Dense cuenta, que habida cuenta que Shamballa tiene siete esferas, cada
una de estas esferas esta condensando un número determinado de seres
humanos, que surgiendo del pueblo, de lo que se llama pueblo de Dios en
todas sus diferentes ramificaciones, está penetrando de una manera
consciente o inconsciente en la primera de las esferas de Shamballa, de
ahí, que la esfera más dilatada donde se encuentra más gente que está
tratando de buscar el aspecto superior de sí mismos, está aquí, en el
aspecto más lejano del Centro Místico, del Corazón del Padre, de Sanat
Kumara, el Señor del Mundo, y que por lo tanto, a medida que el ser humano
dentro de una esfera de Shamballa está evolucionando, las pruebas son más
difíciles, psicológicamente hablando, hay más crisis en su existencia, más
conceptos a desarrollar, más murallas que atravesar, más dificultades que
vencer, por lo tanto, a medida que partiendo de la periferia nos vamos
acercando al centro de Shamballa, es menor la cantidad de gente que puede
resistir las pruebas. Si asignamos a cada una de ésta secciones del cono,
que visto de una manera longitudinal se nos aprecia en forma de una esfera
seccionada con siete departamentos, con siete esferas, veremos que aquí
hay mucha gente, aquí menos, menos, hasta que aquí solamente quedan los
elegidos, los grandes discípulos, los grandes iniciados. Pero dense
cuenta de una manera muy objetiva, lo que hay que entender por inmanencia
y por trascendencia, porque cualquier individuo que esté en el sector más
periférico, el sector inmediatamente superior será su aspecto trascendente
hacia el cual está orientando todas sus pesquisas. Entonces, hay un punto
de paso que va de la existencia, digamos inmanente a la existencia
trascendente y un camino, éste camino se llama esotéricamente la
Iniciación. Así que, para que un individuo inmanente en éste sector,
pase a éste sentimiento superior, a ésta esfera superior de sí mismo que
es su trascendencia inmediata, debe atravesar una frontera, una frontera
que llamamos la Iniciación, un tema sobre el cual no me voy a
declarar, porque corresponde a los estudios del Sr. Llucía, como ustedes
saben, que está trabajando en el sentido de las iniciaciones y el trabajo
de los discípulos para llegar a éstas consecuencias, estoy hablando en
términos muy abstractos y muy generalizados, pero es la analogía de lo que
implica la inmanencia y la trascendencia y su consecuencia inmediata, que
es la Iniciación. Vayan siguiendo, una vez el ser inmanente se haya
convertido en un ser trascendente, al llegar aquí se encuentra que tiene
una trascendencia superior, entonces se convierte otra vez en inmanente,
es él, solamente él, ya no es aquello que buscaba anhelantemente, tendrá
que abrir otro camino, otra iniciación. Y así, a través del tiempo, el
hombre se va iniciando, hasta que llega a establecer contacto con Sanat
Kumara, el Señor del Mundo.
Rápidamente hemos expuesto, lo que es la inmanencia, el yo, la
trascendencia, el Dios que nos aguarda en cada recodo del gran camino, y
lo que es la iniciación, el punto de paso que podemos llamar sobrenatural,
porque todo cuando va de aquí a aquí es sobrenatural, y al menos para el
discípulo siempre es sobrenatural aquello que no puede percibir con los
medios físicos, y cuando llega por ejemplo, en términos de planos, al
plano astral, todas las experiencias astrales vistas desde el ángulo de
vista físico es sobrenatural. Si dominamos completamente el plano astral,
todo cuanto sucede fuera de las fronteras de nosotros mismos que no
podemos comprender por la razón es sobrenatural, y entonces vamos viendo
otra noción, otra idea. Lo sobrenatural es siempre aquello que se gobierna
a través de la iniciación cuando se pasa de la inmanencia a la
trascendencia. Sin embargo, hay un hecho que debe ser completamente
estudiado y mantenido dentro de la mente como sujeto de gran interés
espiritual, es ¿por qué sucede todo esto?, ¿por qué el sentimiento de
inmanencia, o el sentimiento de trascendencia?, ¿por qué el trabajo, el
trabajo específico de cada ser humano, buscando la Casa del Padre, como
místicamente se nos dice? Siempre este gran proceso hacia adelante, hacia
arriba y hacia dentro, es simplemente las leyes de la evolución, la
