Leonor.— ¿Puedo hacerte una pregunta?

Vicente.— Y tanto.

Leonor.— Shamballa, este lugar donde “la Voluntad de Dios es conocida”, ¿puede ser una proyección a nivel astral de un punto, un punto digamos en el Cosmos, no un punto en el plano astral? En el plano superior ya es la voluntad de… Y, luego, en el plano digamos físico, una especie de proyección, un punto de contacto, o sea, supongo que de Shamballa hay puntos de contacto en cada uno de los niveles del Universo. ¿Se puede hablar de estos niveles? De todos no, ¿verdad?

Vicente.— Sí, sí, se puede hablar en una forma analítica porque la mente del hombre es para proyectarse hacia el futuro, hacia el más allá. Entonces, podemos decir que es la representación en miniatura del Sistema Solar, un Esquema terrestre, por ejemplo, nuestro Esquema Terrestre con sus Siete Cadenas, sus Siete Globos alrededor de la Cadena y las Siete Rondas de estos globos dentro de esta Cadena, todo esto es una miniatura del Sistema Solar. Por ejemplo, una Cadena es un plano dentro de Shamballa, podemos decir, y entonces tenemos que hay Siete Esferas que corresponden cada una de esas esferas a un plano del Sistema Solar, entonces habrá en el sistema planetario, en nuestro Esquema Terrestre, un plano físico, un plano astral, una cadena física, una cadena astral, una cadena mental, una cadena búdica y así hasta llegar a la séptima cadena que es la última con la cual finaliza un Manvántara, es decir, un esquema terrestre, la finalización de un Sistema Solar es un Mahamanvántara, la suma de cuarenta y nueve Manvántaras. Por lo tanto, son cantidades increíbles de tiempo, pero, Shamballa está en cada uno de los planos o esferas que constituyen su envoltura, digamos, porque el Logos Planetario es la Mónada, Sanat Kumara es el Alma y, entonces, toda la Jerarquía, toda la Humanidad, todo constituye digamos la Personalidad. Hay que considerarlo siempre por analogía. Entonces, si podemos decir que la esfera física es el cuerpo físico de Sanat Kumara, o que la Mónada del Logos Planetario a través de Sanat Kumara establece contacto con el plano físico, o con la esfera física, y tenemos el cuerpo astral del Logos Planetario a través de Sanat Kumara, una expresión, y así vamos viendo que cada uno de los planos, digamos, del Sistema Solar se corresponden perfectamente con las Siete Esferas de Shamballa, en un sentido que hay que tomar, digamos, por analogía, y que por lo tanto Shamballa está tan íntegramente dentro del plano físico como dentro del plano ádico que corresponde a su propio Esquema. Y la relación que existe, para aclarar más la situación, es la que corresponde: la Mónada, por ejemplo, de un individuo de cualquiera de nosotros establecida con su cuerpo causal a través del Ángel Solar, después viene la personalidad, entonces, tenemos –según se nos dice esotéricamente- que la representación, digamos, del centro máximo del Logos Planetario es Shamballa, donde se reconoce la parte superior; y que lo demás son cuerpos que van sucediéndose a partir del centro místico o del centro Sahasrara del Logos Planetario, un centro máximo, hasta llegar al plano más denso, al plano físico, pero en todo hay puertas de apertura.

