivadas en el interior de
aquellas misteriosas y ocultas cuevas físicoetéricas de
SHAMBALLA, desde las toscas y rudimentarias muestras
artísticas de las razas más antiguas, hasta aquella obra
insigne, no superada todavía por expresión artística alguna en
nuestros días, que dio vida a la gloria inefable de GRECIA y
el RENACIMIENTO. Pueden observarse allí reproducciones exactas
-substanciadas de la luz astral de los acontecimientos
temporales- tanto de las insignes creaciones de FIDIAS, MIGUEL
ÁNGEL o de LEONARDO DE VINCI, como de las de todos los
escultores, pintores, poetas, escritores y músicos que, con su
arte, ennoblecieron la expresión física del Espíritu humano.
La atención del investigador esotérico puede abstraerse
también en la contemplación de los primeros instrumentos
científicos creados por el hombre para medir su entorno social
y universal, desde los más rudimentarios hasta los modernos
telescopios radioeléctricos, capaces de acercar miles de veces
las estrellas más lejanas, así como la obra legada por las
antiquísimas culturas y civilizaciones, desde las que se
iniciaron en los clanes primitivos hasta la moderna
organización social y técnica de nuestros días.
Todo cuanto constituye una expresión de la evolución
psicológica del hombre a través de las edades, se halla
reflejado y reproducido allí, en aquellas inconmensurables
cuevas abiertas por los Devas ASURAS en las entrañas de
nuestra vieja y venerable Tierra. Todas estas reproducciones
de los “recuerdos históricos de la Raza”, implican una
inteligente y estrecha cooperación entre los Adeptos y
Conocedores de cada época planetaria -capaces de leer en la
luz de los registros akásicos o Memoria cósmica de la
Naturaleza- y los Devas Constructores, expertos en el arte de
la “substanciación” de los registros memoriales del Logos
planetario, dotando a estos de una expresión etérico-física de
carácter permanente.
Con respecto a estos registros, recuerdos o memorias vivas del
pasado histórico de nuestro Logos planetario, deberíamos
aclarar que en su totalidad constituyen el ÁTOMO PERMANENTE
FÍSICO del Señor del esquema de la Tierra, el depósito vivo y
vibrante de todas Sus vivencias físicas desde el principio de
los tiempos. Todo este vívido conjunto de “recuerdos físicos”
se halla archivado en el cuarto subplano del Plano búdico
solar, el cuarto subplano etérico cósmico, en donde pueden
observarse los átomos permanentes físicos de todos los Logos
planetarios del Sistema solar en tanto que el átomo permanente
de los seres humanos que contiene el recuerdo de todas sus
experiencias físicas a través del tiempo de la evolución, se
hallan ubicados en el primer subplano del Plano físico solar.
Sería interesante explicar aquí, que los discípulos avanzados
de los distintos Ashramas de la Jerarquía planetaria son
introducidos oportunamente en estos “Santuarios” de los
recuerdos logoicos, en estas antiquísimas cuevas subterráneas
del planeta, donde tienen oportunidad de comprobar
objetivamente las enseñanzas recibidas de sus respectivos
Ashramas, telepáticamente o por contacto directo con sus
Maestros o Instructores. Hay que explicar asimismo, que tales
objetivas percepciones pueden ser contactadas por los
discípulos en entrenamiento espiritual en sus mismos lugares
de emplazamiento, trasladándose allí por medio de sus
vehículos psíquicos previamente desarrollados, o ayudados por
sus Maestros o por algunos cualificados Discípulos.
Lo más interesante a remarcar es que la experiencia de
contacto con los recuerdos temporales del Logos planetario, se
realiza fuera del tiempo conocido, en ciertos niveles de
increíble sutilidad, que le permiten al discípulo “percibir
como actuales” aquellos recuerdos logoicos que se prolongan a
veces, según sea la claridad de visión y evolución espiritual
del discípulo, a las más alejadas épocas planetarias... El
discípulo podrá recordar o no, una vez recobrada su conciencia
física habitual, esta experiencia de contacto realizada en
esta AULA del CONOCIMIENTO planetario, pero ella subsistirá
como conocimiento intuitivo que le ayudará mucho en el devenir
de su existencia kármica, en tanto prosiga firmemente en su
propósito espiritual de redención.
No le será posible al discípulo recibir la primera Iniciación
Jerárquica si no ha recibido previamente dos iniciaciones
menores o preliminares, las cuales se administran precisamente
en el interior de alguna de aquellas Estancias subterráneas en
donde por razones kármicas, reproduce el discípulo,
psíquicamente, alguna época específica de sus vidas
anteriores, singularmente, aquella en la que estableció
contacto espiritual por vez primera con su Maestro o en la que
realizó algo realmente importante y genuinamente fecundo en
favor de la humanidad. Este “cálido recuerdo” hace revivir en
él la memoria de ciertos hechos espirituales de carácter
ashrámico, le dota de un fervor espiritual todavía mayor y
despierta su alma a experiencias psicológicas de orden
trascendente. En el devenir de tales acontecimientos recibe el
discípulo aquellas dos iniciaciones menores (Estas dos
iniciaciones menores están directamente relacionadas por
analogía con las dos primeras Razas-raíces, polar e
hiperbórea, a las cuales se las considera esotéricamente como
introductoras de las dos primeras Razas conocidas, la Lemur y
la Atlante), anteriormente descritas que constituyen el paso
obligado para poder acceder a las sucesivas iniciaciones
jerárquicas.