evolución desde el más humilde de los átomos del reino mineral, hasta
llegar a los grandes conceptos estelares de los mundos superiores del
sistema, siempre hay un abrir y cerrar puertas, vamos siempre de lo
pequeño a lo grande, aumentando, y aumentamos precisamente, nos
desarrollamos en espiral, pasamos por aquí, atravesamos una frontera, y
vamos del plano físico, la conciencia física o autoconciencia física, y
pasamos a la conciencia astral, y cuando dominamos perfectamente la
conciencia astral, es decir, que somos autoconscientes en el plano astral,
pasamos al plano mental, y así sucesivamente hasta llegar a las más
elevadas iniciaciones, porque la ley de la verdad es la revelación. La
revelación es éste camino, y la continuidad de la revelación pertenece a
los Grandes Avatares, aquellos grandes seres que surgiendo del Centro
Místico de Shamballa, están señalando constantemente el camino del hombre
que busca a Dios. Jamás nos encontramos solos en nuestras pesquisas,
aunque a veces no podamos ver nada y el cielo nos parece de bronce, como
decía San Agustín, y sin embargo, jamás estamos solos, siempre estamos
dirigidos, penetrados e inspirados por Shamballa, por el Dios del Mundo,
de quien se dice que no es ajeno ni aún a la simple brisa que hace caer la
hoja de un árbol, la muerte de un pajarillo, y hay, como ustedes saben, un
gran poema hindú, para que vean la importancia del ser humano, cuando se
le dice: ¡Oh Lanú – Lanú o el discípulo – el parpadeo de tus ojos
afecta a la estrella más lejana. La importancia del hombre dentro del
Universo, dentro de un sistema cósmico septenario, la importancia es que
es el centro de todas las cuestiones, y realmente ¿dónde surge la fuerza?,
la fuerza, del hombre, máxima se encuentra en éste punto. El plano
búdico, es el centro del sistema, aparentemente el centro está aquí, pero
él, Sanat Kumara, el compás de su vida lo tiene aquí, y realmente existe
una unificación de dos esferas, la una la extensión, el círculo no se
pasa de Sanat Kumara, y la otra, la fuerza que proveniente del cuarto
plano, el plano búdico, nos da vida a la humanidad, es el recipiente de
las energías del 4º rayo, esta llevando un proceso que viene, nada más y
nada menos que de la Constelación de Libra, que constituye el sistema
búdico-cósmico de nuestro sistema solar, lo cual implica, el porqué el
individuo, el ser inmanente, está visto desde el punto de visión de los
grandes seres, como lo más importante que existe en el sistema planetario
y en el sistema universal, no la humanidad del planeta Tierra, sino todas
las humanidades que tienen su razón de ser en cada uno de los planetas
existentes dentro de nuestro sistema cósmico, que engloba siete sistemas
solares, entre ellos la Constelación de Libra. Entonces, podemos decir que
hay abierto un camino que va de la periferia hasta éste punto, desde el
punto de vista iniciático, donde existe la mayor crisis de la inmanencia,
en donde el hombre inmanente se convierte automáticamente en un Dios
trascendente, se convierte en un Adepto, en un Maestro de la buena ley.
Dense cuenta lo que dice la tradición hermética, el discípulo solamente
puede arrostrar la presencia de Sanat Kumara, cuando ha recibido la
tercera iniciación, es decir, cuando ha llegado aquí, entonces lo que
sucede es uno de los grandes misterios que sólo puede reconocer el Arhat,
aquél que alcanzó y triunfó de las pruebas de la pasión y muerte, y que
por lo tanto, por haber sacrificado toda su vida en los tres mundos se ha
hecho Señor de los tres mundos y penetra en el plano búdico, y se
convierte en un habitante del plano búdico, aunque tenga conciencia
física, él puede establecer contacto directo con el plano búdico, que es
el plano del amor universal, que es el plano de la unidad, que es el
centro de las energías provenientes de Shamballa que van del primero,
segundo y tercer plano, hasta el quinto, el sexto y el séptimo, el cuatro
siempre es el centro de la evolución en un sistema septenario. Y todo
cuanto viene de aquí, se denomina, psicológica, técnica, filosófica y
místicamente, la comunicación o la revelación, es decir, la continuidad de
lo que proviene de Sanat Kumara, desde el centro, envía sus energías al