Así que, y creo que lo dije en una conversación en “Los amigos de la India”, en las primeras fases del trabajo sobre Shamballa, que podemos ingresar en la esfera física de Shamballa, y se ha escrito mucho sobre la esfera física, lo que no se ha hablado tanto es sobre el nivel astral y el nivel mental de Shamballa, tampoco se ha hablado mucho de los consejeros de Shamballa o de la cámara de Shamballa, a la cámara de Concilio me refiero. Tampoco se nos ha hablado mucho acerca de donde está el cetro que utiliza el Logos Planetario a través de Sanat Kumara para iniciar a las gentes, sabemos que sí existe, en no sé..., en un segundo nivel está este cetro, dice: “Está oculto en un lugar de Oriente”, esto queda muy vago para una mente que sea inquisitiva, una mente que sea analítica, entonces tiene que buscar: “Bueno, este lugar de Oriente, ¿dónde puede ser?...” Y vemos que este lugar de Oriente es precisamente una relación que existe entre el segundo subplano, el subplano monádico del Logos Planetario; y allí está el cetro con el cual se inician a los grandes iniciados de la Tierra, es decir, las iniciaciones jerárquicas. Sabemos también que, formando parte de Shamballa, existe también el cetro iniciático que utiliza el Bodhisattva, o Cristo, cuando está iniciando a los primeros iniciados, hasta la segunda iniciación está iniciando el Cristo, siempre bajo las órdenes de Shamballa, bajo las órdenes del Señor del Mundo, quien recibe a su vez las órdenes del Logos Planetario. Y así hay una cadena que viene desde el Logos Planetario hacia nosotros, y que el Logos Planetario a su vez lo recibe del Logos Solar. Así que vemos siempre esta relación. Entonces, por analogía podemos entresacar muchas cosas de lo que está a nuestro alcance, y decir, por ejemplo, que estamos penetrando en Shamballa, al menos en ciertos niveles cuando estamos en silencio. Y preguntáis: ¿en virtud de qué y cómo puede ser realizado esto? Pues en virtud de que cuando la persona, el ser, está en silencio, está marchando a gran velocidad por el espacio, si podemos decirlo así, y que cuando está pensando está moviéndose dentro de un círculo. No sé si me hago comprensible. Cuando una persona está marchando, subiendo una cuesta cargado de piedras, por ejemplo, va muy lento, pero si va por una pendiente del otro lado sin piedras, se irá resbalando, pues bien, el silencio viene a ser cuando ya no llevas ninguna carga psíquica, ni mental, ni física y te sientes llevado hacia adentro. Teniendo en cuenta que quizá cuando sintáis una propensión hacia el silencio, no provocado, que no hayáis dicho: “pues voy ahora a intentar el silencio”, y empezar a trabajar, es decir, a disciplinaros para adquirir un estado más o menos acusado de silencio, no, no me refiero a esto, sino que cuando estéis en un momento determinado del tiempo y en cualquier situación donde os encontréis y sintáis como si las alas de un ángel pasaran por vosotros, os limpiara la mente, os dejara el corazón sin peso, y sintieseis la intensidad del silencio, juntos y entregados, porque es la prueba de que vais marchando a gran velocidad por el espacio psicológico de vuestra vida; significa que estáis limpiando el karma, que estáis penetrando en regiones shambállicas, podíamos decir, la mente ya no se utiliza como una oposición al freno de la vida o para preguntaros el porqué de cualquier situación establecida en vuestra vida, sino que todo lo dais por bueno, en todo estáis en un plan de aceptación; entonces esta velocidad es la que franquea por su propia, digamos, sutilidad, las primeras puertas de Shamballa; y las primeras puertas no han de ser necesariamente solamente en el aspecto etérico, sino que se puede penetrar profundamente en regiones de Shamballa que pertenecen a la mente del Logos Planetario, la mente que utiliza en tiempo y espacio Sanat Kumara. Y cuando estamos aquí por ejemplo en silencio, cuando no provocamos el silencio, es que se está abriendo para nosotros una puerta que conduce a Shamballa, una de las siete puertas por las que se penetra, teniendo en cuenta que en cada puerta hay siete corredores, siete, digamos, caminos distintos, y que es difícil coger el que te corresponde, una cosa es franquear la puerta y otra elegir el camino dentro la puerta. Entonces, lo principal es que tengamos una idea más o menos ahora de lo que queremos realizar, cual es nuestro Rayo, aquí hay un tema para estudio, para mucho tiempo: ¿cuál es mi Rayo Monádico?, ¿cuál es el Rayo de mi Personalidad?, mi triple personalidad, lo cual significa