La Sexta Esfera de Shamballa
La Esfera Astral
En esta esfera se encuentran perfectamente registradas o
captadas del éter astral y constituyendo potentísimos
EGREGORES (Formas psíquicas, dotadas de alta consistencia
molecular creadas por la humanidad en el transcurso de las
edades), todas las grandes emociones de la humanidad, sus
aspiraciones espirituales más elevadas y sus deseos más
íntimos, desde los más bajos y groseros hasta los más sutiles
y refinados. Esta esfera constituye en su totalidad la
expresión sensible de la Vida de SANAT KUMARA y en sus
profundísimas interioridades se revela la infinita grandeza
del sentimiento de caridad y compasión, sin el cual no le
sería posible al discípulo avanzar por el Sendero espiritual,
la reverencia íntima hacia el corazón místico de toda cosa
creada y el inefable amor hacia el Creador, sintetizado todo
ello en la irresistible tendencia de toda vida en la
Naturaleza hacia el Corazón del SEÑOR DEL MUNDO, cuyos latidos
-tal como puede leerse en el “LIBRO DE LOS INICIADOS”-
“repercuten en el alma de toda cosa creada y de todos los
seres humanos, incitándoles -intuitivamente en los seres más
avanzados e instintivamente en los menos evolucionados- hacia
la Vida mística o espiritual”. De ahí deriva la conocida frase
oculta: “Nada se realiza aparte de Su Voluntad y de Su
infinito Amor..., ni caen las hojas de los árboles ni mueren
los más insignificantes insectos, sin que ello quede
registrado en los éteres y sin haber recibido previamente la
inefable Bendición del SEÑOR DEL MUNDO”.
En esta Esfera de SHAMBALLA, llena de anhelos y aspiraciones
de vida, se realizan los grandes sueños de la humanidad,
siendo precisamente en estos niveles emocionales donde
efectúan sus pruebas psíquicas y fundamentan sus enseñanzas
esotéricas, los discípulos que se están preparando para la
Segunda Iniciación jerárquica. En esta sagrada esfera de
experiencia logoica, aprende el discípulo las primeras y
resolutivas lecciones de la humildad espiritual y cobran valor
realmente psicológico y práctico las palabras del CRISTO:
“...Los últimos serán los primeros”. Y es también en esta
esfera y en alguno de sus definidos niveles, donde el
discípulo aprende la técnica de contacto con los Devas y a
considerar a los Ángeles como sus hermanos en los mundos
invisibles. Este conocimiento matizará la vida del discípulo,
de tal interés espiritual y de tal sublime grandeza, que el
Sendero iniciático le aparecerá no sólo como una posibilidad
de perfección sino mayormente como un deber social ineludible.
En ciertos niveles de esta esfera astral y protegidos -tal
como esotéricamente se dice- “por el sutilísimo velo del
karma”, se realizan los más preciados e íntimos deseos de las
almas poco evolucionadas que dejaron el cuerpo físico o que,
traspasando el velo de la forma, se sumen en un estado de
conciencia post-mortem definido esotéricamente como el
DEVACHAN (Ver libro del mismo autor “LA JERARQUÍA, LOS ANGELES
SOLARES Y LA HUMANIDAD”).
Otra de las características a observar en esta sexta Esfera de
SHAMBALLA es la de que en una de sus más recónditas y
misteriosas Estancias, se hallan fielmente reproducidas en
substancia psíquica correspondiente, las auras astrales de los
discípulos de los Maestros, sujetos a entrenamiento espiritual
dentro de los Ashramas de la Jerarquía, las cuales son
observadas regular y periódicamente por los respectivos
Maestros e Instructores, para verificar sus progresos
espirituales y efectuar las adecuadas advertencias telepáticas
que se traducirán, a su debido tiempo, en las oportunas
reorientaciones y reajustes en la vida de los discípulos.
La Quinta Esfera de Shamballa
La Esfera Mental
En esta Esfera se condensan todas las actividades mentales de
SANAT KUMARA, que contiene los planes, proyectos e ideas
solares con respecto a la evolución espiritual del planeta
Tierra. Los Arquetipos de los reinos, de las razas y de todas
las especies vivientes se hallan reflejados allí, utilizando
una substancia dévica de incomprensible sutilidad mental.
Esta Esfera, que es una “absorción” mental del Logos
planetario del esquema terrestre en el interior del Cuerpo
mental del Logos solar contiene también toda la información y
enseñanza exotérica y esotérica, concreta y abstracta, que ha
de recibir la humanidad en sus variados niveles evolutivos,
hasta el fin del ciclo manvantárico planetario. Se nos dice
ocultamente que el MANÚ, Señor de una gran Raza Raíz, el
BODHISATTVA, el Instructor del Mundo y el MAHACHOHÁN, Señor de
la Civilización y de la Organización Cultural del Mundo,
extraen los proyectos específicos relativos a Sus respectivos
Departamentos, de los vivientes ARQUETIPOS existentes en estas
niveles de alta concentración solar, que constituyen la mente
superior de SANAT KUMARA (El tema de los Arquetipos será
tratado detalladamente en otra parte de este libro).
En tal Esfera mental de proyección arquetípica, sólo pueden
penetrar los seres humanos que lograron integrar y controlar
perfectamente su triple vehículo físico, astral y mental y
que, consecuentemente, recibieron la Tercera Iniciación
jerárquica, místicamente definida como LA TRANSFIGURACIÓN
siendo en esta esplendente Iniciación o apertura de conciencia
que el Iniciado puede resistir sin peligro la terrible
radiación ígnea que se desprende del aura de SANAT KUMARA, el
SEÑOR DE SHAMBALLA, QUIEN en esta sagrada Iniciación actúa por
vez primera como HIEROFANTE INICIADOR.
