LOS ÁNGELES Y LAS FORMAS MENTALES CREADAS EN EL ETER POR
EFECTO DE LAS CEREMONIAS MAGICAS Y RITUALISTICAS QUE CELEBRAN
LAS SOCIEDADES OCULTAS, ESOTERICAS O MÍSTICAS Y ESCUELAS
ESOTERICAS DE ENTRENAMIENTO ESPIRITUAL DE LOS DISCÍPULOS
MUNDIALES
Las Ceremonias mágicas o litúrgicas que periódicamente
celebran las llamadas "Sociedades Secretas", tales como la
Masonería, la Fraternidad Rosacruz, la Orden Mística de los
Templarios, etc., y aquellas otras llevadas a cabo por las
Escuelas Esotéricas de Entrenamiento Espiritual y Centros de
Raja Yoga bajo formas de "meditación oculta" son altamente
beneficiosas desde el ángulo de vista de la evolución
planetaria, pues permiten la invocación de energías superiores
procedentes del Plano mental y la efusión de energía causal de
la Jerarquía por medio de los "Ángeles Solares". Las formas
mentales construidas por la utilización del poder esotérico de
la mente constituyen núcleos de energía espiritual y
normalmente son símbolos geométricos de alta significación
oculta que pueden ser atraídos al aura de tales grupos y
sociedades volviéndola magnética y radiante.
Las ceremonias ocultas tienen carácter meditativo y adoptan
ciertos símbolos geométricos llenos de dinamismo creador como
agentes de invocación, siendo dirigido el proceso mágico de la
liturgia por el poder mental y no por la fe emocional. Esto
hace posible que ciertas energías que normalmente se hallan en
suspensión en los niveles mentales y espirituales puedan ser
puedan ser atraídas hacia aquellos centros invocativos y los
dinamicen con nuevos y más poderosos impulsos. Según sabemos
ocultamente, las Sociedades secretas dignas de tal nombre, las
Escuelas Esotéricas de Entrenamiento Espiritual y los Grupos
de Integración Mental constituidos por discípulos mundiales
pertenecientes a algún definido Ashrama de la Jerarquía, se
hallan bajo la supervisión directa del Adepto Maestro MORYA,
Chohán del Primer Rayo e impulsor en nuestro planeta de las
energías extraplanetarias esotéricamente reconocidas como de
"Voluntad hacia el Bien" y conteniendo el indomable Propósito
del Logos Solar de SER y de REALIZAR.
El tema de las Sociedades Secretas adquirirá cada vez más
importancia desde el ángulo de vista de la Magia Organizada en
nuestro mundo, por efecto de la entrada en actividad de las
energías del Séptimo Rayo. Este, junto con el Primer Rayo,
constituyen el Alfa y el Omega de la Creación Universal,
rigiendo ambos el principio místico de "coparticipación de las
Energías" que origina toda posible objetividad espiritual en
el seno de la materia y tienen la misión de manifestar la
Voluntad de Dios en el Plano Físico por medio del proceso
dinámico de la Magia Organizada, es decir, litúrgica o
ritualística, mediante la cual todo ser humano puede
convertirse virtual o sacramentalmente en un Sacerdote
oficiante, plenamente integrado en el sentido espiritual y
capacitado, por tanto, para "invocar Fuerza Cósmica" con
destino al planeta. Sin embargo, es necesario tener en cuenta
que las verdaderas Sociedades Secretas y Escuelas Esotéricas
son escasas, raras y muy difíciles de encontrar. Con respecto
a ello habrá que decir que, debido a las persecuciones de
carácter religioso sufridas a través de los siglos y a la
falta de integridad espiritual en sus componentes, son pocas
las Escuelas Esotéricas y Sociedades Ocultas que merezcan la
atención de la Jerarquía Planetaria. Hay, no obstante, una
"gran expectación" desde el ángulo interno a la espera de que
entren en actividad las energías del Séptimo Rayo a fin de que
mezclándose con las del Primero, actuante ya en algunos
reconocidos centros esotéricos del mundo, produzcan el divino
revulsivo que ha de conmover las bases místicas de tales
sociedades y corporaciones ocultas y hacer surgir del centro
de las mismas, con el suficiente dinamismo, "nueva sangre y
nueva Vida", para poder afrontar el tremendo reto que les
impone la Nueva Era de acuerdo con las circunstancias que
progresivamente van adueñándose de la vida silenciosamente
invocativa y expectante de la humanidad.