que hay que saber el Rayo de la Mente, el Rayo del Cuerpo Emocional y el Rayo del Cuerpo Físico; luego el Rayo del Ego; pero estas cosas tienen que venir con el tiempo. En la Escuela Arcana hay - existe seguramente - un curso que habla sobre los Rayos, y entonces en los Rayos te enseñan cómo puedes descifrar el Rayo que te está condicionando. Teniendo en cuenta que un Rayo es una corriente de energía que utilizamos, hay que distinguir entre Rayos y personalidades psicológicas que se manifiestan a través de los Rayos. Un Rayo es una corriente de energía, y las corrientes de energía son utilizadas por nosotros. Entonces, saber qué corriente de Rayo, porque a través de esta corriente de Rayo sabremos... hay que decir también que esta corriente de Rayo se puede verificar muy bien a través del examen de la corriente de vida astrológica que está guiando a ustedes desde la infancia, o desde que hemos nacido, implicará por lo tanto saber cuál es nuestro Rayo del Sol, o el Sol que nos guía, digamos, como signo astrológico, y la corriente que conduce que es el Ascendente, que es un línea de Rayo también. Y luego empezar a trabajar para saber cuál es el Rayo del Ego, o la corriente astrológica que proviene del Ego, lo cual significa que tendremos que dominar la astrología esotérica. Y, más adelante, cuando hayamos franqueado ciertos umbrales, tendremos que saber a través de la astrología jerárquica cuál es el Rayo que condiciona nuestra Mónada, y al saber esto sabremos exactamente cuál es el Esquema terrestre al que realmente pertenecemos, porque en cierta manera somos importados del Cosmos a través de una serie, digamos, de corrientes astrológicas y una serie de corrientes de tipo de Rayo. Pero, claro, las efusiones de Rayo, es decir, lo que llamamos las corrientes que surgen del corazón de los hombres celestiales con los cuales tenemos una íntima relación kármica, quizá la atracción que sentimos unos más que otros es porque provenimos del mismo Rayo o del mismo Logos Planetario, pero, ahora estamos aquí, y nuestra perspectiva es el Logos Planetario. Si hacemos conciencia del Logos Planetario, también haremos conciencia del Logos que corresponde a nuestro propio Esquema, el Esquema al cual nuestra mónada pertenece, no hablamos aquí del ego, hablamos de la mónada.

Interlocutor.— Dijiste en un par de ocasiones que en el Huerto de Getsemaní Jesucristo ancló una línea directa de la Humanidad con Shamballa. Entonces, claro, ahora has de mirar un poco esta especie de sutratma del Logos Planetario con su creación y su círculo-no-se-pasa en los diferentes subplanos, entonces, ¿qué representó el trabajo, el sacrificio del Cristo en el Huerto de Getsemaní para la Humanidad?, ¿cuáles fueron, si es que hubo inmediatamente, los resultados?, ¿cuáles son los resultados que se prevén de esta influencia shambállica con la Humanidad?, y ¿por qué o qué razones había para que el Logos Planetario, y a través de toda su Jerarquía, no estuviera vinculado directamente con la Humanidad?

Vicente.— Bueno, Shamballa estaba vinculada como centro con la Jerarquía, pero, en los tiempos de Cristo no había todavía una vinculación con la Humanidad; es decir, que la persona conocía hasta cierto punto la naturaleza de su alma, pero esto lo enseñó a través de la compasión que es un camino directo del 2º Rayo; pero no había el aspecto voluntad desarrollada al punto de reconocernos como Hijos de Dios: nos reconocíamos como una parte de Dios, pero sin saber la filiación; pero cuando ya tienes una conciencia shambállica te reconoces como un Hijo de Dios que busca la Casa del Padre, y la Casa del Padre es Shamballa precisamente. Entonces, toda la corriente de energía que surgía de la Humanidad quedaba paralizada en la Jerarquía, y los iniciados y todos estaban dentro de la Jerarquía trabajando por aquella germinación que más tarde sería el sutratma que llevaba a Shamballa. Bueno, entonces, Cristo, efectuó el sacrificio porque la cruz no fue realmente el sacrificio de Cristo, porque han habido sufrimientos más agudos, hablando físicamente, pasado por seres mortales que no fueron dioses ni mucho menos. El sacrificio de Cristo es cuando abandona completamente su personalidad en bien de la Humanidad, ofreciéndose en sacrificio al Padre con el cual está realmente vinculado en razón de su propia evolución. Pues, entonces, en aquel momento en que está en el Huerto de los Olivos y se le aparece un ángel con el cáliz simbólico que tiene que beber hasta las heces de aquel momento drástico, en el cual, segregado