A esta quinta Esfera mental se la denomina también “la
REVELADORA DEL PLAN”, pues cada uno de sus siete niveles o
subplanos son proyecciones de la Voluntad o Propósito del
Logos planetario con respecto a cada uno de los reinos de la
Naturaleza, siendo los Devas Constructores en estos niveles
mentales los encargados de substanciar o de hacer concretas
las ideas que encarnan aquel sublime Propósito, para que
puedan ser expresadas más adelante en formas físicas
adecuadas.
Además de esta actividad dévica, ignorada por muchos
investigadores esotéricos, a la que asignamos el nombre de
“substanciación”, se realizan también en esta Esfera,
determinadas actividades iniciáticas que tienen lugar -de
acuerdo con su importancia- en uno u otro de los tres
subplanos Superiores de la misma. Hay además en esta Esfera,
denominada esotéricamente EL HOGAR DE LOS AGNIS (Ver libro del
mismo autor “LOS ÁNGELES EN LA VIDA SOCIAL HUMANA”), cuatro
niveles de abstracción post-mortem, es decir, cuatro estados
de conciencia devachánicos, donde se hallan “místicamente
recogidas tal como reza la tradición oculta, las almas de
aquellos seres humanos más evolucionados que abandonaron el
cuerpo físico tras el tránsito kármico de la muerte.
La Cuarta Esfera de Shamballa
La Esfera Búdica
Esta es la Esfera central de SHAMBALLA. Se la denomina,
místicamente, EL HOGAR DE LOS ADEPTOS y es la Esfera donde el
Amor del Logos planetario se manifiesta en toda Su infinita
grandeza.
EL CENTRO CARDÍACO DEL SEÑOR DEL MUNDO se halla establecido
ocultamente en el cuarto nivel de esta cuarta Esfera y, desde
allí, irradia Su energía de Amor a todo el planeta a través
del gran Centro espiritual planetario que llamamos Jerarquía o
Gran Fraternidad Blanca. Los Miembros de esta sagrada
Corporación constituyen, de manera misteriosa, “los Pétalos
inmaculados” de este místico Corazón o CHAKRA CARDÍACO DE
SANAT KUMARA.
Es precisamente en este cuarto nivel y en un lugar muy secreto
y oculto, conocido únicamente por el BODHISATTVA y alguno de
sus más exaltados Discípulos, donde se halla guardado el CETRO
de PODER JERÁRQUICO de segundo Rayo, mediante el cual son
administradas las dos primeras Iniciaciones jerárquicas y
vital izados magnéticamente ciertos lugares específicos de la
Tierra.
Esta cuarta Esfera, por estar situada en el centro místico del
REINO DE SHAMBALLA y siendo la Capital del mismo por derecho
de aproximación espiritual, es denominada también EL CENTRO DE
SÍNTESIS, pues Síntesis no representa, tal como creen algunos
investigadores esotéricos, la meta del propósito de
perfección, sino mayormente el equilibrio perfecto de todos
los procesos cósmicos que tienen lugar en el interior de la
vasta Esfera de SHAMBALLA, que se extiende mucho más allá de
lo que ocultamente entendemos como “círculo-no-se-pasa” del
esquema terrestre. En este gran Centro de equilibrio y armonía
se produce el verdadero estado de SAMADHI o de la PAZ
perfecta, al que sólo pueden acceder los perfectos Iniciados
del planeta.
Los estados precursores de SAMADHI, tal como suelen definirse
en términos ashrámicos, son alcanzados por los discípulos
espirituales en el cuarto nivel de la sexta Esfera, la Esfera
astral de SHAMBALLA. En aquel nivel no se exterioriza la Paz
perfecta de SAMADHI, pero sí el de la perfecta tranquilidad
emocional, que es el resultado del desapego del discípulo
hacia las cosas pasajeras, una condición básica para poder
recibir la Segunda Iniciación jerárquica.
Otras de las características específicas de la cuarta Esfera
de SHAMBALLA la menos conocida y sin embargo, mas llena de
significados esotéricos dignos de profundo estudio, es la de
que en el tercer nivel de acuerdo con ciertas motivaciones
logoicas con respecto al mismo, vive, se mueve y tiene el ser
una misteriosa Jerarquía angélica, sólo perceptible a la
visión de los altos Iniciados, ocultamente denominada “los
SEÑORES DE LA LUZ BLANCA” cuya misión, técnicamente hablando,
es “tejer” con hilos de substancia búdica las túnicas blancas
de los Iniciados del planeta en sus diferentes jerarquías
espirituales. Esta afirmación - aparecerá quizás al examen
superficial de algunos aspirantes como extravagante o casi
ridícula. Sin embargo, “cuando los tiempos sean llegados” y
puedan estos aspirantes espirituales del mundo familiarizarse
con ciertos aspectos de la vida de SHAMBALLA, totalmente
desconocidos hasta el presente incluso para muchos discípulos,
descubrirán la maravillosa relación existente entre esta
peculiar actividad dévica de tejer las túnicas de los
Iniciados y la Sagrada Ley de RITOS, una Ley vigente en cada
uno de los esquemas planetarios del Sistema solar y
probablemente también en todos los sistemas solares de nuestro
vastísimo sistema cósmico de evolución espiritual.
Todos los Ritos mágicos y Ceremonias místicas efectuadas en
SHAMBALLA, tanto las que tienen lugar en la CÁMARA DEL
CONCILIO PLANETARIO para invocar fuerza solar, y las que se
realizan en las congregaciones periódicas de los Discípulos e
Iniciados de la Gran Fraternidad Blanca, dentro de Sus
respectivos Ashramas y bajo la advocación y dirección del
Instructor del Mundo, como las que se celebran en determinados
niveles etéricos de la Esfera física del planeta, para
introducir a los aspirantes capacitados, en las dos
Iniciaciones menores que preceden a las Iniciaciones
jerárquicas, se caracterizan por ser Ceremonias específicas
que vienen marcadas por el sello de la calidad jerárquica de
los Miembros asistentes. A los lectores no introducidos
profundamente todavía en los estudios esotéricos y aun a
muchos aspirantes espirituales del mundo, habría que decirles
para una mejor comprensión del tema que estamos tratando:
1. Que todas las Ceremonias, ritos, liturgias y cultos
efectuados en el mundo, sean cuales fueren sus móviles,
motivos, orígenes básicos y finalidades específicas, obedecen
siempre y sin distinción alguna al definido Propósito del
Logos planetario de perpetuar el Principio de la Fraternidad”
aquí en la Tierra.
