CONFERENCIA
VICENTE BELTRAN
ANGLADA
Magia Organizada Planetaria
Espacio y Alkahest.
14 de Febrero de 1.987
"LA VERDAD HA DE PRESENTARSE DE TAL MANERA, QUE CONVENZA SIN ATAR Y QUE ATRAIGA AUN SIN CONVENCER. ESTO SOLO PUEDE REALIZARLO EL LENGUAJE DEL CORAZON".
-VBA: Introducción al Agni
Yoga, p. 49
Magia Organizada Planetaria
Espacio y Alkahest.
Siempre se ha hablado de magia en el transcurso de los tiempos, desde Simón el Mago a Paracelso, pasando por todos los alquimistas de la Edad Media. En realidad todos buscaban la misma cosa, le daban nombres distintos, el Disolvente Universal, el León Amarillo, el Alkahest o bien el Santo Grial. En realidad, el intento de la magia es la búsqueda de uno mismo, es la búsqueda del “Sancta Sanctorum” de la conciencia. Por tanto, la magia siempre es joven, como joven es el espíritu del hombre, por lo tanto, todas las explicaciones acerca de la magia organizada en nuestro mundo, tienen el frescor de lo eterno, en realidad, este disolvente universal, este “Sancta Sanctorum” de la conciencia, este recorrer el camino de los justos no varía en el transcurso de las edades. Todos buscamos lo mismo, sea cual sea el punto de partida de nuestras investigaciones, religiosas, científicas o como sea, buscamos el “Sancta Sanctorum”, es decir, el elixir de larga vida o la piedra filosofal que nos dé el conocimiento y al propio tiempo nos embargue de la plenitud de los dioses, pues si somos hechos a su imagen y semejanza, forzosamente somos dioses en potencia, y habrá que demostrarlo, y sólo hay una manera de demostrar nuestra santidad interna: la magia organizada, el poder surgir triunfantes constantemente de nosotros mismos, venciendo la inercia de las edades, de las tradiciones, de la historia, de la herencia cultural, del código genético, un código genético que no es simplemente físico, sino que abarca las áreas emocionales y la mente. Entonces, la búsqueda del hombre a través de la magia, es siempre aquello místicamente definido como el Sendero, el Sendero que nos lleva a Dios, al Creador, al Mago Supremo del Universo.
Pero cuando hablamos del Alkahest como disolvente universal, como el oro puro que surge triunfante del plomo, de la materia que hemos controlado, siempre tiene que ver con aquella abstracción que llamamos Espacio, en realidad todos estamos sumergidos en el Espacio, el Espacio es nuestra patria, el Espacio esta ausente de tradición, carece de tiempo, y nosotros nos movemos por el Espacio creando tiempo, creando confusión, creando crisis constantemente, y la historia de la humanidad, la historia del mundo siempre esta llena de conflictos, de luchas, es el enfrentamiento de la gran polaridad existente, Dios y Satán cohabitando en el corazón del hombre. Entonces la magia suprema es establecer una línea divisoria entre el bien y el mal, porque cuando hablamos del bien no hacemos sino reflejar una contradicción, una reacción contra el mal, y si Dios en nosotros es perfecto, no puede haber contracción, no puede haber reacción, no puede haber lucha. Entonces, debe existir algo que está por encima del bien y del mal, ¿qué será esto, acaso no será el Espacio puro, el Alkahest, el Disolvente Universal, el Espacio sin condicionamiento alguno? Pues bien, si la patria del hombre, hablando en un sentido muy espiritual es el Espacio, es en el Espacio donde tenemos que hallar la verdad, no la hallaremos a través de una religión, ni de una creencia organizada, ni de cualquier estudio por esotérico que sea, sino cuando nuestra mente y el Espacio formen una unidad, entonces habrá comprensión, no habrá lucha, no habrá conflicto. El conflicto surge cuando el hombre intenta comprender a través del examen analítico, y yo digo que existe algo más que el raciocinio, que el intelecto, que la forma concreta de considerar las cosas, esto es la mente cuando se ha convertido en Espacio, y cómo lograremos convertir la mente en Espacio sino es convirtiéndonos en el Espacio.