de su propia vida, de su propio sacrificio, tiene que crear un vínculo entre la Humanidad y Shamballa sin pasar por la Jerarquía. Esto es el sacrificio de Cristo hasta aquí. No está en la cruz, porque un iniciado puede sacudirse el dolor físico, puede dejar a voluntad el cuerpo físico y será una materia inerte, será un cuerpo, digamos, como pasa cuando está una persona sugestionada a punto de caer rígida, por ejemplo, en estado cataléptico donde no existe dolor alguno; pues entonces todo esto un iniciado es capaz de hacerlo en sí mismo, una especie de sofrología, digamos, pero más intensa. Entonces, el iniciado puede evadirse completamente de su cuerpo y cerrar, y romper su cordón plateado, y lo que están haciendo allí, están crucificando a un cuerpo muerto ya, o a un cuerpo que solamente tiene vida física, pero la conciencia astral–si es que existiese- y la conciencia mental y la conciencia espiritual de Cristo estaba fuera. No es lo mismo el caso del Huerto de los Olivos, en el cual apura hasta las heces el cáliz de amargura, tal como se cita en los textos bíblicos, entonces dice: “Aparta de mí este cáliz de amargura”, pero finalmente dice:”Hágase Señor tu voluntad y no la mía”. Entonces el velo aparece, en aquel momento no es el cáliz, sino el cáliz siempre es el símbolo del sacrificio, en el altar vemos el cáliz, el verbo y todas estas cosas, sino que en aquel momento Cristo renuncia completamente a su vida en bien de la Humanidad, y esto como tiene que redimir el peso de toda la Humanidad y tiene que pasar por su corazón, la aflicción que pasa, esta corriente de vida de la Humanidad al pasar por su corazón debe ser un horroroso dolor, porque no toca el cuerpo físico sino el aspecto más íntimo del propio Cristo, entonces, va llevando esta fuerza hasta el propio corazón de Sanat Kumara, o de Shamballa, y pone en contacto la Humanidad con Shamballa por primera vez en la historia del planeta. El sacrificio es esto, desde aquel momento tenemos un enlace directo con Shamballa; de ahí que se ha empezado a hablar de Shamballa después ya, que cuando se empleó Jacob Boheme, o Christian Rosenkreuz, que este también habló de Shamballa, y todos los grandes esotéricos del tiempo, Blavatsky habló de Shamballa precisamente presentando un cuadro, digamos, sinóptico de todo lo que era la Jerarquía, pero diciendo siempre: “Hay el Señor del Mundo; luego el “Hay el Señor del Mundo” se hace cada vez más familiar, y hablamos del Señor del Mundo constantemente, yo lo menciono muy a menudo porque lo siento de esta manera, y me acuerdo que al principio de la cita de la Gran Invocación, al principio que estaba en la Escuela Arcana, ni la primera estrofa ni la segunda me decían nada, pero cuando recitaba la tercera, ”donde la Voluntad de Dios es conocida”, me sentía como si una llama me estuviese ascendiendo quemándome. Me di cuenta entonces que tenía que hablar de Shamballa, y no tanto de la Jerarquía. Hablo de la Jerarquía, naturalmente, hay que hablar de la Jerarquía porque estamos bajo su protección, pero hay que hablar mucho de Shamballa, y si vamos a analizar veremos que todo el contexto del Agni Yoga es Shamballa. Estamos hablando del fuego, el más grande de los fuegos; el Agni Yoga es el Yoga del Fuego, y todo el fuego proviene de Shamballa. Entonces, la doctrina del corazón, Shamballa, el fuego místico, el fuego eléctrico, todo es Shamballa, la iniciación viene de Shamballa. Es decir, que antaño tenía que venir una programación de Shamballa a través de la Jerarquía y, entonces, llegar al iniciado. Ahora solamente bastan dos padrinos que hacen de canalizadores del fuego eléctrico de Shamballa, y el iniciado está constituyendo un triángulo entre el Señor del Mundo que está iniciando, entre el padrino que puede ser tu propio Maestro, el Maestro de tu propia vida, y un Maestro de tu propio Rayo que te ayuda en aquel momento a que la energía no te dañe los centros etéricos; y el iniciado queda dentro de este triángulo formado por dos Maestros y el propio Iniciador. Y aquí esto antes no podía ser, tenía que pasar la energía por toda la Jerarquía antes que llegase al iniciado; y hablo de los iniciados que son del tiempo de Platón y Sócrates, y estos eran…, los tipos iniciados antes de Cristo quizá o Buda, tenían que pasar por esta prueba, digamos, de pasar por la Jerarquía; la Jerarquía de entonces que tampoco estaba tan evolucionada como la que tenemos actualmente, y a través de este circuito de energías entonces el iniciado empezaba a sentir la fuerza de Shamballa.