2. Que este Espíritu de Perpetuación de la Ley -si así podemos
decirlosurge implícitamente del Principio de Jerarquía
espiritual, ocupando todo ser viviente, desde el insecto al
propio Logos, un lugar bien definido dentro de esta inmensa
Escalera de Jacob de la evolución espiritual. El principio de
jerarquía es la representación en espacio y tiempo, de la Ley
de Evolución.
3. Que la Ley de Evolución expresada mediante el Principio de
jerarquía, riela a través de dos vastísimas vertientes,
subjetiva y sutil una, y objetiva y substancial la otra. La
primera obedece al principio de vida; la segunda expresa la
cualidad objetiva de la forma.
4. Que en toda Ceremonia jerárquica, “la calidad espiritual”
de cada uno de los asistentes viene expresada por determinados
símbolos ornamentales. Estos se manifiestan substancialmente
en las túnicas blancas, que son la característica general de
toda verdadera Fraternidad dedicada al culto del Bien, cuya
sutilidad e impresionante blancura caracteriza a los grandes
Iniciados, en orden a su jerarquía espiritual. Otro
complemento esencial observado en las grandes Ceremonias
jerárquicas, singularmente las que tienen lugar durante el
curso de las Iniciaciones planetarias, es el emblema áureo
reflejado desde los niveles monádicos de SHAMBALLA, que
expresa el grado de elevación espiritual de los Iniciados en
el seno de la Gran Fraternidad, ya que sólo los Iniciados, sea
cual fuere su jerarquía o grado de Iniciación, pueden ostentar
como complemento ideal de Sus túnicas blancas, aquellos
emblemas dorados, de mágicos resplandores. El color dorado o
solar, proyectado con mayor o menor profusión sobre las
túnicas blancas, indica la categoría del Iniciado, así como
los signos, emblemas o dibujos simbólicos donde se refleja el
oro solar o monádico de SHAMBALLA, los cuales cambian y se
hacen cada vez más brillantes y complejos en cada nueva
Iniciación, constituyendo “los canalizadores magnéticos” de
las energías planetarias o extraplanetarias invocadas en las
grandes Ceremonias litúrgicas que tienen lugar en determinadas
“estancias” del Reino místico de SHAMBALLA.
Los discípulos espirituales en sus varias gradaciones que
hayan logrado acceder por sus merecimientos a alguna de
aquellas Estancias místicas de SHAMBALLA, visten también sus
túnicas blancas, pero varía considerablemente la calidad de
los ornamentos o símbolos dorados, ausentes todavía -tal como
esotéricamente se dice- “de reflejos áureos”, los cuales
únicamente se consiguen en las Iniciaciones jerárquicas. Los
ornamentos o símbolos de los discípulos no iniciados se
caracterizan por su color o por ciertos emblemas muy fáciles
de identificar e interpretar por el clarividente entrenado:
a. Azules, para los discípulos en el Corazón del Maestro, no
iniciados todavía.
b. Amarillos, para los discípulos aceptados y pertenecientes a
algún definido Ashrama de la Jerarquía.
Lógicamente, los discípulos en probación no pueden acceder
todavía a recinto alguno de SHAMBALLA. La Ley de Jerarquía es
muy estricta y sólo pueden penetrar en los sagrados Recintos
aquellos seres humanos que verdaderamente se lo merezcan y
hayan conquistado esta oportunidad a fuerza de voluntad,
servicio y sacrificio. La frase mística “Muchos serán los
llamados y pocos los elegidos”, puede ser aplicada
íntegramente aquí.
Ahora bien, volviendo a las cualidades esotéricas de que viene
revestida la cuarta Esfera Búdica de SHAMBALLA, diremos que en
cada nueva Iniciación a la que haya accedido el discípulo, hay
“una elevación en conciencia” hacia uno u otro de los siete
niveles, siendo precisamente en cada uno de ellos donde “vive,
se mueve y tiene el ser” cada Iniciado de la Jerarquía, de
acuerdo con su grado iniciático, una vez que ha cumplido su
karma en el mundo físico. Si el Iniciado vive todavía en el
Plano físico, se halla misteriosamente unido al nivel búdico
que le corresponde y de allí extrae la Intuición, la Voz del
Alma o Verbo, que le cualifican verdaderamente como un
Iniciado. Así, la INTUIClÓN se va desarrollando
progresivamente a medida que se van conquistando uno a uno
estos siete niveles de la Esfera Búdica y es el grado de
Iniciación el que caracteriza el contacto consciente en uno,
en varios o en la totalidad de los siete subplanos de esta
Esfera. Como dato ilustrativo y basándonos como siempre -tal
como es de rigor esotérico- en el principio hermético de
analogía, podríamos decir que:
a. En la primera Iniciación, la del Nacimiento de CRISTO en la
Cueva mística del Corazón, se accede en conciencia al primer
nivel o subplano de la Esfera búdica de SHAMBALLA.
b. En la segunda Iniciación, en la que el Iniciado recibe “el
Bautismo del Agua”, simbólicamente en el río Jordán y que
caracteriza la purificación astral del Candidato, se adquiere
la conciencia del segundo nivel de la Esfera búdica.