El sendero nos habla de luchas y conflictos del hombre a través de las edades, tratando de buscar a su Creador, que es la esencia del Espacio, ¿y que ha conseguido a través del tiempo?, la lucha por el privilegio de un Dios que cada cual se forja a su propia manera y conveniencia, y sin embargo, el Dios del Espacio permanece inmutable, eterno en todo su fluir. ¿Verdad que es un verdadero desafío a la conciencia del hombre hablar del Espacio como del Dios que sustenta todas las cosas existentes y el propio espíritu del hombre? ¿Qué se le exige al mago, en este caso nosotros como aprendices de mago, como discípulos de una verdad que todavía no conocemos, pero que estamos tratando de descubrir? Se nos está exigiendo comprensión constante, una comprensión constante que abarca todas las esferas del cotidiano vivir, la familia, el ambiente social, el campo profesional son la escuela. Todo se está moviendo dentro de un Espacio que desconocemos, sí, hemos creado las dimensiones, las dimensiones que condicionan el Espacio, al menos desde un punto de vista profundamente espiritual, porque observamos todo cuanto sucede a través de una limitación del Espacio, a través de un tiempo tridimensional, lo cual significa que constantemente estaremos envueltos en conflictos de adaptación y por tanto de comprensión, y si esto es así, el sendero que es una lucha con conflictos constantes no le interesa al aprendiz de mago, no le interesa al discípulo, el discípulo espiritual en el sendero que busca a Dios. Todos los condicionamientos existentes en la vida de la naturaleza y en los ambientes sociales del hombre son la obra del hombre, no están ausentes de la humanidad, por lo tanto, la primera regla de la magia es enderezar los Caminos del Señor, es como si dijésemos Atlas que con sus hombros hercúleos más allá de la fuerza de la Tierra intentase enderezar su eje por encima de la eclíptica, y crear una nueva condición, una condición que abarcaría todos los aspectos visibles e invisibles de aquello que llamamos humanidad o de aquello que llamamos los reinos de la naturaleza, estamos siempre impregnados de este sentimiento, un sentimiento que viene a nosotros con la duda de si será o no será verdad, y cómo nos daremos cuenta de la verdad, si existe o no existe en nuestros argumentos, en nuestros comentarios, si no es dándonos cuenta constante de lo que pretendemos realizar y qué es lo que pagamos a cambio, porque realmente conquistar la verdad es algo precioso, es algo carísimo. Por lo tanto, por primera vez en la historia de la humanidad, cuando los grandes instructores espirituales enseñaron las primeras reglas del ambiente social en que vivían, para darse cuenta de su propia situación personal, empezaban a labrar el edificio de la magia organizada, y ahora que hemos llegado al Siglo XX, casi estamos penetrando en el Siglo XXI, el hombre todavía es un mago inexperto, todavía está condicionado por el tiempo, y por las dimensiones que el mismo ha creado, está lleno de conflictos y dificultades, no sabe exactamente lo que busca, ha perdido la fe en sí mismo, incluso la idea de Dios le parece demasiado abstracta para interesarse por ella, y así se ve el panorama mundial. Los conflictos humanos se gestan en el corazón del hombre, se gestan en nuestro corazón, están condicionados, desvirtuados, están siendo empequeñecidos dentro de nosotros, porque hemos perdido aquello que caracteriza a los Dioses, y que está latente en el corazón del hombre, la fe en sí mismo, la fe en Dios, la fe en el Espacio puro, la búsqueda del Santo Grial, que se ha convertido, por así decirlo, en el tormento de una época, la búsqueda de la realidad trascendente tal como se enseña en los santuarios esotéricos más profundos, y la fe empequeñecida que crea imágenes o símbolos de la verdad están tratando de modelar el corazón del hombre, y ahora ha llegado el momento en que realmente debamos efectuar dentro de nosotros aquello que se exige de los grandes magos, la transmutación de aquello que viene del pasado en la gloria excelsa del presente, pues si no enfrentamos cuerda y profundamente esta gloria del presente, careceremos de futuro, lo que llamaremos futuro será una continuidad de un presente incomprendido, que constantemente nos lleva de aquí para allá como hoja arrancada del árbol por el viento, habremos perdido entonces la facultad de ver, sentir y actuar de acuerdo con la ley, y si estas conversaciones acerca de la magia organizada en nuestro mundo se quedara solamente en palabras, a veces muy abstractas, pero sin un significado concreto en la mente, es decir, sin una compresión real, jamás seríamos magos, porque la magia siempre está en la comprensión de lo inmediato, ahora estamos viviendo lo inmediato, y cuando se vive en lo inmediato existe una comprensión plena de lo que es el pasado, lo que es el presente y lo que es el futuro, porque estamos viviendo ausentes de nosotros mismos, carentes de ilusiones, hemos dejado atrás los espejismos variados de los deseos y las emociones, estamos tan presentes, tan activos en este presente, que hemos perdido de vista lo que es el pasado y lo que será el futuro, ¿por qué?, porque ahora nos hemos convertido circunstancialmente en magos, que estamos estructurando dentro de nosotros la imagen del Dios que nos alienta, y quizá descubriremos este Dios dentro de nosotros mismos, en estos momentos de atención, dentro de la cual, el presente tiene un valor supremo y no simplemente el valor de lo circunstancial que pasa sin dejar huella. Vamos adelante, tratando de disolvernos en el Espacio, si podemos decirlo así, porque todo cuanto nos han enseñado los sabios del pasado y los grandes instructores espirituales, siguieron siempre esta misma ley, la ley del contacto del hombre con el Espacio, que es su templo, que es su vida, no podemos hallar el “Sancta Sanctorum” del corazón, no podemos desgarrar los velos del templo si no somos capaces de ver esta realidad trascendente, abierta a nuestra comprensión en cada momento de nuestra vida. Si continuamos fluctuando entre el pasado y el presente, el futuro no tiene vitalidad, jamás llegaremos a penetrar el sentido del futuro, porque el presente jamás será comprendido, será un indicio mental, y un indicio mental es un recuerdo, y el recuerdo tendrá que desaparecer un día de la mente del hombre para convertirse en algo mejor, la previsión, la intuición, la iluminación, la regeneración, y en términos de materia, la reconversión verdadera, el sentido de la unidad de la materia, y comprender que en el Espacio, el espíritu y la materia son la misma cosa, difiriendo solamente de grado y de intensidad, y quizá sería interesante citar lo que dijo Schopenhauer por ejemplo, acerca de lo que es esto que estamos tratando en términos de magia, él no dice espíritu y materia, sino voluntad y manifestación, y acaso no son éstas las reglas de la magia, la voluntad por encima de la materia o la voluntad impregnada de la intención del espíritu de Dios gobernando constantemente la materia que constituye su expresión en el tiempo.