Ahora, incluso en una meditación que sea muy activa, muy profunda, podemos tener un atisbo de Shamballa, podemos sentir como si algo nos quemara dentro. Y alguna vez estamos quizá sin pensar en nada y sentimos como algo en la espalda, la venida de Shamballa que es el fuego de Kundalini: está quemándonos la espalda, quizá en el lado de los riñones, o quizá el centro muladar. ¿Os dais cuenta de que realmente estamos siendo objetivados, si podemos decirlo así, por el propio Logos Planetario a través de Sanat Kumara, y la Jerarquía solamente está dentro del corazón iniciándonos en la labor universal, siendo el amor universal la fase…, porque viene entonces la síntesis de la universalidad que es, digamos, la Gran Fraternidad Cósmica, de la cual nuestro Logos Planetario es un exponente; y cada familia cósmica, cada sistema solar, está unido kármicamente con otros sistemas solares, como estamos viendo, por ejemplo, con las Pléyades, con la Osa Mayor y con la estrella Sirio, que constituyen parte de nuestro programa kármico; me refiero a nuestro Sistema Solar en su absoluta integridad, sin pensar entonces que existe una serie de constelaciones superiores a la Osa mayor y a las Pléyades, de entre las cuales estas grandes constelaciones son solamente puntos atómicos; son los padres de los padres y los hijos de los hijos que corresponden a estas grandes entidades cósmicas.

Interlocutor.— El otro día comentabas que estamos viviendo un momento de gran tensión planetaria, incluso de peligro, y además comentabas que parece ser que ha habido hasta un cierto concilio en la cámara secreta de Shamballa en el cual hasta parece ser que se han debido tomar o se ha hablado de medidas drásticas para parar este ambiente negativo en el cual la Humanidad está llevando al planeta, tanto en el nivel físico como en niveles astrales y mentales. Entonces, aunque soy consciente de que esta pregunta ya la has contestado muchas veces de muchas maneras, me gustaría quizá que pudieras darle otro enfoque acerca de la posibilidad que nosotros como aspirantes y como miembros de esta humanidad podíamos hacer algo para precisamente ayudar a la Jerarquía y a Shamballa con nuestra pequeña aportación. ¿Qué es exactamente lo que nosotros podemos hacer, de una forma más clara quizá, para poder aportar algo a este momento de crisis?

Vicente.— Bueno, crisis y tensiones siempre han habido en la Humanidad, pero, cuando la Jerarquía reunida en la cámara de Shamballa, por ejemplo, o los grandes agentes de Shamballa reunidos con el Señor del Mundo han visto la situación mundial desde hace unos treinta años aproximadamente, a medida que se van ampliando las bases científicas de la constitución sicológica humana, a medida que se va avanzando en muchos aspectos, el hombre se cree un Dios, y al creerse el hombre un Dios en virtud de sus descubrimientos, entonces opone su voluntad a la Voluntad de Shamballa; y entonces –y esto sucedió, y seguramente sucederá hasta que el hombre sea perfecto- se ha visto una tendencia de ciertos elementos dentro de la Humanidad, de gran poder espiritual pero incontrolado, que han querido utilizar la tecnología para su propia satisfacción, y se han convertido en aquellos mismos magos negros que facilitaron el hundimiento de la Atlántida en los océanos. ¿En qué sentido puede ser, digamos, programada esta idea? Solamente en la programación que muchos habréis seguramente estudiado o investigado en cierta manera con lo que llamamos la aparición de platillos volantes, lo cual no sabemos qué es exactamente esto, porque en tanto que no tengamos una idea muy clara de las posibilidades técnicas de nuestro planeta, no sabremos si lo que viene es una manifestación objetiva, una acumulación de energía de otros planos por parte de entidades dévicas, o si son naves realmente que vienen de otras partes del sistema, o de otros sistemas estelares en virtud de otra tecnología, o si son naves del propio planeta utilizadas por ciertas naciones que por razones de seguridad o de inseguridad están mandando al espacio artefactos de todas clases, porque según se nos dice esotéricamente está más avanzada la tecnología del espacio de lo que creemos, y que a espaldas de la propia Humanidad quizá se estén realizando experimentos que van contra