plano búdico, y de aquí, de ésta relación de Sanat Kumara con el plano
búdico, surgen los Grandes Avatares, aquellos que vienen a inspirar a la
humanidad, que vienen a depositar las energías que provienen del sistema
cósmico, que vienen a llevar una oleada de vida constante, para que los
pobres seres humanos, las plantas, los minerales, los vegetales, los
animales puedan surgir triunfantes y que todas tengan su oportunidad,
porque hablamos en términos humanos hasta aquí, porque hablamos de una
esfera de Shamballa o de siete esferas, pero que sucede cuando alargamos
éste cono, surgirá entonces automáticamente, el reino animal, el reino
vegetal, el reino mineral, y éstos también tienen su oportunidad, porque
realmente la oportunidad está que, todo cuanto tiene un sentido de
inmanencia, y es que todo cuanto existe tiene un alma, se tiene que
desarrollar por el impulso que viene del centro, que viene de acá, del
Señor del Mundo, y todo cuanto progresa hacia arriba lo llamamos el
Sendero de la Iniciación, el Sendero de la Evolución, porque
existen iniciaciones también cuando se pasa del reino mineral al reino
vegetal, o del reino vegetal al reino animal, o cuando el animal se
convierte en un hombre, siempre es que existe este abrir y cerrar, este
extender constantemente el círculo no se pasa de nuestra
conciencia, desde que surgimos como una conciencia meramente atómica,
hasta cuando nos convertimos en un propio Dios, con la misma fuerza, los
mismos atributos, las mismas energías y la misma jerarquía que éste Señor
que está aquí. ¿Se han dado cuenta alguna vez cuando hablamos de
Shamballa, que nos estamos preparando para ser Logos, y que todo cuanto
estamos aprendiendo ahora es adquirir una experiencia logóica?, de qué
sino, de que nos servirían tantas explicaciones si en el fondo no
comprendiésemos que realmente estamos trabajando en este sentido, que
vamos del átomo al hombre y del hombre a Dios, solamente hay que adquirir
la conciencia suficiente, y la atención más profunda para comprender éstas
ideas aparentemente tan abstractas y sin embargo tan concretas, si podemos
comprender el sentido de ésta pequeña explicación, y ahora vamos ya a
entablar el diálogo porque yo creo que es lo más interesante, la
exposición está hecha, tenemos unos puntos a tratar, la inmanencia, la
trascendencia, la iniciación, lo sobrenatural de aquello que constituye la
línea recta de la evolución y la línea de los grandes comunicadores
surgiendo siempre de Shamballa, y cuando la necesidad es perentoria de
Shamballa hasta el sistema cósmico. Siempre tendremos la ayuda, Sanat
Kumara se siente ayudado por sus Grandes Maestros cósmicos, como nosotros
nos sentimos ayudados por los miembros de la Gran Fraternidad, y los
miembros de la Gran Fraternidad están siendo, canalizando sus energías o
haciendo de transmisores de la energía que proviene de Shamballa, y que la
humanidad tiene que convertirse un día en un agente de Shamballa aquí en
la Tierra.
Creo que son temas muy interesantes, quizá ustedes dirán: “Bueno, pero
esto no es práctico”. ¿Qué es práctico, entonces, para ustedes?, es una
pregunta que ustedes deben responderse a sí mismos, ser prácticos, ¿qué
significa?, ser prácticos es darse cuenta de la situación psicológica
exacta de su inmanencia, aquello que podíamos de saber situarse en
conciencia, y saber obrar en conciencia desde el punto de vista que hemos
alcanzado, y no pretender los mundos superiores, sin ser consecuentes del
mundo que nos rodea, ser consecuentes de la miseria del mundo, y también
de la gran belleza que contiene el mundo, entonces todo cuanto surge de
nosotros siempre será una constante revelación de la trascendencia dentro
de nuestra pequeña conciencia de inmanencia, y así iremos caminando,
siempre, sin jamás encontrar afortunadamente una meta de llegada, igual
que Sanat Kumara no será una meta, por lejana que sea, fija para nosotros,
sino que esto que ahora nos parece inconcebible será rebasado, buscando
otros horizontes únicos, y aquí hay muchas ideas para desarrollar, verdad.
Pregunta -
¿Cuando dejamos nuestro cuerpo físico por la noche, vamos a Shamballa,
cuándo lo dejamos definitivamente después de muertos, por decirlo así,
vamos a Shamballa también o vamos a otro sitio, o como es esto?