Estamos tratando de comprender en profundidad aquello que técnicamente llamamos el aspecto sustancial de la existencia, estamos tratando de penetrar lo más profundamente que nos sea posible en este campo no trillado por arado alguno dentro de la conciencia, estamos tratando de hollar los caminos vírgenes, aquellos que solamente nosotros podemos pisar y hollar, y esto es muy difícil, porque estamos acostumbrados a seguir caminos prefijados, predeterminados, preestablecidos, y así, progresivamente hemos perdido nuestra capacidad creadora, nuestra capacidad de magos en potencia, es más fácil seguir las instrucciones de otro por grande que sea, que seguir la guía infalible de nuestro Dios individual. Siempre habrá la lucha entre la inmanencia y la trascendencia, si podemos unificar la inmanencia con la trascendencia sabremos de la plenitud de la acción correcta, sabremos lo que es la verdad más todavía, nos habremos convertido en la propia verdad y esta propia verdad tendrá el campo dilatado del Espacio para comunicarse, para expresarse, para manifestar aquello que es la ley dentro de sí. Todo esto que aparentemente aparece como confuso y muy abstracto, si lo analizan desde el punto de vista de la acción cotidiana, aparecerá más claro y comprensivo, ¿qué quiero significar por lo cotidiano?, lo que estamos viviendo, no lo que estamos fraguando mentalmente, la vida de relación, la vida del trabajo, la vida de la sociedad, la comprensión del sufrimiento de los demás, no tratar de dar un aire, un tinte distinto o un nuevo enfoque a nuestra mente, en realidad la mente es la matadora de lo real, me refiero a la mente intelectual, que diseca la verdad, la condiciona y crea el caos, el conflicto entre el hombre y la verdad, y del conflicto entre el hombre y la verdad surge el dogma, es el dogma el que prevalece dentro de la conciencia de los hombres, y por lo tanto, a menos que surja triunfante del dogma no podrá comprender la verdad, una verdad que no está escrita en los libros santos, ni está refugiada en los templos, en las iglesias, ni en ningún tipo de creencia, es el hombre el creador, el hombre el que surge triunfante de sí mismo constantemente, cuando se da cuenta exacta de su valor social, y no podemos hablar de magia sin hablar de éste contexto, de esta labor social del hombre.
Estamos llegando a ciertas conclusiones mentales acerca de la verdad, y ¿qué hemos hecho?, hemos muerto la verdad, creo que fue el obispo Robinsón en Nueva York, que en cierta ocasión dijo: “Dios ha muerto”, y realmente Dios ha muerto en el corazón del hombre, debe reencontrarlo, redescubrirlo, volver a nacer de nuevo como nacen los Grandes Iniciados, y esto es un trabajo que está más allá del tiempo, porque nosotros somos impacientes y la impaciencia condiciona nuestra acción constantemente, no tenemos la virtualidad del Adepto, que ve el fin desde el principio, nosotros solamente vemos un camino muy largo y dificultoso, y en vista de ello surge la duda, la confusión y el terror, el miedo, pero si el hombre vive atentamente a su proceso social, no tendrá miedo, estará identificado con la sociedad que le rodea, será humano, humano porque será libre, libre de la tradición, libre de la historia, libre del pasado, nacerá constantemente de sus propias cenizas como el Ave Fénix, será el hombre nuevo al que hizo referencia Pablo de Tarso, y aquí en éste punto se halla la raíz de la magia organizada, y podemos realizar este milagro en nuestra vida, podemos organizarla de manera que la realidad supere la ficción, la ilusión y el espejismo, podemos triunfar de los sentidos, podemos triunfar de la corruptibilidad que nos atrae al seno de la materia, es cuestión de propósito, de intención, no de un frío análisis mental, porque el análisis mental mata el entendimiento, una mente libre comprende, no comprende las cosas por inducción sino por percepción directa. Y esto es lo que se le exige al aprendiz de mago, para que se convierta en un mago realmente, un mago en acción directa, un mago frente a la sociedad, un mago que triunfa de la historia y crea otra historia, la historia de la verdad, la historia de la luz, la virtualidad del sendero espiritual, la unificación con los Grandes Instructores de la raza, el contacto con lo supremo, la realidad omnipotente que nos libera de toda confusión, de toda duda y de todo conflicto y nos hace fraternales. Si la magia fuese solamente un impacto sobre nuestra mente intelectual, no tendría ningún sentido, pero si la magia la entendemos como paso que va de la inmanencia a la trascendencia, entonces cambia, porque la verdad es mágica y todo intento de llegar a la verdad debe ser mágico, porque no podemos separar el camino de la meta, el camino y la meta deben ser de la misma esencia y de la misma sustancia, sino no comprenderemos el razonamiento virtual, aquello que nos convierte realmente en sabios, personas realmente interesadas en la armonía social, en la armonía del ambiente, en el equilibrio de los valores, esto es lo que necesitamos, la virtualidad, la conversión de nuestra vida en un talismán sagrado, mediante el cual y en manos de Dios, podamos convertir el plomo de las pasiones en el oro de la realización espiritual, y ahora espero sus preguntas.