las leyes del Creador. Por lo tanto, hay que estar muy atentos en que la Jerarquía cuando se plantea un asunto que atañe a toda la Humanidad, y quizá a las humanidades de otros planetas, entonces es lógico que en este concilio existan también otros enviados solares, y que cuando hay un concilio extraordinario, hay un concilio extraordinario cada cien años y éste fue uno de ellos donde se pasó revista a todo lo que había conquistado la Humanidad y se llegó en ciertos momentos a la pasada votación asrhámica, si podemos decir de Sanat Kumara, de que tenía que ser la Humanidad ayudada científicamente en vista de la utilización incorrecta que hacía de la técnica, porque la técnica una vez se ha desarrollado hasta cierto punto, puede convertir al hombre en un ser inútil, porque todo lo hace la máquina, en cambio, la tecnología desde el ángulo de vista jerárquico es para evitar que el hombre se desgaste, y en este desgaste existe la gran complejidad, digamos, psicológica, que crea los nefastos egregores que nos envuelven, y entonces en este concilio se llegó a esperar veinticinco años más a ver qué hace la técnica, pero dispuestos a intervenir drásticamente sobre aquella nación o aquellas naciones cuya técnica sobrepase el impulso moral de su propia vida espiritual. Por tanto, la técnica –repito, que al igual que en los tiempos de la Atlántida- puede ser un arma arrojadiza, un boomerang que destruya a los propios organizadores de técnicas con las cuales no pueden jugar, porque desconocen los mecanismos que guían la moral, y la moral está erradicada en el corazón de Cristo que obedece a causas supremas de Shamballa; y el Cristo, que por ley le corresponde estar en el concilio de Shamballa, y el Mahachohan y el propio Manú, que es el que programa una raza para el futuro, y todos los demás elementos de la Jerarquía especializados, por ejemplo, los Chohanes de Rayo, más los Señores del Karma que intervienen en los concilios de Shamballa, más ciertos devas especializados en la destrucción; por lo tanto, agentes de Shamballa porque están utilizando el 1^er Rayo de destrucción para llevar adelante el propósito de Sanat Kumara, estuvieron de acuerdo en que si continuaba esto vayan a destruir las naciones, y que una de las naciones sería Norteamérica; esto se ha dicho en la Logia, no se ha dicho en los periódicos, debido a que se emplean técnicas que están más allá de la moral, y otras naciones que están utilizando técnicas parecidas y, por lo tanto, ¿qué podemos hacer nosotros, como tu preguntas?, pues bien, yo creo que obrar lo más correctamente que podamos y no caer en la robotización, el gran peligro para esta era técnica, que sepamos hacer una distinción entre nosotros y la máquina, lo cual implica, si lo analizáis bien, lo que decía Ramón ayer: la visualización del Yo y de sus vehículos, yo pienso, yo pienso, entonces si yo puedo saber que pienso, si yo puedo estar presente en el pensamiento, si me doy cuenta que estoy pensando, es que yo no soy el pensamiento, soy el Pensador, o si os dais cuenta que estáis sintiendo una emoción y tú te separas de la emoción, entonces, tú no eres la emoción, tú eres aquel que siente la emoción, o cuando es el cuerpo físico, tú no eres el que actúa sino que tú mandas actuar al cuerpo; y los indios lo hacen muy bien porque dicen: “mi cuerpo come, mi cuerpo emocional siente y mi mente piensa, pero yo organizo todo esto desde el centro”, y esto, esta fuerza que unifica, que coordina, que integra, es Shamballa, y la fuerza que proviene de Shamballa. La fuerza de Shamballa produce integración y produce después la integración perfecta que es la liberación, o la serie de iniciaciones a través del fuego eléctrico que te llevan finalmente al nirvana, un estado máximo de integración espiritual, para continuar después en aquellas esferas avanzando, quizá siguiendo otras corrientes de vida superiores que desconocemos, pero que podemos imaginar, porque cuando se nos dice en los ashramas: “No situéis meta alguna delante de vuestra visión, seguid adelante, investigad, vivid, creced, multiplicaos”, pero, científicamente, no en el sentido físico: multiplicad la inteligencia, multiplicad vuestras emociones puras, no simplemente en llenar la Tierra de escoria como se está realizando todavía.