Vicente
-
Es que Shamballa lo es todo, la persona que tiene conciencia física está
aquí, – explica en pizarra –, en una pequeña esferita
dentro de la esfera de Shamballa, ¿qué hacemos nosotros en el proceso del
sueño?, se nos abre una pequeña puertecita aquí, y pasamos al plano
astral, o a la cuarta dimensión si ustedes prefieren un término técnico,
¿y que sucede aquí?, vemos cosas que en la incapacidad a veces de
desarrollarlas, decimos: son manías, porque a veces tenemos revelaciones a
través del sueño, que siempre hay un punto de trascendencia aquí, saliendo
de la inmanencia actual, entonces, ¿qué sucede con el sueño?, creo que lo
hemos tratado en otra ocasión, pero vuelvo a recordar que nosotros no
solamente tenemos aquí un punto de autoconciencia física, sino que nuestro
cerebro y nuestra conciencia esta muy ligada todavía al mundo animal, y me
perdonen ¡eh!, pero es así. El animal para nosotros es el pasado, y el
Dios es el futuro, entonces nos debatimos siempre dentro de un plan de
inmanencia, entre las tendencias instintivas, la razón, la cordura, el
intelecto, buscando siempre un punto de vista superior, intuitivo; en el
sueño se nos revelan cosas, pero cada persona debe saber lo que significan
sus sueños, no llevo el manual de sueños porque cada persona es distinta,
por su propia evolución cada persona extrae del subconsciente instintivo
lo que proviene de un pasado, más o menos animalizado, de los contactos
más o menos consecuentes que establece con el plano astral, naturalmente
lo que decíamos, cualquier hecho experimentado por la conciencia inmanente
del plano físico, cuando liberado el cerebro físico de éste complejo, y
pasa incidentalmente al plano astral, ¿qué le sucede?, entonces absorbe de
aquí algo, para el cual seguramente no tiene medios, métodos de expresión,
entonces, sirviendo de enlace el sentimiento que ha despertado dentro de
él, en su conciencia lo que ha visto, extrae del inconsciente colectivo de
la raza, aquello que más se asemeja a lo que ha visto y comprobado en el
plano astral. Llegará un día que nos veremos astralmente tal como
físicamente nos vemos ahora, respiramos, sentimos, experimentamos
físicamente, pero llegará un día, no un sueño, una realidad, que seremos
tan autoconscientes en el plano astral como en el plano físico, entonces
el plano astral tendrá peso y medida, ahora no, ahora es éter, no lo
podemos coger con las manos, como el aire, y sin embargo el aire es
físico, fíjense ustedes cuando hablamos del aire en un sentido astral,
tendremos el mismo problema, pero al menos, así como ahora nos vemos en
relación con los demás con una presencia que conocemos muy bien, cuando
estemos autoconscientes en el plano astral nos pasará lo mismo, seremos
autoconscientes de nuestra personalidad y de todo cuanto nos rodea,
tendremos conciencia astral, mejor dicho autoconciencia astral, y lo mismo
sucederá con el plano mental, porque entonces, tendremos una conciencia
mental tan potentemente organizada que todo cuanto comprobemos y
experimentemos en el plano mental tendrá peso, medida y dimensión
reconocida. Aquí hay el gran problema de los sueños, porque los sueños en
realidad son una vivencia, y hay sueños más vivos que la propia realidad
física. Yo creo que todos hemos tenido algún sueño que nos ha dado una
razón de la realidad tan viva o más que en el plano físico, son aquellos
sueños que jamás olvidamos, que jamás podemos olvidar porque han sido
contactos conscientes con el plano astral o con el plano mental, además en
el llamado sueño claro, el discípulo establece contacto con su Maestro,
habla, dialoga con él, y esto sucede siempre cuando un sueño claro se
realiza, naturalmente, en el plano mental, o en la esfera mental de
Shamballa, que es lo mismo, y así hasta que en el caso del Arhat somos
autoconscientes en el plano búdico. La única noción que tenemos del plano
búdico es la conciencia de paz, o la inspiración, o la intuición, cuando
el razonamiento encuentra una frontera infranqueable y estamos, sin
embargo, interesados en descubrir lo que hay más allá de esa frontera, y
porfiamos, nos esforzamos, luchamos porque nuestro sentido de inmanencia
queda difuminado y queremos algo más, algo trascendente, entonces viene la
intuición, desaparece el razonamiento. En realidad todo cuanto puede ser
razonado es limitado, y aquello que es más grande que el razonamiento es
siempre superior, de ahí, que ha surgido de éste plano a través de la
impresión de Sanat Kumara, el Yoga de Fuego o el Yoga de
Síntesis. Síntesis no es el extremo de una cuestión, síntesis es el
centro de todas las cuestiones, no hay meta, verdad, en el centro, sólo
hay metas en las periferias de las cosas, es decir, que solamente buscando
la analogía de los sueños, vemos que puedes ser un soñador que tiene
autoconciencia astral y que en el sueño tienen autoconciencia mental y que
pasa después a través de la iniciación al plano búdico y se convierte en
un Arhat, o cuando pasa aquí al plano Átmico, se convierte en un Adepto,
en un Maestro de Compasión y de Sabiduría, y saber, ya que hablamos de
Shamballa, que hay una relación entre un Adepto, entre un Maestro de la 5ª
Iniciación y Sanat Kumara, la misma diferencia que existe entre un ser
corriente y un Adepto, se dan cuenta de la grandeza de este ser, y de la
dificultad que entraña, por descubrir el íntimo secreto, que oculta los
arcanos del Señor del Mundo para el ser humano, y para todas las
humanidades. En todo caso dense cuenta, que todo debe ser analizado de
acuerdo con el sentido de la analogía, porque todo es igual, todo es
semejante, solamente aumenta la proporción, la extensión y la medida entre
un átomo y un universo, pero en principio la ley es la misma, siempre será
un punto central inmanente que busca su trascendencia, y a partir de aquí
lo sobrenatural, la evolución.