c. En la tercera Iniciación, definida místicamente de la
TRANSFIGURACIÓN, donde el Iniciado recibe “el Bautismo del
Fuego”, se adquiere la capacidad de moverse y expresarse
autoconscientemente en el tercer nivel de la Esfera búdica.
d. En la cuarta Iniciación, en la que el Iniciado o ARHAT,
establece contacto consciente por vez primera con la fuerza
cósmica extrasolar, se adquiere la conciencia mística
denominada esotéricamente de SAMADHI y se obtiene el
convencimiento real del Misterio de SHAMBALLA, implícito en su
augusta grandeza en el Corazón de SANAT KUMARA, el SEÑOR DEL
MUNDO, en el “centro geométrico” de la cuarta Esfera, es decir
en su cuarto nivel. En este incomprensible Santuario del Amor
planetario, sabe el Iniciado, por experiencia individual y no
por simple conocimiento intelectual, lo que representa
exactamente el término CONCIENCIA CÓSMICA, dentro de la cual
el pasado, el presente y el futuro del Logos planetario se
hallan totalmente integrados en el ETERNO AHORA de la
Conciencia solar del Logos creador del Universo.
e. En la quinta Iniciación, en la que el Iniciado ha logrado
desprenderse totalmente de la Ley imperante en los tres
mundos, físico, astral y mental, se adquiere la conciencia del
ADEPTO y con ella un conocimiento exacto y preciso de los
planes y propósitos del Logos planetario con respecto a la
evolución del planeta Tierra y por efecto de ello, se obtiene
la autoconciencia perfecta en este quinto nivel búdico de
SHAMBALLA.
f. En la sexta Iniciación, en virtud de la cual el Iniciado se
ha convertido en un misterioso Agente de la energía de los
Rayos, el CHOHÁN adquiere plena conciencia de la Realidad
mística de los planes y proyectos cósmicos de UNO de los
Señores planetarios de Rayo, con respecto a la evolución de
nuestro esquema terrestre y obtiene la autoconciencia perfecta
en el sexto nivel de la Esfera búdica de SHAMBALLA, así como,
por reflejo, una conciencia intuitiva perfecta de la actividad
desarrollada por los demás Señores de Rayo que actúa a través
de los siete Planetas Sagrados de nuestro Sistema solar.
g. En la séptima Iniciación, en la que el Iniciado ha devenido
“un AGENTE MÍSTICO DE SHAMBALLA” y un Miembro indiscutible de
la CÁMARA DE CONCILIO PLANETARIO, se obtiene una plena
conciencia de la actividad desarrollada por los Señores del
Karma dentro del “Círculo-nose- pasa” del Sistema solar y en
el propio planeta y, por efecto de ello, presta una consciente
y deliberada cooperación en los planes y designios del Logos
planetario a través de SANAT KUMARA, el SEÑOR DEL MUNDO, en
relación con los reinos, razas y especies diversas que
evolucionan en el planeta Tierra. El conocimiento y control
que posee este alto Iniciado de la cuarta Esfera de SHAMBALLA
es total, extendiéndose incluso al plano búdico solar. El
desarrollo de Su visión y las actividades de Su vida están
mucho más allá y por encima de los conceptos meramente
intelectuales.
Como el lector apercibido habrá podido observar, es imposible
registrar intelectualmente todos los misterios implícitos en
cada uno de los niveles de la Esfera Búdica. Lo que ha sido
explicado acerca de los mismos es sólo un débil intento de
descubrir para los investigadores esotéricos, algunas
perspectivas espirituales algo más amplias que las
ordinariamente obtenidas y aceptadas. En realidad, el Misterio
total de SHAMBALLA sólo está al alcance del propio SANAT
KUMARA y de los Seis BUDAS DE ACTIVIDAD, tres esotéricos y
tres exotéricos, que representan aquí en la Tierra, junto con
el SEÑOR DEL MUNDO, “la Séptuple Gloria” o séptuple Misterio
del Logos planetario, el HOMBRE CELESTIAL de nuestro esquema
terrestre, Uno de los SIETE ESPÍRITUS ANTE EL TRONO DE DIOS.
De todo cuanto estamos afirmando con respecto a las siete
Esferas de SHAMBALLA, se puede deducir, sin embargo, un hecho
místico de la más elevada trascendencia, y es el que está
relacionado con la cuarta Esfera y muy definidamente con su
cuarto nivel, aquel que muy intencionadamente hemos definido
como CORAZÓN MÍSTICO DE SANAT KUMARA. La importancia de la
cuarta Esfera y del cuarto nivel de la misma deriva de las
Leyes universales de la analogía, que unifican y centralizan
por razones numéricas y posiciones geométricas, a planetas,
soles, constelaciones y galaxias. Veamos, al respecto las
siguientes analogías.
a. Nuestro Sistema solar es un Universo de “Cuarto orden”, por
cuanto y según se nos dice esotéricamente, el Logos solar está
recorriendo Su cuarta Cadena dentro de Su sistema cósmico.
b. Nuestro Esquema terrestre es el “cuarto” dentro de los
siete que componen el orden evolutivo en esta presente fase
del MAHA-MANVÁNTARA solar. Veamos:
Número del esquema Planeta
1. Vulcano
2. Venus
3. Marte
4. TIERRA
5. Mercurio
6. Júpiter
7. Saturno
c. El Esquema planetario de la Tierra se halla actualmente en
su cuarta cadena. Se está manifestando a través de su cuarto
globo, nuestra Tierra, la cual está recorriendo su cuarta
Ronda dentro de esta cuarta cadena.
d. El cuarto Rayo de Armonía se proyecta preferentemente sobre
el cuarto Plano búdico del Sistema solar y sobre la cuarta
Esfera búdica de todos los esquemas planetarios. Actúa
potentemente sobre la Cuarta Jerarquía Creadora, que dio vida
y conciencia mental a la humanidad, la cual, como se sabe, es
el Cuarto Reino de la Naturaleza.
e. Las energías proyectadas desde el plano búdico, repercuten
sobre el cuarto chakra, el cardíaco, dentro del esquema
etérico del ser humano, cuya misión es reflejar la unidad
esencial del Plano búdico solar o de la Esfera búdica de
SHAMBALLA, una vez que hayan sido realizados con pleno éxito
“los Trabajos de Hércules” en cada uno de los doce pétalos que
componen el Chakra del Corazón, por el perfecto Iniciado.