En este Tratado no es nuestra intención introducirnos en el
estudio de las Escuelas secretas y Sociedades ocultas, ya que
lo que pretendemos únicamente, es estudiar las Formas
Angélicas actualizadas a través del alma espiritual de la
humanidad utilizando no importa qué tipo de ceremonias o
fórmulas de liturgia.
En el caso de las Sociedades secretas y Escuelas Esotéricas de
entrenamiento espiritual que hemos venido mencionando, y que
lógicamente no son las únicas existentes en el mundo, hay que
tener en cuenta -tal como dijimos anteriormente- que las
invocaciones que promueven son particularmente poderosas por
venir inspiradas dinámicamente por el poder del Primer Rayo y
porque los Ángeles que responden a las mismas vienen
cualificados por el trepidante dinamismo del Quinto Plano
Cósmico, cuyo reflejo en nuestro Universo es el Plano Mental,
o Cuerpo Mental del Logos Solar. Hay razón, por tanto, de
prestarle una muy particular atención a las fórmulas
invocativas utilizadas por estas Sociedades ocultas de
carácter espiritual, pues, según sabemos esotéricamente,
constituyen los anclajes de la Fuerza espiritual que se
proyecta desde los Centros Ashrámicos de la Jerarquía con
destino al aura mental de la humanidad, produciendo el
despertar de la visión interna y la orientación definida de
las almas hacia la Luz divina que brilla en lo más secreto e
intimo del humano corazón. Por lo que hemos podido comprobar,
tales Formas tienen un carácter eminentemente simbólico y
adoptan en el espacio toda clase de figuras geométricas,
dotadas de refulgentes colores, gráciles movimientos y un gran
poder inspirativo. Tras estas figuras es posible apreciar,
cuando la evolución espiritual lo permite, a los grandes
Ángeles que rigen con singular maestría el mundo de la mente,
ya que de manera misteriosa constituyen el fuego que la rige,
condiciona y cualifica. Se trata de unos Ángeles de categoría
muy especial y están entrañablemente vinculados a la evolución
de la gran familia humana. En la "DOCTRINA SECRETA" son
denominados "Ángeles Solares" y, según se nos dice,
esotéricamente poseen conciencia cósmica, es decir, que son
unos Iniciados de todos los grados. Se nos dice también que su
perfección proviene de un Universo anterior, estando
misteriosamente unidos a los seres humanos en virtud de "un
voto inquebrantable" formulado ante el propio Logos Solar y
que consiste en "permanecer al lado de los hijos de los
hombres hasta el momento culminante en que, habiendo alcanzado
éstos la Liberación, puédase penetrar en el Nirvana". Los
Ángeles Solares son virtualmente los impulsores de la
evolución de las Mónadas Espirituales que realizan su
evolución en el Reino humano, y su trascendental resolución de
permanecer al lado de los hombres para acelerar el proceso de
evolución del Cuarto Reino es un secreto iniciático que
oportunamente será revelado. Hay Ángeles Solares en todos los
Rayos, y, debido a que por su intima cualidad de Adeptos
poseen "conciencia jerárquica", están vinculados con la obra
de la Jerarquía planetaria y contribuyen con su valiosa e
indescriptible cooperación al desarrollo del Plan que lleva
adelante el Logos de nuestro Esquema Terrestre. Pues bien, un
grupo especial de Ángeles Solares del Primer Rayo vivifican
con la Luz de sus vidas radiantes los dinámicos impulsos que
surgen de los grupos esotéricos, sociedades ocultas y escuelas
de entrenamiento espiritual y los convierten en figuras
geométricas dotadas del suficiente poder invocativo como para
convertirse en centros magnéticos de atracción mental para
todos los seres humanos, cuyas mentes, siguiendo los sagrados
impulsos internos, ascienden por encima de los pensamientos
concretos e intelectuales y buscan el camino de la Intuición
espiritual que tales formas geométricas señalan.