Pregunta
-
Yo quería hacer una pregunta, la humanidad, aparentemente el ser humano
tiene control o el poder de remover los otros reinos inferiores, ¿no? el
animal y el vegetal ¿Les está ayudando a aquellos a que evolucionen, o se
está creando a la vez un karma, como ves esto?
Vicente
-
Como está en el centro del planeta, de la evolución planetaria, el ser
humano participa de la gloria de Dios y también de las dificultades
instintivas que provienen de los reinos inferiores, es decir, que tiene
por ejemplo la tríada, y tiene tres cuerpos inferiores, es lo que he dicho
en muchas ocasiones. Qué le ofrece, por ejemplo, Sanat Kumara al alma, a
través de los Tres Reyes Magos, Gaspar, Melchor y Baltasar, están mal
descritos por la iglesia, desgraciadamente, ¿qué le ofrecen al niño Dios?
Oro, incienso y mirra, un cuerpo físico, un cuerpo astral y un cuerpo
mental, o bien su relación con el reino mineral, con el reino vegetal y
con el reino animal, ¿qué decía Madame Blavatsky? “El hombre es un Dios
más un animal”, así, y así es. Por lo que tenemos de animal ayudamos a
los reinos inferiores, por lo que tenemos de divino, recibimos la
influencia de Sanat Kumara a través de los planos y a través de los Seres
de la Jerarquía, es decir, que si no existiese el ser humano no habría
evolución posible ni en el reino mineral, ni en el vegetal, ni en el
animal, ¿por qué? porque es el centro, lo hemos dicho aquí, está en el
centro, son los Ángeles Solares, los Agnisvhatas del plano búdico los que
nos dieron la mente, por lo tanto, las unidades de la cuarta jerarquía
crearon la humanidad, la humanidad es el cuarto reino de la naturaleza,
luego es el centro de los reinos, es el centro de toda la evolución, por
lo tanto, claro que ayudamos a los reinos inferiores, a través de la mente
concreta, a través del cuerpo emocional y a través del cuerpo físico,
porque participamos del reino mineral en el plano físico, del reino
vegetal en el plano emocional y del reino animal en el plano mental,
porque el animal tiene una mente incipiente. ¿Qué paso cuando vinieron los
Ángeles Solares, cuando los Señores provenientes del quinto plano cósmico
penetraron en el plano búdico, la quinta jerarquía cósmica por ejemplo, y
estableció contacto con el plano búdico donde estaba la luz de la razón
que correspondía a nuestro planeta y cuando se trasladó esto al reino
animal y convirtió al animal en un Dios?, y ¿por qué se dice que el nueve
es el número del hombre? Por esto, porque es la quinta jerarquía, más la
cuarta jerarquía creadora humana las que constituyeron la mente organizada
en el hombre animal, y a partir de aquel momento el animal superior se
convirtió en un hombre racional, venimos pues de aquí y vamos hacia allá,
entonces siempre veremos lo inmanente, lo que tenemos de humano, y lo
trascendente, lo que tenemos de divino, es la ley de la evolución; un
animal tiene su inmanencia, ¿qué es la trascendencia para un animal?, el
hombre, el hombre es la trascendencia del animal, y esto lo vemos por
doquier. Siempre tendremos en cuenta estos conceptos, porque realmente nos
explica la razón del porqué estamos aquí ahora, simplemente, porque
tratamos de unificarnos con la trascendencia divina, reconociendo nuestra
inmanencia humana, no hay secretos ¿verdad? Un simple análisis nos revela
que la inmanencia está en todo, como en todo esta la trascendencia, y tal
como decíamos, lo que aquí es inmanente, aquí es trascendente, siempre
vamos, qué pasa, cuando pasamos de la inmanencia a la trascendencia, al
llegar aquí nos convertimos en inmanencia otra vez, y tenemos
trascendencia superior, y así hasta la consumación de los siglos como dice
la Biblia, porque no hay límite en el tiempo, no hay tiempo, solamente hay
evolución, más allá del tiempo existe la evolución, y ¿qué es el tiempo
para nosotros?, la conciencia mental del movimiento de la Tierra, pero
vista desde los altos lugares del planeta por un observador celeste, el
tiempo no existe, existe un eterno ahora, que es la sintetización del
tiempo en un solo momento del espacio, del pasado, del presente y del
futuro, entonces el tiempo solo existe cuando pensamos en él, si ustedes
están muy atentos, ¿dónde esta el tiempo?, en tanto ustedes están atentos
el tiempo para ustedes no existe, existe fuera de ustedes, por el
movimiento de la Tierra, de rotación y de traslación alrededor del Sol,
pero el tiempo en sí no existe, es una figuración de la conciencia, si
ustedes están bien aquí no miran el reloj, si se encuentran mal en alguna
parte constantemente miran el reloj, porque les pasa el tiempo, no están
atentos, están atentos al tiempo de fuera y no al tiempo interno
psicológico, que es el que vale en la cuestiones que estamos discutiendo
constantemente.