Para finalizar nuestro estudio sobre la cuarta Esfera de
SHAMBALLA, deberemos puntualizar que todos los Iniciados,
discípulos y sinceros aspirantes espirituales del mundo, se
sienten identificados en mayor o menor grado y a través de su
corazón, con el cuarto nivel de la Esfera búdica de SHAMBALLA,
donde, tal como puede leerse en el “LIBRO DE LOS INICIADOS”:
“…palpita con fulgores de eternidad el Corazón místico del
SEÑOR DEL MUNDO”, siendo la INTUICIÓN, el sentido espiritual
más íntimo e incluyente, el que registra con toda fidelidad el
grado específico de esta identificación, de acuerdo con la
evolución espiritual de cada uno.
La Tercera Esfera de Shamballa
La Esfera Átmica
Se la denomina esotéricamente “La Esfera del Propósito
Revelado” ya que expresa subjetivamente los Designios de SANAT
KUMARA con respecto al planeta Tierra. En su segundo subplano
se halla místicamente ubicada la CÁMARA DE CONCILIO
PLANETARIO, donde únicamente pueden penetrar los Altos
Dignatarios y grandes Entidades planetarias y extraplanetarias
que componen el CONSEJO PRIVADO DEL GRAN SEÑOR. Tales son, en
orden de jerarquía espiritual, las Entidades que componen el
GRAN CONCILIO DE SHAMBALLA:
1. SANAT KUMARA, el Señor del Mundo, encarnación física y
representante directo del Logos planetario del esquema
terrestre.
2. Los Seis grandes KUMARAS o Budas de Actividad,
representantes de SANAT KUMARA dentro y fuera del
“Círculo-no-se-pasa” del planeta Tierra.
3. Los Cuatro SEÑORES DEL KARMA planetario, expresiones del
karma solar y reflejos planetarios de la actividad cósmica de
las cuatro grandes Entidades Kármicas, o SEÑORES LIPIKAS, de
la Gran Fraternidad Blanca de Sirio.
4. El Señor BUDA, denominado ocultamente “EL MENSAJERO DE
SHAMBALLA”. Es aquella extraordinaria Entidad espiritual que,
en su última encarnación física en la Tierra, utilizó el
cuerpo del príncipe hindú SIDHARTA GAUTAMA.
5. Los Guías supremos de los tres Departamentos planetarios de
la Política, la Religión y la Civilización, conocidos
esotéricamente bajo las denominaciones de el MANU, el
BODHISATTVA y el MAHACHOHÁN.
6. Los Cuatro grandes DEVAS, Directores ocultos de los cuatro
primeros reinos de la Naturaleza, mineral, vegetal, animal y
humano, siendo emanaciones en cada uno de estos reinos, de las
energías de los grandes MAHADEVAS O ARCÁNGELES Regentes de los
cuatro primeros planos del Sistema solar: YAM o KSITI (plano
físico), VARUNA (plano astral), AGNI (plano mental) y VAYU o
INDRA (plano búdico).
7. Los Siete CHOHANES o Señores de Rayo, que canalizan en
nuestro planeta las energías procedentes de los siete planetas
sagrados: Vulcano, Mercurio, Venus, Júpiter, Saturno, Urano y
Neptuno. Virtualmente, estos CHOHANES son transmisores dentro
del “círculono- se-pasa” del planeta de las energías de los
Rayos. Tal es el nombre con que son conocidos estos CHOHANES:
a. El Maestro MORYA, Chohán del primer Rayo, de la Voluntad o
Poder.
b. El Maestro KUT HUMI, Chohán del segundo Rayo de Amor-
Sabiduría.
c. El Maestro VENECIANO, Chohán del tercer Rayo de
Inteligencia activa.
d. El Maestro SERAPIS, Chohán del cuarto Rayo de Armonía y
Belleza.
e. El Maestro HILARIÓN, Chohán del quinto Rayo de Inteligencia
concreta o Rayo de la Ciencia.
f. El Maestro JESÚS, Chohán del sexto Rayo de Devoción
espiritual.
g. El Maestro CONDE DE SAN GERMÁN, conocido también como
Príncipe RAKOCZI, Chohán del séptimo Rayo de Magia Organizada
y Ceremonial oculto que unifica creadoramente el propósito
espiritual con las formas expresivas de la Naturaleza.
8. Incidentalmente, y de acuerdo con el plan de evolución
cósmico, con frecuencia asisten a estas reuniones de la Gran
Fraternidad de SHAMBALLA algunos Enviados o Embajadores de los
distintos esquemas planetarios, y cuando la importancia de los
temas a tratar así lo exige, asisten Representantes de la
propia Logia Solar.