Formas creadas en los distintos subplanos del Plano Mental por
las invocaciones o meditaciones de los seres humanos
Como dato preliminar debemos hacer una distinción entre la
meditación propiamente dicha y la oración o plegaria. La
meditación es de tipo mental y se realiza por medio del centro
AJNA, en tanto que las oraciones y plegarias son de carácter
emocional y se realizan utilizando el centro del PLEXO SOLAR o
el Chacra CARDIACO, según sea la evolución espiritual de las
personas que las efectúan. Hecha esta aclaración, sólo habrá
que añadir que las meditaciones humanas serán tanto más
potentes y efectivas cuanto más elevado sea el nivel desde
donde son realizadas. Esto nos llevará por analogía a
considerar el aspecto jerárquico o evolutivo que encubre esta
idea, ya que es la evolución mental de los seres humanos la
que les sitúa automáticamente en el nivel requerido de
meditación o invocación mental y no la voluntad individual o
el llamado libre albedrío. Deberemos deducir, por tanto, que
hay Siete niveles de meditación, correspondiendo cada uno a un
subplano determinado del Plano Mental, lo cual quiere
significar también que habrá Siete particulares tipos de
Formas a ser consideradas desde el ángulo de la observación
clarividente, las cuales se extenderán desde las formas
kamamanásicas más corrientes a las sutilísimas formas -casi
imposible de ser percibidas- del subplano atómico del Plano
Mental, en donde se hallan en sus preciosos estuches de
esencia espiritual los átomos permanentes mentales de los
seres humanos. Hay que tener en cuenta al respecto que las
formas mentales, constituyendo una gama infinita de
variedades, son condensadas y construidas en cada subplano por
la actividad de ciertos Devas, cuya misión es darles forma y
consistencia objetiva a los impulsos mentales de los seres
humanos, creando así en los distintos subplanos una serie
impresionante de zonas "radiactivas" -si podemos utilizar esta
expresión- que influyen poderosamente en la vida mental y
social de los seres humanos.
La dificultad de percepción clarividente en el Plano Mental es
notoria cuando han de observarse las formas geométricas propio
tiempo la riqueza infinita de significados que entrañan,
teniendo muy presente que a veces la misma forma geométrica
tiene un significado distinto cuando se aúna a la percepción
clarividente, un muy notable desarrollo de la intuición
espiritual. Es obvio que dichas formas deberán ser
cuidadosamente observadas y que no deberán ser extraídas
consecuencias de inmediato. La observación tendrá que ser
realizada muy pacientemente hasta que la luz intuitiva señale
de manera absoluta y sin error posible si la forma mental
observada es una simple figura geométrica o si es un símbolo
mental lleno de espirituales significados.
El símbolo mental y la forma geométrica propiamente dicha son
partes consubstanciales de un proceso invocativo llevado a
cabo por la humanidad desde el principio mismo de su historia.
Son el legado de la experiencia de las edades, y la
prodigalidad de Formas geométricas -que son símbolos
expresivos de la Vida de la Divinidad, por cuanto “Dios
Geometriza"- le indicarán siempre al hábil y paciente
observador de la vida oculta de la Naturaleza el grado de
evolución mental de cualquier ser humano por la calidad, forma
y potencialidad magnética del aura mental que le circunda.