Pregunta -
Oye, cuando se abre una puerta del reino animal hacia el humano, que es el
alma grupal, aquellos animales tal como anteriormente se habían visto en
la Tierra han desaparecido o queda una parte, puede haber una parte, por
ejemplo, los cánidos, cuando pasen este umbral, ¿no existirán entonces,
digamos, perros en el planeta o puede ser que pueden continuar y puede
haber una parte de esta alma grupal que quede, o bien ya la evolución es
completa y aquella raza se extingue?
Vicente
-
Todo cuanto no sirve a los planes de la evolución trascendente
desaparecerá de la faz del planeta, así desaparecieron los grandes
monstruos prehistóricos del pasado, los dinosaurios, los ictiosauros,...
Leonor
-...pero
pasaron al reino humano, ¿no?
Vicente
-
... no, claro pasaron naturalmente, tuvieron su evolución, pero su forma
se extinguió, y uno de los karmas del Logos Planetario del Esquema
Terrestre es todavía los reptiles, que deben desaparecer, para que nuestro
planeta se convierta en un planeta sagrado, las grandes boas, las
anacondas, las víboras, las cobras, solamente para citar un tipo de animal
dañino, sin contar con las plagas de moscas, mosquitos, que son plagas
realmente, todo esto debe desaparecer cuando el hombre llegue a cierto
nivel, porque él dirige, controla los reinos inferiores, como que el
individuo se siente todavía muy animalizado, muy instintivo, con la fuerza
de su aura humana mantiene esas formas, que tendrían que desaparecer, son
formas mas allá de la prehistoria, son formas que provienen de la Cadena
Lunar y todavía están ahí, debido al fracaso del Logos Planetario, al que
hemos referido alguna vez, tiene que soportar el peso, como soporta la
Luna, ¿por qué tenemos la Luna?, porque el ser humano todavía es muy
lunar, cuando la persona sea solar, hablando en un sentido muy metafísico
y muy esotérico, la Luna desaparecerá, no tendrá razón de existir, ni de
enviar las perturbaciones que nos envía, las nocivas influencias de un
astro en descomposición, todo cuanto existe en la naturaleza de
enfermedades, no son el pago, el karma que nos imponen los Dioses como
castigo, no existe castigo sino una justicia que se está realizando,
porque nosotros no hemos sido conscientes todavía hasta el punto de
desvanecer de nosotros la tendencia de la animalidad, hay animales por
esto, animales negativos, como alguno de los que hemos citado, por lo
tanto, cuando hablamos de esto no hay que olvidar lo otro, no hay que
olvidar que somos el centro de una sociedad en emergencia, de una sociedad
que tiende a sublimizarse constantemente, y saber que a medida que vayamos
ascendiendo por estas líneas supremas, no del razonamiento sino de la
evolución, estamos despojándonos del aura de animal que todavía cubre
nuestra aura magnética humana, y entonces no pasará lo que pasa, las
guerras, los conflictos... (se produce un corte de sonido)...
como si Dios, el Logos Planetario, estableciese diferencias entre los
hijos de los hombres o entre los reinos de la naturaleza, es el Cáliz de
Amor del Señor del Mundo que todo lo vivifica, no una Iglesia
cristalizada, estructurada bajo moldes, que están ahogando la razón del
hombre, y están creando un karma terrible, desde el punto de vista de los
Dioses, y no queramos nosotros pasar por el mismo proceso kármico, nos
damos cuenta de que somos hombres, seres humanos, y que nuestra misión es
servir de intermediarios entre el reino espiritual y el reino animal, el
más inmediato; el reino animal cuando esté completamente henchido del amor
del hombre influenciará en el reino vegetal, y lo mismo sucederá con el
reino vegetal con respecto al reino mineral, pero seremos nosotros los que
hemos originado toda esta transformación, todo este proceso. Entonces, no
basta que expliquemos de una manera muy bella, muy gráfica lo que es
Shamballa, sino darnos cuenta de lo que Shamballa espera de nosotros, y la
respuesta que nosotros como seres humanos conscientes podamos evocar de
nosotros mismos, siguiendo las directrices del Señor del Mundo, y así
continuar hasta la consumación del tiempo, sin fatigas, sin impaciencia,