Pregunta - La magia organizada empieza con la correcta relación humana ¿verdad?, y eso es un trabajo en todos los Rayos o en un Rayo determinado.
Vicente - La correcta relación es el hombre, sea cual sea su Rayo de aproximación a Dios, su energía, su culto de afinidad con alguno de los Siete Espíritus ante el Trono de Dios. Siempre buscará lo mismo, buscará la unión con el hermano, es decir, cuando hablamos de Rayos, no hablamos de hombres distintos, sino que hablamos de distintos caminos dentro del corazón del hombre, pero todos los Rayos están convergiendo en un centro de plenitud, y esta plenitud es la verdad que todos estamos tratando de descubrir y conquistar.
Pregunta - ¿Queda mucho camino para el descubrimiento de esta verdad, de este alma interna, de este derrumbamiento de las paredes que protegen las pequeñas verdades?
Vicente - Depende del condicionamiento del hombre en relación con el tiempo. El tiempo condiciona al hombre, el Espacio lo libera, pero ¿cómo vamos a distinguir el Espacio del tiempo, si estamos viviendo en zonas de alta frecuencia temporal?, incluso la quinta dimensión puede condicionar si no vemos más allá de la quinta dimensión, si cogemos la quinta dimensión como una meta rígida que nos espera al final del fatigoso camino. El hombre ha nacido para descubrir su propia esencia creadora, y todo cuanto surge de éste ímpetu, de éste impulso inicial, y la fortaleza con que se mantiene en el Sendero es la garantía de que un día u otro hallará la verdad, la cumplimentará y la realizará, y se convertirá en un instructor de los demás, no es necesario que el hombre se programe como un instructor, lo cual crearía una meta, rígida, y los ejercicios variados para convertirnos en instructores, pero si analizamos el punto de vista de observación de los Grandes Adeptos, de los Grandes Iniciados, y vemos que el Espacio es nuestra patria, y que el Espacio es la patria de las Mónadas espirituales, el espíritu del hombre es hijo del Espacio, y el Akasha, el Akasha del cual tanto se ocupa la ciencia esotérica no es más que el manto que recubre el Espacio, lo cual significa que en el Espacio que llamamos Akasha existe tiempo, y a pesar de ello hay muchas dimensiones en el Espacio, porque el Espacio, tal como hemos viniendo diciendo constantemente, es multidimensional, multimolecular y multigeométrico, y por lo tanto, nosotros tenemos que atravesar el Akasha y descubrir aquello que es realmente Espacio, aquello que es puro, de ahí, que a los Grandes Magos se les ha exigido la pureza, porque la pureza del Mago lo lleva al Espacio traspasando el velo del Akasha, allí donde se forma la sustancia creadora de los mundos.
Pregunta - Has hablado que la magia es voluntad y manifestación, define ésta voluntad comparándola con las pequeñas voluntades de los hombres, y aquella frase de Krishnamurti de la no-voluntad, es decir, definir la escala de valores de la misma palabra
Vicente - En realidad yo he dicho, que Schopenhauer, decía: “La voluntad crea la manifestación”, igual que el espíritu crea la materia. Entonces, la voluntad es la afirmación del ser o del Espacio por encima del tiempo, el tiempo, no se si Uds. se han dado cuenta de ello, es una ilusión, si Uds. tienen problemas existirá el tiempo y entonces Uds. serán esclavos del tiempo. Pero, cuando Uds. están serenos, tranquilos y en paz, no existe tiempo, existe Espacio, el tiempo es una figuración mental, sólo existe en tres dimensiones, en la cuarta dimensión si existe el tiempo será muy distinto, aunque sea el tiempo, o en el plano mental o en el plano que sea, porque no olvidemos que estamos inmersos dentro de un universo fenoménico, es decir material. No sabemos lo que pasará en los planos cósmicos, hablamos siempre única y simplemente de nuestro Sistema Solar, que es nuestra atalaya, nuestro campo de observación, no podemos introducirnos abstractamente en algo que nuestra mente sería incapaz de captar, aún utilizando la analogía podemos ampliar el concepto de lo que sucede en el Sistema Solar y ampliarlo a otros Sistemas Solares que conjuntamente con el nuestro crean un Universo Cósmico, pero ¿qué sabemos de aquel Universo Cósmico, sea astral, mental o búdico?, sólo sabemos aquello que nos permiten las reglas temporales de tres dimensiones, y para sacudirnos del tiempo dentro de tres dimensiones creamos una voluntad superior, esta voluntad es intención, es propósito, el propósito de la búsqueda, y las pequeñas voluntades de los hombres es el libre albedrío que tiene todo ser humano en virtud de tener autoconciencia mental, si tuviera autoconciencia astral, el tiempo cambiaría radicalmente así como el aspecto de la propia voluntad, y si hablamos en términos mentales en el sentido espiritual, en el sentido de la mente superior, nos encontraríamos también limitados por el paso que va de lo abstracto a lo búdico. Existe la medida de lo eterno, y la medida de lo eterno está en tres dimensiones, tratamos de medir lo eterno en tres dimensiones, lo cual significa que siempre nos estamos equivocando, porque