Como ya dijimos en un capítulo precedente, hay tres figuras
geométricas principales de las cuales se derivan todas las
demás que pueden ser percibidas en el aura mental de cualquier
persona como factores condicionantes de su evolución interna:
el cuadrado regular, el triángulo equilátero y el circulo
perfecto. Estas tres figuras constituyen los tres Símbolos
máximos de la evolución particular o psicológica de nuestro
Logos Solar, el Cual, como sabemos, evoluciona por medio de
Tres Universos a fin de cumplimentar los Designios de Su
Omniabarcante Voluntad Creadora. En el primer Universo el
Logos Solar llegó a la perfección del Cuadrado, es decir, de
Su Personalidad Psicológica Inferior. Actualmente, es decir,
en este Segundo Universo "en donde vivimos, nos movemos y
tenemos el ser", está desarrollando el aspecto AMOR, de Su
Naturaleza Divina, y todas las Facultades de Su Alma están
centralizadas en la evolución de Su indescriptible TRIADA
ESPIRITUAL, simbolizada en la figura geométrica del Triángulo
Equilátero, y según se nos dice esotéricamente en el próximo
Universo desarrollará el Aspecto Monádico o Esencial de Su
Vida Divina, con lo cual cerrará un Ciclo Cósmico de
perfección y realizará en su máxima y eficaz expresión la
figura geométrica del Círculo perfecto. Estas tres figuras
geométricas rigen, por tanto, la totalidad del proceso Logoico
de Perfección, pudiendo ser deducidas de acuerdo con la
analogía estas posibles relaciones:
Tales relaciones pueden ser íntegramente aplicadas al ser
humano y a las Entidades angélicas en todas sus posibles
jerarquías, habida cuenta que Dios, el Logos Solar, es el
Factor indescriptible mente COHERENTE que todo lo abarca, todo
lo incluye y todo lo vivifica. Así, de acuerdo con las
explicaciones antecedentes deberemos apreciar en los símbolos
geométricos del Cuadrado, del Triángulo y del Circulo una
potencialidad realmente magnética y trascendente cuando el
hombre pueda utilizarlos en forma inteligente e inspirado por
la buena voluntad del corazón. Bastará decir al respecto que
el modo habitual de pensar de cualquier persona es cualificado
espiritual y psicológicamente de acuerdo con el poder que
emana de las figuras del cuadrado, del triángulo o del
circulo, grabadas en su aura mental y que "flotan"
etéricamente a su alrededor, siéndole fácil al clarividente
entrenado deducir la evolución espiritual de cualquier persona
por la cantidad y calidad de los cuadrados, de los triángulos
y de los círculos que pueden serle apreciados en su aura
magnética. Es lógico pensar, por tanto, que el entrenamiento
espiritual, utilizando el proceso científico de la meditación
oculta de contacto con el Ser superior o Angel Solar, se
basará en la utilización inteligente de las formas geométricas
antes descritas como motivos substanciales de perfección. La
visualización del Cuadrado ofrecerá integración de los
vehículos de expresión personal: el cuerno físico, el vehículo
etérico, el cuerpo astral y la mente inferior. La
visualización del Triángulo equilátero ofrecerá la oportunidad
de establecer contacto con la mente superior y con el Angel
solar y la visualización del círculo perfecto ayudará a
establecer contacto trascendentes con los aspectos monádicos
centralizadores de la Presencia Divina en el corazón del
hombre. Todo el proceso acompañado naturalmente de un profundo
sentido de los valores humanos, de una mente muy perspicaz y
un gran amor hacia la humanidad.
Otra idea a tener en cuenta con respecto a la singularidad del
proceso invocativo o meditativo es que cada forma geométrica
realmente simbólica irradia un color y emite un particular
sonido y que la infinita combinación de tales sonidos, colores
y formas geométricas dan razón de la increíble cantidad de
elementos psicológicos que adornan a la humanidad en cualquier
momento cíclico de su evolución planetaria. Buscando las
relaciones que existen entre los seres humanos y la Divinidad
creadora podríamos establecer las siguientes relaciones:
En la línea de estas relaciones podríamos extendernos hasta el
infinito, pero lo dicho será suficiente para que nos demos
cuenta de la importancia de los símbolos y de las figuras
geométricas que concurren en el proceso de la evolución de los
seres humanos a través de las edades y dan idea de la calidad
de los Ángeles que les asisten en tal proceso. Quizá sería de
utilidad que estableciésemos una nueva tabulación incluyendo
en ella a las Entidades Dévicas relacionadas con los símbolos
geométricos principales y a los Elementales Constructores que
secundan su labor en el proceso evolutivo. Por ejemplo:
Ahora se podrá pasar, de acuerdo con estos datos, a examinar
las formas geométricas o símbolos espirituales que surgen de
las "deliberadas meditaciones", es decir, científicamente
controladas por el individuo y persiguiendo una finalidad de
Síntesis.