viendo el fin desde el principio, pero a lo lejos, no hay que ir deprisa,
hay que ir de acuerdo con la ley, la ley, la medida que Dios ha impuesto a
nuestros vehículos, al entendimiento y a la razón, de ahí que el querer
apresurarse es alargar el proceso, no podemos luchar contra algo, contra
el cual no tenemos armas todavía, entonces dirán ustedes: “Hay que estar
varados en el fondo del río del sentimiento como hacen los contemplativos
negativos”, no, hay que estar atentos a todo, cuando estamos atentos a
todo estamos evolucionando, porque estamos atentos supremamente atentos a
todo cuanto sucede, no somos personas indiferentes, pasamos quizá
impasibles, no indiferentes a las cosas, pero, si estamos atentos hay la
garantía de que la trascendencia de Dios seguirá manifestando lenta pero
progresivamente en nosotros, porque es la atención la que abre las puertas
iniciáticas, atención suprema, y jamás me cansaré de hablar de atención,
porque en realidad no estamos muy atentos, no estamos en el eterno ahora
que está pasando aquí, estamos pensando en mañana o en lo que hicimos
ayer, pero no en un sentido de decir, mira ayer estuve en tal sitio o en
tal otro, no, es la tendencia regresiva hacia el mundo animal también, que
es detenernos en el tiempo, pero si nos consideramos lisa y llanamente
como seres humanos, aceptando honestamente la situación, viene un
movimiento superior, a veces se confunde la inmanencia con la
trascendencia de Dios en nosotros mismos, si estamos atentos, porque
cuando estamos atentos no hacemos resistencia, nos adaptamos, y por lo
tanto, en esta adaptación, en ésta fuerza tremenda de adaptación que
implica no-resistencia, nos estamos situando a la altura de los Dioses, es
la ley, y no hay otra ley, la evolución exige de nosotros esta atención,
se dan cuenta la atención de un animal cuando observa algo, un gato ante
el agujero donde hay una rata, vean ustedes el símil, el símil es muy
exagerado, pero aquella atención nosotros no somos capaces de tenerla,
está con todos sus sentidos – los que tiene – orientados allí, pero si
estamos atentamente, – no para cazar una rata – pero si muy atentos para
el sentido interno, ustedes verán como su vida gana, no tendrán necesidad
de yogas ni de disciplinas, porque el mejor de los yogas es estar atento,
porque el yoga es ganar atención, la meditación, trascendental o no, es
ganar atención, si no tenemos atención para las cosas pequeñas
difícilmente tendremos atención en las cosas grandes, por lo tanto,
empecemos por las pequeñas cosas de la vida, porqué esperar más, así no
seremos esclavos del tiempo, no queramos situarnos aquí cuando estamos
aquí, hay que lanzar la flecha muy lejos, y atentos a donde ha ido a parar
la flecha, pero continuar marchando estando atentos aquí, la flecha nos
indicará el camino, pero el paso lo estamos ejercitando aquí y ahora, esta
atención para mí es más valiosa, que todas las meditaciones y todos los
yogas, porque el yoga si no está razonablemente impuesto por la razón no
sirve, es falso, es la atención el supremo yoga, de ahí que en Agni Yoga
se preconiza esta atención, porque va del nivel inferior, ganando en
atención, hasta situarse en el nivel de la contemplación, ésta sí que es
una contemplación, es la contemplación del eterno ahora de los Dioses, el
punto céntrico en donde existe compás del Logos Terrestre para dar el
círculo no se pasa que corresponde a nuestro Esquema. Y también
tenemos nosotros nuestra pequeña regla, nuestra pequeña medida, nuestro
círculo no se pasa, cuando estemos bien apercibidos de lo que sucede
en el pequeño círculo de nuestra vida se abrirá otro círculo mayor e
iremos pasando así, de nivel a nivel hasta llegar a lo más alto, a lo más
sublime, y cuando lleguemos allí ¿qué pasará?, esto yo no lo sé, y ustedes
tampoco seguramente, pero, sabemos el camino que lleva hasta allá, sin
crear una meta rígida y definida en el tiempo.
Pregunta
-
A pesar de que una persona no sea autoconciente en el plano astral,
¿significa que no adquirido la primera iniciación?