tal es la facultad que tiene el libre albedrío del hombre, la libertad que tiene de equivocarse constantemente, y por lo tanto, la voluntad rectora de reorientar constantemente aquella voluntad que se ha equivocado, y a esta rectificación la llamamos en un sentido psicológico, el enderezamiento de la vida personal, lo cual significa, si Uds. lo observan, que estamos constantemente inmersos en una lucha entre nosotros y el ambiente que nos rodea, entre nosotros y la familia, la tradición, la herencia, todo cuanto nos está condicionando, y Uds. me dirán, ¿es que la familia, la tradición, el trabajo, el ambiente social no es un campo de trabajo?, yo les digo que sí, que todo esto es un campo de actividad o de trabajo, pero no podemos empequeñecer la voluntad plegando las condiciones que surgen de estos conceptos temporales. Hay que ir más allá del concepto temporal, ya se aplique a la familia, al ambiente o a la tradición, hay que ir más allá de todas estas cosas, y Uds. preguntarán, ¿cómo se puede realizar esta transmutación?, simplemente proponiéndonoslo, siendo activos en el pensar, en el sentir, en el actuar, y al decir activos me refiero a que seamos nosotros, solamente nosotros, los que pensemos, los que deseemos, los que hablemos o los que actuemos, que no siempre es el yo el que habla, el que siente o el que piensa, me refiero simplemente a que hay que enderezar el camino interno y convertir nuestra pequeña voluntad, nuestro pequeño libre albedrío, en voluntad espiritual. La voluntad espiritual es hija del Espacio, la voluntad temporal, el libre albedrío es el ejercicio del tiempo, ¿podrían Uds. darse cuenta de esta diferencia y actuar entonces en un sentido creador?, éste es el desafío, no el desafío actual, el desafío de todos los tiempos, progresar hacia síntesis, sin que la idea de síntesis pueda enturbiar el libre ejercicio de la razón pura, pues entonces crearíamos un rigidez y volveríamos a la historia del pasado. Hay que vivir de acuerdo con los nuevos tiempos, cuanto sucede es el pasado, y antes que todo esto que es pasado se convierta en presente, el hombre deberá rejuvenecerse tanto, deberá perder tanto de sí mismo, que ha de quedar exhausto por completo de tiempo, ha de perderlo todo, ha de caer en la más profunda soledad, ésta profunda soledad que no es aniquilamiento, sino que es el principio de la acción correcta.
Pregunta - El ser humano pasa del tiempo al Espacio a través de las iniciaciones, ¿éste proceso se puede equiparar también para un Logos Planetario o un Logos Solar?
Vicente - Hermes Trismegisto, el Padre de la Sabiduría, había dicho que “igual es arriba que abajo y que igual es abajo que arriba”, la medida del tiempo depende del grado de adaptación del ser, no del hombre simplemente, del ser, a las condiciones que el mismo ha creado y de surgir triunfante constantemente de esas condiciones, ya se aplique a un ser humano, al Logos Planetario o al Logos Solar, porque todo es lo mismo, repetido incesantemente, llegará un punto dentro del cual, la vida, la regla, la medida y la síntesis se conviertan en una unidad, una unidad que entonces no será simplemente el tiempo, será algo más, verdad, será el inicio de otro sentido de valores que actualmente nos son incomprensibles, para llegar a un punto de síntesis en el cual habrá paz y no habrá confusión, habrá más Espacio que tiempo, si podemos decirlo así. En la consumación del tiempo se halla la ley del Espacio, ¿pero cuándo nos liberamos del tiempo?, no será cuando estamos profundamente advertidos de lo que está sucediendo aquí y ahora, ésta es la realidad, si aquí y ahora estamos muy atentos el tiempo desaparece, porque no existe en realidad, es una figuración, lo hemos creado nosotros y como que hemos creado el tiempo, hemos creado la confusión del tiempo, que es la impaciencia y el afán de resultados concretos y rápidos, y sin embargo, hay que vivir muy atento y con mucha paciencia para comprender el valor de lo real, y para evitar que la confusión ataque nuestros principios más queridos, aquello que crea, estiliza, organiza y promueve el sendero espiritual, ésta es la realidad esotérica, ésta es la realidad por la que trabajaron todos los grandes alquimistas del pasado, los grandes magos, y los grandes Maestros, porque realmente, lo que separa al hombre corriente del Maestro, del Adepto o del Instructor, es la capacidad de vivir más allá del tiempo, y Uds. preguntarán, ¿se puede vivir sin tiempo?, el tiempo es algo que hemos creado a través del movimiento de los astros, es el tiempo cronológico, pero no es lo mismo el tiempo cronológico que el tiempo psicológico, porque el tiempo psicológico puede atarnos a la tradición, puede atarnos a aquello de lo cual queremos librarnos, el tiempo cronológico es circunstancial, es aquello que tenemos que hacer constantemente, pero nuestra mente debe estar desligada de aquello, y sin embargo, al hacerlo estar tan atentos que lo realicemos con plena perfección. La raíz de la magia es hacer las cosas lo más perfectamente posible.