Quizá antes debemos explicar la sutil distinción que existe
entre una forma geométrica aparecida en el plano de la mente y
el símbolo arquetípico de una idea. En el primer caso, y
debido al escaso poder de atención, observación y calidad
mental que posee el ser humano -a pesar de las instrucciones y
ayuda de los Ángeles-, las formas geométricas que puede
percibir a su alrededor y a través de su aura mental son
irregulares, imperfectas y sin apenas color y radiación
magnética. Son las formas más corrientes y las principalmente
perceptibles en la mente por su irradiación durante el proceso
de la meditación. Como dato curioso extraído de nuestras
propias observaciones, podemos decir que una persona
perfectamente integrada en sus impulsos, tendencias e
inclinaciones físicas ve aparecer en su aura mental pequeñas
formas geométricas de cuadrados perfectamente regulares y de
vivos y variados colores, los cuales dependerán de sus estados
de conciencia. Si se observa a una personalidad humana que
añade a esta integración física cualidades morales y un alto
refinamiento psicológico, se percibirá en su aura magnética
una cantidad increíble de diminutos triángulos equiláteros,
los cuales se suman a los cuadrados ya construidos
constituyendo una impresionante variedad de formas geométricas
de fúlgidos y brillantes col6res; pero si a estas cualidades
antes descritas se le añade una perfecta integración
espiritual, como en el caso de los discípulos avanzados y los
Iniciados, entonces el espectáculo del aura magnética será
sencillamente impresionante, pues a las figuras anteriormente
señaladas se le agregan una serie incalculable de pequeños
círculos refulgentes como soles, estableciéndose como
consecuencia nuevas y más expresivas combinaciones
geométricas. La sutil distinción entre una figura geométrica,
tal como aparece en un espacio tridimensional, y los símbolos
espirituales formados por bellas y perfectas combinaciones de
formas geométricas, tal como son percibidas en los niveles
superiores del Plano Mental, sólo pueden ser establecida por
un observador altamente cualificado, capas de leer en cada uno
de los símbolos sus significados esotéricos y mágicos. Es
interesante remarcar aquí que cada símbolo verdadero -y no
cualquier tipo de figura geométrica- puede descomponerse en
una impresionante cantidad de ideas, de la misma manera que
una idea puede descomponerse en una multiplicidad de
pensamientos. La forma más fácil de llegar a la perfecta
interpretación o intimo significado de un símbolo sería quizá
"reducir la mente a su más simple expresión", dejándola
"vacía" de los ordinarios pensamientos e imágenes conocidas, y
a partir de esta aparente "nadencia" reflejar en la mente por
vía intuitiva el grado de sabiduría o de conocimiento perfecto
asignado a aquel símbolo por la propia Divinidad. Esto nos
llevaría a analizar por analogía los principios sagrados del
lenguaje dévico y el que utilizan los grandes Iniciados, que
emplean preferentemente símbolos en vez del lenguaje
corriente, teniendo en cuenta que el símbolo posee el valor
inapreciable de la Intención y que la Idea representa sólo la
cualidad de esa Intención, aunque reflejada o expresada en la
prodigalidad de pensamientos que puede surgir de cada una de
las Ideas.
Llegados a este punto, y habida cuenta de que nuestro
propósito en este Tratado es clarificar lo mejor que nos sea
posible la espiritual vinculación del Reino humano y del Mundo
de los Ángeles, tenemos que expresar que una de nuestras
grandes sorpresas al tratar de averiguar el significado
esotérico de los símbolos que los Ángeles introducían por vía
del éter en la mente humana fue el descubrir que las raíces
del lenguaje articulado de la humanidad se hallaban
precisamente en aquellos símbolos. Dichos símbolos eran
precisamente los medios de comunicación de los Ángeles entre
si, cuyo lenguaje -contemplado en distintos niveles de
expresión- es esencialmente geométrico y simbólico, aunque
dotado de una profusión de formas y colores de cada vez más
rara e incomprensible belleza, a medida que la percepción del
observador clarividente va ascendiendo internamente y
alcanzando más altos niveles de integración espiritual. Quizá
esta idea puede aclararnos las sutiles motivaciones de la
mente humana que ha llegado a un punto en que, "desgastada por