Estas reuniones o Concilios planetarios, suelen tener lugar
cuatro veces al año o sea, cada tres meses, aunque se realizan
reuniones preparatorias en todos y cada uno de los Ashramas de
la Jerarquía, para analizar problemas mundiales que son
presentados luego a la inteligente consideración del GRAN
CONCILIO. Utilizando creadoramente la analogía, se comprenderá
claramente que la Gran Fraternidad oculta de SHAMBALLA,
directora de los destinos planetarios, con frecuencia ha de
tomar decisiones en orden a la buena marcha de la evolución
del planeta, decisiones que afectan a veces a otros planetas
del Sistema solar. De ahí se deriva el hecho de que a los
Concilios celebrados en SHAMBALLA, asistan enviados o
“embajadores de las distintas Fraternidades Ocultas del
Sistema solar”. Habida cuenta de que los planetas de nuestro
Universo, sea cual fuere su grado de evolución, son centros o
chakras dentro del inmenso Cuerpo solar, es lógico que las
decisiones de un Logos planetario afecten de alguna manera
aquel ambiente social de Dioses. De ahí la necesidad de que,
en ciertos períodos cíclicos de la evolución, se celebren
reuniones en la CÁMARA DEL CONCILIO SOLAR, a las que asisten
todos los Logos planetarios de los distintos esquemas... Hay
que considerar este punto desde un ángulo muy analítico,
utilizando la analogía y tratando de aproximar tanto como sea
posible aquellos Hechos universales, a nuestra consideración
humana.
La Segunda Esfera de Shamballa
La Esfera Monádica
A esta Esfera se la denomina ocultamente EL HOGAR DEL CETRO,
pues es precisamente en su segundo nivel y “especialmente
salvaguardado” por tres Budas de Actividad además de poderosos
DEVAS de primer Rayo -muy activos en esta presente fase de la
evolución planetaria- donde se halla depositado el Cetro de
Poder o DIAMANTE FLAMÍGERO que utiliza el SEÑOR DEL MUNDO para
conferir las distintas Iniciaciones planetarias y proyectar
energía cósmica sobre la Tierra para atender las necesidades
vitales del planeta y, en más amplias y profundas
proyecciones, cuando se hace preciso efectuar grandes
reajustes en la vida de los reinos de la Naturaleza.
Hablando desde un enfoque muy esotérico, podríamos decir que
este Cetro constituye el aspecto superior o polo positivo del
Fuego de KUNDALINI o Talismán de Brahma, siendo el Cetro
jerárquico del BODHISATTVA, un “manantial de fuerza” del
segundo Rayo que, en forma misteriosa, equilibra o armoniza
las energías positivas del DIAMANTE FLAMÍGERO con las energías
negativas del TALISMÁN DE BRAHMA.
El DIAMANTE FLAMÍGERO procede, según esotéricamente se nos
dice, del planeta VENUS y lo trajo consigo EL SEÑOR DEL MUNDO,
cuando “procedente de los Altos Lugares del Esquema” vino a la
Tierra para instaurar la Jerarquía Espiritual o Gran
Fraternidad Blanca. Desde entonces, este Cetro ha irradiado Su
poder sobre dioses, devas, hombres y naciones y siempre que la
trayectoria espiritual del mundo se vio obstaculizada por
elementos discordantes provenientes de dentro o fuera del
“Círculo-no-se-pasa” del planeta, la potencialidad infinita
del Cetro en manos de SANAT KUMARA CUIDÓ de afirmar la ley de
Justicia, restablecer el orden transitoriamente perdido e
imponer las medidas más convenientes para que la evolución
planetaria prosiguiese su curso.
Poco más puede decirse ahora acerca de la segunda Esfera de
SHAMBALLA, salvo exponer una idea que quizás resulte difícil
de ser asimilada intelectualmente y es la de que en un
definido nivel de esta Esfera se halla “serenamente
expectante” una Jerarquía Creadora que deberá reaparecer en la
próxima Ronda planetaria y cuyas unidades de conciencia son
chispas monádicas emanadas de la vida del propio Logos
planetario.
A esta Esfera, en ocultismo se la denomina de “LA DECISIÓN
FINAL”, de la misma manera que a la tercera Esfera la
definíamos como del “PROPÓSITO REVELADO”. La Decisión Final
está muy íntimamente vinculada con la actividad tremendamente
ígnea del DIAMANTE FLAMÍGERO, tal como surge
indescriptiblemente vibrante y creador, de las entrañas
místicas del LOGOS PLANETARIO.
La Primera Esfera de Shamballa
La Esfera Ádica
Como lógicamente se comprenderá, a medida que se asciende por
la escala de valores jerárquicos en la vida de la Naturaleza,
más difícil le resulta al investigador esotérico extraer
conclusiones concretas o intelectuales acerca de las
actividades que se realizan en las más elevadas Esferas de
SHAMBALLA. Tan sólo utilizando la intuición y la clave mágica
de la analogía es posible extraer algunos significados
místicos, muy levemente comprensibles a la más elevada
percepción mental.
Con respecto a esta última Esfera, la primera dentro del orden
evolutivo de SHAMBALLA y la más elevada jerárquicamente
hablando, podemos decir que se corresponde con el Centro
Coronario o Chakra SAHASRARA, del SEÑOR DEL MUNDO, siendo éste
el lugar más secreto, profundo e incluyente del planeta...
Sólo los Budas de Actividad del esquema terrestre y Altos
Dignatarios solares tienen acceso al mismo. En este misterioso
y enigmático Centro se refleja la Voluntad omnipotente del
Logos planetario, siguiendo fidedignamente los Altos Designios
solares. La fórmula sagrada AUM, con la cual se inicia todo
proceso creador en este Universo de segundo Rayo, viene
representada en nuestro esquema terrestre por el Logos solar,
el Logos planetario y SANAT KUMARA, el SEÑOR DEL MUNDO,
ejercitando cada Una de estas Entidades Cósmicas, los poderes
asignados a Su elevada jerarquía, los cuales se expresan en
forma de Voluntad, Impulso y Acción.