Pregunta - ¿La inteligencia válida progresa a medida que progresa la voluntad?
Vicente - Si la persona es inteligente, no intelectual cuidado, desarrollará la voluntad de acción, seguirá las indicaciones de la intención y no las vaguedades de la mente, y entonces, la voluntad y la inteligencia constituirán un solo bloque, una sola unidad, avanzando inteligentemente, guiado siempre por la voluntad, la voluntad es acción, la inteligencia es movimiento, si podemos unificar la acción y el movimiento seremos verdaderos magos. La historia de la raza, la historia de nuestro mundo nos habla de aquellos excelsos seres que pudieron llegar a ciertas cotas espirituales trascendentes, para el cual no hay palabras, el Nirvana por ejemplo, una ausencia total de tiempo, la penetración dentro de la trascendencia del ser después de haber vencido la inmanencia, o de haber afinado tanto la inmanencia con la trascendencia que ambas polaridades constituyen ahora una sola unidad, una unidad que está más allá del tiempo, más allá del Espacio, más allá de todo, es el descubrimiento del Yo, el Yo tan sereno, tan inmutable, cuando está en Espacio que cuando está gobernado por el tiempo, es el Yo que subsiste, es el Espíritu, es la Mónada. Y el Espíritu o la Mónada son parte esencial del Espacio, en tanto que lo demás, lo que desciende mas allá de la Mónada es el proceso temporal de manifestación del Espacio, es la magia trascendente de los Dioses, o la magia corriente que utilizamos los seres humanos que queriendo o no queriendo estamos creando profundas repercusiones en el orden social, o en el orden familiar o profesional que nos rodea. Si no somos capaces de provocar cambios correctos a nuestro alrededor es que todavía somos aprendices de mago, y unas veces haremos las cosas bien y otras mal. Pero, llegará un momento en que habrá dentro del corazón del hombre un equilibrio, este equilibrio gestará un nuevo ser, una nueva voluntad si Uds. me lo permiten, un nuevo enfoque, una nueva vida social, llena de valores permanentes, algo que ya no podrá detener el carro del tiempo, porque siempre estará por encima del tiempo, jamás será gobernado, siempre estará gobernando, no existe karma ni destino para este ser, es el karma y el destino que él mismo se impone, es la ley de los magos, que utilizan la fuerza del Alkahest, del Gran Disolvente Universal del Espacio para evaporar el tiempo, y convertir el tiempo en eternidad a través de la redención de la materia.
Pregunta - ¿El Espíritu esta inmerso en el Espacio o es el mismo Espacio?
Vicente - El Espíritu es el Hijo del Espacio, el Espacio es una entidad de la que surgen las Mónadas y a través del Akasha todo sistema de manifestación temporal. El Akasha es el recuerdo, y en el Espacio existe solamente la pureza de la acción, de ahí que se le llama a la Mónada del Espíritu, el Hijo del Espacio, ¿por qué?, porque es puro, la Mónada es pura, como es puro el Espacio. Cuando hablamos de Espacio en un sentido ordinario hablamos de éter, el éter es la limitación del Espacio, cuando cualquier Logos creador crea un mundo o un sistema de mundos, atrae del Espacio, – del Akasha-Espacio hay que distinguir – todos los materiales que precisa para su manifestación, sin embargo, el Espacio permanece puro e incontaminable. Es tan sutil la diferencia entre el Espacio y la Mónada que casi podríamos decir que es la misma cosa, pero no es la misma cosa, el Espacio es el ser absoluto del cual surgen todas las Mónadas, las Mónadas de los Logos de las más elevadas constelaciones y galaxias, ¿qué sucede entonces?, que el Hijo va creciendo en el seno de su Padre, el Espacio, constantemente, significa que dentro del Akasha, dentro del éter, cada vez será más amplio su radio de acción, pero al final, cuando venga el Gran Pralaya, ¿qué quedará?, nada, solamente quedará el Espacio sintetizando las memorias, los recuerdos de aquellas manifestaciones, y sin embargo, el Espacio continuará impasible.
Pregunta - Hablando siempre del Espacio, movimiento y tiempo, pregunto ¿seremos víctimas de un espejismo en la tercera dimensión, de que el movimiento no puede existir sin tiempo, o sea, mi pregunta es: existe un movimiento sin tiempo?