Vicente
-
No, no, puede tener la primera iniciación y no ser consciente
completamente en el plano astral, porque lo que define a la iniciación es
la superación o el gobierno de ciertas tendencias. Cuando las tendencias
instintivas del cuerpo físico no nos atraigan o nos atraigan en una
cantidad menor, podemos adquirir la primera iniciación, ahora bien, para
estar en la segunda iniciación sí que tenemos que ser autoconscientes en
el plano astral, porque verdad que somos autoconscientes en el plano
físico? nos tocamos, nos medimos, nos conocemos, pero no tenemos cuerpo
establecido todavía en el plano astral, no nos vemos en el espejo como
aquí, y cuando soñamos jamás nos vemos a nosotros, vemos lo demás, pero a
nosotros no nos vemos ¿por qué?, porque tenemos una conciencia astral,
pero no una autoconciencia astral, no nos vemos, no nos medimos, no
tocamos cosas astrales, se nos escapan verdad?, como el aire se nos escapa
aquí, que es el camino que va hacia lo astral, así hay que ir, razonarlo
todo. Claro, la iniciación, es algo que hay que pensar en ella, porque
está abierta ante nosotros, si les pudiese decir que parte del contacto
que establecemos con los planos es la atención depositada en lo que
estamos haciendo, porque no solamente existe una atención física de lo que
hacemos, sino que el cuerpo astral y el cuerpo mental están pendientes de
aquello también, no avanzamos físicamente, sino astral y mentalmente, casi
podíamos decir, que cuando la atención se ha adueñado de nuestra mente, de
nuestro ser, es decir, que el plano búdico se manifiesta a través de la
mente, sirviendo la mente de proyector, que es cuando tenemos aquella
mente completamente vacía, no vacía de inseguridades, o vacía de plenitud,
sino vacía de lo negativo, de lo que nos atrae al mundo inferior, luego
estamos consecuentemente despiertos, tenemos paz, y la paz es el resultado
de la conciencia búdica cuando se manifiesta a través de la atención en el
plano mental, y es también la iluminación o la regeneración espiritual a
la que aluden los tratados místicos, que no es la noche espiritual
que está situado entre al plano físico y el plano astral, porque es una
noche de sentimentalismos vanos, que desaparece y que reaparece en un
plano superior cuando se atraviesa la barrera que va del plano abstracto
al plano búdico, cuando el Arhat se convierte en un Gran Iniciado, en un
Adepto, pasa una noche espiritual que desconocemos. Hablamos de lo que
corrientemente llamamos “noche espiritual del alma”, siempre es
algo que obedece a razones impuestas por la lucha entre el plano físico y
el plano astral, que cuanto más atraen los sentidos, más potente es esta
lucha, esta “noche oscura del alma”. Así que, si estamos atentos,
evitamos esta lucha, evitamos estar pendientes del tiempo y del
razonamiento, porque la persona cuando está que no piensa, se cree que
esta negativamente actuando de acuerdo con lo que se da la figuración que
tiene de la mente, y desde el punto de vista más esotérico, cuando la
mente está muy vacía, cuando no hay nada en ella aparentemente, algo que
no turba la conciencia, es cuando la mente está más despierta, más atenta,
más vigilante, y cuando ofrece más garantías de paz, para sí y para los
demás. Por esto cuando ustedes están atentamente expectantes, cuando están
henchida de esta voluntad de observar, ustedes están educando un sexto
sentido, que es la mente superior en ustedes, están sintetizando todos los
sentidos, y están siendo consecuentes de estos sentidos como algo
controlado, y si persisten en el intento alcanzarán la conciencia astral y
la conciencia mental, y se convertirán en discípulos o en iniciados. En
realidad todos somos discípulos, todos estamos tratando de avizorar zonas
más lejanas y más henchidas de trascendencia, pero, es tan sencillo el
proceso, es tan complicada nuestra mente, que no aceptamos el beneficio
del ejercicio de la atención, decimos: “Ya estamos atentos”, para aquello
que nos gusta mucho, estamos atentos para aquello que satisface nuestros
instintos o nuestros razonamientos, me refiero a una conciencia, a una
atención tan profunda, en la cual la mente deja de existir, y ustedes
están en todo cuanto los rodea, sin razonar las cosas, siempre hay que
tener en cuenta, hablando de cuestiones tan trascendentes, que razonar una
cosa es limitarla, y ustedes dirán: “Si no razonamos ¿qué nos queda?”, les
queda todo, porque si ustedes establecen contacto siquiera fugaz con el
plano búdico, todo el tesoro razonable, razonado de la humanidad estará en
sus manos, porque atraerán por semejanza todo aquello que tenga que ver
con el estado que están consiguiendo, y éste es un punto que deberá ser
introducido con el tiempo en los grandes estudios psicológicos del hombre,
dejar ya los métodos del pasado, los métodos psicológicos de esta nueva
era son estos, hay que partir de cero constantemente, porque el hombre
busca seguridades, y al buscar seguridades tendrá que razonar cómo
apropiarse de aquellas seguridades, no se tiene en cuenta jamás la
voluntad de Dios en nosotros, jamás, pues bien, cuando dejamos nuestra
voluntad a la voluntad superior, no es que nos convirtamos en un médium,
¡cuidado!, sino que extraemos del seno de nosotros mismos, de nuestra
propia inmanencia la trascendencia de Dios, y para mí, esto es la paz,
esto es el éxtasis, esto es la conquista más grande de la evolución. Un
poco de silencio por favor.