La primera Esfera de SHAMBALLA coordina, por lo tanto, la
acción cósmica que se refleja en el esquema terrestre de
manera similar a como el Logos solar coordina la acción
cósmica sobre Su sistema universal. La fórmula mantrámica AUM
se reproduce por doquier, en cada uno de los planetas del
Sistema solar -ya sean visibles u ocultos- y en cada una de
las Esferas de SHAMBALLA. La Voluntad del Logos planetario,
proyectándose sobre el Chakra Coronario de Su Agente
expresivo, EL SEÑOR DEL MUNDO se convierte en el impulso que
coordina, organiza y lleva a la actividad el entero proceso
evolutivo de la Tierra, utilizando creadoramente a la Gran
Fraternidad Blanca, la Cual hace efectivo este Impulso creador
y lo vierte en Acción rítmica, en un movimiento progresivo
hacia adelante, cumplimentándose así el karma planetario del
cual participa tanto el HOMBRE CELESTIAL del esquema como el
más humilde átomo físico de materia molecular.
* * *
El lector atento y apercibido se preguntará, sin duda,
singularmente en lo que hace referencia al contenido
histórico, psicológico y místico de las Esferas de SHAMBALLA,
cómo es posible “tener acumuladas tantas cosas, tantos hechos
y tantas situaciones” en el interior de sus ocultos
Santuarios, pues, de acuerdo con la lógica intelectual, todas
aquellas formas, sea cual fuere su grado de sutilidad, sumadas
en su totalidad, deberían superar con amplitud la capacidad de
contención de aquellas misteriosas cuevas o Estancias ocultas
denominadas esotéricamente “AULAS DEL CONOCIMIENTO”, “AULAS DE
LA SABIDURÍA” y “AULAS DE LA CÓSMICA OPORTUNIDAD”.
Hay que tener presente al respecto, que todos aquellos ocultos
tesoros no son sino “Recuerdos Vivientes” suministrados por
los ÁTOMOS PERMANENTES del Logos planetario, plasmados en
materia etérica de la más alta sutilidad y expresados en
dimensiones del espacio, absolutamente desconocidas por el
hombre actual. El proceso es idéntico al realizado por los
seres humanos, los cuales merced a la actividad de sus átomos
permanentes físico, astral y mental, pueden proyectar la
infinita cadena de sus recuerdos, actuales o procedentes de
otras vidas, recuerdos que se hacen “VÍVIDOS” cuando la
conciencia individual establece contacto con ellos. Estos
recuerdos o estas experiencias no ocupan realmente lugar, pues
“lugar” es una expresión física relativa sólo a un concepto
tridimensional del espacio y, tal como podrá percibir el
discípulo en determinados estadios de su evolución, en
dimensiones superiores al físico ordinario las cosas son muy
distintas y los hechos se proyectan a velocidades que superan
infinitamente la velocidad de la luz que es, como sabemos, de
trescientos mil kilómetros por segundo. Este indescriptible
aumento de la velocidad en el tiempo “empequeñece” las cosas a
extremos inverosímiles y esta particularidad, conocida y
experimentada sólo por discípulos Iniciados, permite la
condensación o sintetización de un innumerable grupo de
recuerdos, en centros increíblemente reducidísimos del
espacio. Esta “ley de velocidad en el tiempo” será una de las
claves de comprensión para los discípulos de la Nueva Era y un
objetivo a alcanzar por la Ciencia del futuro.
Podríamos decir, siendo todavía más objetivos, que todas las
memorias acumuladas en los átomos permanentes, tanto logoicos
como humanos, están constituidos por una substancia etérica de
increíble sutilidad dentro de nuestro Universo físico, que
persiste invariablemente a través de las edades, por inmensas
y alejadas que estén de nuestras experiencias actuales. Se nos
dice esotéricamente que estas memorias acumuladas en los
átomos permanentes sólo se disgregarán al final del gran
MAHAMANVÁNTARA solar, pasando a engrosar como síntesis de
actividades el contenido memorial de los átomos permanentes de
aquel extraordinario y eternamente desconocido LOGOS CÓSMICO
de Quien nuestro Logos solar, pese a Su extraordinaria
grandeza, constituye sólo un Centro de energía dentro de Su
inconmensurable Cuerpo de manifestación.
Al llegar a este punto deberíamos hacer referencia, quizás, a
aquellas Entidades dévicas, definidas ocultamente como los
ÁNGELES DE LOS RECUERDOS, testigos invisibles de todas las
actividades registradas física, astral, mental y
espiritualmente dentro del omniabarcante seno del Sistema
solar, quienes, en su conjunto, constituyen aquella
incomprensible y misteriosa ENTIDAD a la que la tradición
esotérica asigna el nombre de MEMORIA CÓSMICA, cuya actividad
natural a través de Sus innumerables e indescriptibles Agentes
dévicos, abarca la totalidad de los planos del Sistema solar,
del Sistema cósmico y aun de todos los sistemas galácticos.
A esta Entidad, Señora de la MEMORIA CÓSMICA, se la denomina
también EL ÁNGEL DE LOS REGISTROS y constituye misteriosamente
UNO de los cuatro SEÑORES DEL KARMA (Ver libro del mismo autor
“LOS ÁNGELES EN LA VIDA SOCIAL HUMANA”), cuya misión en la
evolución de los mundos y de los sistemas, es “archivar todos
los recuerdos” solares, planetarios, humanos y atómicos, y
mantenerlos vívidamente despiertos dentro de la conciencia de
un Logos, de un hombre o de un simple átomo, ya que sólo la
ley del recuerdo permite la continuidad del proceso de la
evolución, sea cual fuere la grandeza o la pequeñez de las
unidades de vida que estén sujetas a ella...
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