Vicente - Cuando el movimiento lo referimos a tres dimensiones sí, hay movimiento, cuando lo referimos a la cuarta dimensión hay movimiento, más rápido, pero hay movimiento, y cuando vamos a la quinta dimensión el movimiento se acelera, lo cual significa, que la medida de la luz es diferente y la medida del espíritu inmerso en el Akasha, al cual hacemos referencia, estará limitado por las coordenadas de aquella luz. Vamos a ver si lo sintetizamos porque esta idea es muy interesante, cuando nosotros hablamos de tiempo, quizá lo referimos a la velocidad de movimiento que podamos imprimir a nuestra vida o a cualquier mecanismo de propulsión, como los grandes aviones, pero, todo movimiento impuesto por la velocidad es limitado, a medida que nos acercamos al punto cero, en donde el movimiento es tan grande que no podemos percibirlo, aparece como silencio, por lo tanto, cuando la mente no está pensando, el movimiento de ésta mente es extraordinariamente veloz, no es un movimiento entre un pensamiento hasta otro pensamiento, sino que es tan rápida la apreciación del pensador, que el pensamiento ha quedado diluido, entonces viene aquello que Krishnamurti llama el vacío creador, impuesto por aquella gran ley que dice: que el pensamiento negativo es la más alta forma de pensar. El movimiento lo aliamos a velocidad, pero la velocidad de la luz en tres dimensiones a 300.000 km/sg, si pasamos el movimiento a la cuarta dimensión, cambia constantemente y cambian todo totalmente en su movimiento y en su velocidad, por lo tanto, las formas, las apreciaciones, los conceptos cambian también fundamentalmente, y si lo pasamos a la quinta o sexta dimensión del Espacio, éste movimiento será inconcebible para el ser humano, y sin embargo, quizá aparece como tiempo a la visión de los Grandes Rishis, de los Grandes Adeptos Solares, ¿se dan cuenta de la cuestión? Nosotros siempre estamos tratando, cuanto viene a nuestra observación, desde un punto de vista de tres dimensiones, y éstas tres dimensiones nos limitan, nos condicionan, pero la condición existe en la cuarta dimensión y en la quinta dimensión. Si estamos atentos al movimiento, ahora bien, ¿y si no estamos haciendo conciencia del movimiento?, tanto lo que se mueve en tres, cuatro, cinco o seis dimensiones, estará libre del tiempo porque se habrá liberado de la velocidad del movimiento.
Pregunta - ¿Hay diferencia entre el mago activo y mago pasivo, y si hay diferencia en qué radica?
Vicente - Bueno yo no diría que existen magos pasivos, todos somos magos, porque desde el momento que pensamos, desde el momento que sentimos, desde el momento que hablamos o actuamos, estamos aplicando magia, no somos jamás pasivos, podemos hablar de la corrección de nuestra vida en relación con la magia, y podemos convertirnos en magos conscientes, es decir, pensar de acuerdo con la ley y la intención correcta, sentir, siguiendo el mismo principio de ordenación correcta, y hablar teniendo cuidado, sabiendo que, tal como hemos hablado aquí repetidas veces, la palabra es un gran poder, que puede herir o puede salvar, si nosotros estamos o no estamos conscientemente dentro de la acción que surge de ésta magia que estamos creando, si nos damos cuenta de que somos magos inexpertos, lo cual significa que no somos magos pasivos sino magos inexpertos e ignorantes, no quiere decir que no existan personas que utilizan correctamente el aspecto mágico para crear condiciones nuevas para la humanidad. ¿Y por qué, sabiendo que nuestra vida es una océano de magia, no nos decidimos a convertirnos en magos conscientes?, como les decía estamos enfrentando un gran desafío, un desafío altamente social, un desafío dentro del cual no existe otra cosa que acción correcta en beneficio de la inmensa mayoría de la humanidad, y no sólo para el reducido grupo de aquellas personas que nos rodean, ¿seremos capaces de salir del ruedo de la familia, de la tradición y pensar en términos más elevados y comprensivos, y al propio tiempo más universales?, que todos cuantos nos rodean sean hermanos de acuerdo con la ley, que buscan lo mismo, que sólo se diferencian por la carne pero no por el espíritu, y yo les digo que la magia es espíritu que trata de dignificar la carne, o sea, que trata de redimir la materia sea cual sea la dimensión donde se mueva ésta materia, y llegado este punto trae como consecuencia un nuevo enfoque de la vida y un nuevo sentido de valores sociales, no podemos buscar al hombre social perfecto, – y perdonen Uds. – en las iglesias, en los partidos políticos o en determinado ambiente social, hay que buscarlo en el corazón, el corazón esta libre de todas éstas cosas, porque el liberarnos de la tradición, del dogma de los principios establecidos, trae como consecuencia esta libertad interna que produce el hombre nuevo.
Repito, la magia es para crear el hombre nuevo, el nuevo orden social, la nueva vida, más plena y más correctamente organizada, con más equilibrio, con más justeza, con más visión universal.