la acción de las edades", reduce su volumen y paradójicamente
"extiende su dimensión", llegando a un estado perfectamente
NEUTRO, a ese punto CERO infinito perdido en la inmensidad del
Cosmos, a partir del cual los pensamientos ordinarios y
superficiales han desaparecido de la mente, siendo
reemplazados, tras el espontaneo proceso de una maravillosa
ALQUIMIA espiritual, por la comprensión esotérica del
significado de los símbolos. Ello presupone la introducción en
un nuevo mundo de altas y secretas concepciones en donde el
SÍMBOLO tiene perfecta identidad y es reconocido sin dudas
como la base mística de la Creación, por cuanto DIOS es el
GRAN GEOMETRA DEL ESPACIO y el SÍMBOLO será siempre una figura
geométrica encarnando los Propósitos y las Ideas que surgen de
la Mente de la Divinidad. Y, naturalmente, la comprensión
exacta e intuitiva de los SIMBOLOS nos llevará
indefectiblemente y por analogía a la comprensión y
reconocimiento de las Entidades que encarnan dichos Símbolos,
es decir, los Ángeles, los Devas, los Moradores del Espacio,
con los cuales, si nuestro grado de integración espiritual lo
permite, podríamos establecer profundas e íntimas relaciones
de fraternal amistad y descubrir progresivamente el secreto
místico de su universal lenguaje. La aclaración de este punto
nos ayudará a comprender la importancia de las meditaciones
humanas cuando son realizadas con pureza de intención y
elevado sentido espiritual, es decir, sin pretender beneficios
de tipo personal, ya que la MEDITACION, considerada desde el
nivel angélico, es un Acto de Ofrenda, de Servicio y de
Sacrificio, habida cuenta de que los Devas mentales utilizan
los impulsos creadores de la mente para construir las
adecuadas formas geométricas. Estas formas, "suspendidas sobre
los ambientes sociales del mundo", promueven el desarrollo
social o comunitario de la Raza y establecen las bases de su
futuro bienestar. Este es realmente el significado esotérico
de la Meditación Oculta -tal como es enseñada y practicada en
las verdaderas Escuelas Esotéricas- y esta es la enseñanza
mística que los Ángeles están tratando de llevar al mundo en
los inicios de esta Nueva Era que ya hemos empezado a vivir.
Puede decirse con toda seguridad que los individuos que
"meditan" pensando únicamente en los beneficios individuales
que la misma puede aportarles sólo manipularán formas
geométricas llenas de cuadrados irregulares, es decir, formas
negativas de pensamiento agrupadas en torno al interés egoísta
de la personalidad. Sin embargo, a medida que prosiga la tarea
meditativa y el alma espiritual va siendo contactada, el
interés meditativo se desplazará lentamente hacia el “interés
comunitario", hacia el grupo mayor constituido por la
humanidad con toda su infinita proyección de necesidades...
Más adelante, el alma del aspirante espiritual recibirá las
inspiraciones e instrucciones que le enviará su Angel Regente
en el Plano Causal y su visión de las cosas, así como los
verdaderos motivos de la Meditación aparecerán ante su atenta
visión como un Mandato supremo al cual inexorablemente habrá
de adaptarse y conformarse, para llegar finalmente a un punto
en el que puede enfrentar "cara a cara" -tal como
esotéricamente se dice- a su ANGEL SOLAR, Señor de su vida y
de su destino, y ya desde aquel momento sabrá el alma humana
por visión directa y sin deformaciones mentales el valor
infinito de los SÍMBOLOS, la CUALIDAD de las IDEAS y el
sentido real de todos y cada uno de los pensamientos
suscitados o evocados por la potencialidad de las Ideas. El
esfuerzo de la meditación, en un intento de integrar
perfectamente el cuaternario inferior, dará como resultado la
creación de cuadrados regulares en el aura magnética. El
contacto espiritual con el Angel Solar permitirá la
construcción dévica de una profusión infinita de triángulos
equiláteros surgiendo como chispas de fuego del aura mental y
la entrada en "la corriente iniciática", que el contacto con
el Angel Solar habrá propiciado, deparará la aparición de
refulgentes y diminutos soles en toda la extensión de su campo
magnético... Así, aun dentro de los límites que le son
impuestos al hombre en la vida de la Naturaleza, podremos
decir que él, al igual que la propia Divinidad, también
GEOMETRIZA, también crea e idealiza dentro de su diminuto
universo.