Pregunta - Quisiera continuar esta pregunta porque, de alguna manera, yo creo, que hay una pequeña frontera, aunque sea muy sutil, entre el mago activo y el mago pasivo, ya que por ejemplo si, alguien está perfectamente sincronizado con cualquier acción, si la acción y él es una cosa, si la atención que se presta a esta acción es tan profunda que desaparece una distancia de tiempo y Espacio, yo creo que aquel momento se convierte uno en mago pasivo, es transformado por el acto éste de la atención, en cambio yo me pregunto entonces, si ¿al fundirse en ésta unicidad desaparece la intención del mago o es que es más superior el acto de transmutación de ésta magia que la voluntad del mago con un aspecto determinado?
Vicente - Bueno, cuando la persona esta muy atenta, cuando su atención es tan profunda y sostenida que entre él y la cosa observada no existe distancia, es cuando realmente esta aplicando la magia en su más alto sentido, no es pasivo, porque la atención no es pasiva, la atención se relaciona con el Espacio, por lo tanto, si la atención se relaciona con el Espacio, es decir, con la Mónada Espiritual, y no con el ego, cuidado, entonces es cuando realmente esta operando mágicamente, está irradiando fuerza y luz, en virtud de la capacidad de atención que está produciendo, que está determinando, no elige un campo determinado, porque un mago suele estar muy atento siempre, porque si no está atento se le escapan las posibilidades de la acción, pierde el sentido de lo trascendente, y lo inmanente queda oscurecido constantemente dentro de sí por el oscurecimiento de las dificultades que engendra no estar atento, es decir, la distracción que se adueña de la mente, y cuando la persona está muy distraída, cuando la persona no está muy atenta, dentro de los intersticios de su falta de atención penetra a las fuerzas indeseables del ambiente, y el hombre se convierte en un médium sin que se de cuenta, entonces piensa, siente, actúa, sin que su yo se entere, porque no está atento. Hay personas que equivocan el camino y se convierten en médium buscando la magia, y la magia como Uds. saben empieza con el Raja Yoga, con la integración mental, con la creación del Antakarana, y esto lo venimos estudiando desde hace muchos años, entonces, se precisa un nuevo enfoque, nuevas palabras que definan la misma cuestión sin que la cuestión quede cristalizada. Nosotros como aprendices de mago que queremos convertirnos en magos, deberíamos cambiar constantemente la piel como hacen las serpientes, ser nuevos constantemente, y las serpientes como reptiles nos enseñan mucho, porque Uds. saben que las tradiciones más antiguas nos hablan de la serpiente como la expresión de la sabiduría en el hombre, entonces, la expresión simbólica, el reptil que conocemos y que a veces nos aterra, es una expresión de la mutación, del cambio constante, es decir, la alquimia de convertir lo viejo en algo nuevo o el plomo en oro, hablando en el sentido completamente alquímico, la transmutación, pero la transmutación no puede existir sin esta renovación constante del espíritu del hombre, aunque esté manifestado en el seno de la materia, inmerso en éste Akasha, que es la limitación del Espacio.
Pregunta - Para tener atención, necesitas una intención, ¿no?, entonces, ¿podías describir ésta intención realmente que es, decir que es y de donde viene?
Vicente - La intención decide estar atenta y entonces se produce una vinculación de la atención con el espíritu, porque el espíritu es intención, es propósito, no es amor, no es inteligencia, hablamos de intención y de propósito, si tenemos la intención de estar atentos ya estamos atentos, porque es lo mismo, la intención y la atención son consustánciales, no podemos decidir estar atentos sin estar atentos, lo que pasa es que no estamos dispuestos a estar atentos, nos aterra el trabajo, porque es más fácil vivir divertidamente, viendo el ambiente como un gran Espacio donde la mente se disuelve, es decir, que estamos contemplando la historia sin que nosotros creemos historia, y ese es el pecado de los hombres, que no son capaces de crear una historia, están condicionados constantemente por su inercia, por su falta de movimiento, por su falta de atención, por su carencia total de intenciones de estar atentos, pero si Uds. están atentos, aunque sea una fracción de segundos, aunque sea efímero este lapso de tiempo, Uds. tendrán plenitud durante este tiempo que están atentos, al paso que si Uds. no están atentos jamás tendrán plenitud, estarán batiendo el compás del tiempo constantemente.
Pregunta - La verdad, la iluminación, la realización viene a través de la intuición a la mente, ¿cómo se puede distinguir ésta realidad de una alucinación mental?
Vicente - Cuando el ser humano tiene una intuición está tan plenamente seguro de esto que es verdad, que nadie se lo puede arrebatar, no es un ejercicio mental la intuición, la intuición proviene de esferas que por su condición de Rayo, están muy de acuerdo con la Mónada, la cual está muy de acuerdo con el Espacio y con las leyes que gobiernan el Akasha, es decir, si la persona esta muy atenta, cuando la mente se disuelve por efecto de la atención, que surge de una intención de base, entonces, la mente deja de ofrecer resistencia a las energías que provienen de los planos superiores, queda indefensa, pero al propio tiempo incorruptible, pura e incontaminada, y entonces, refleja el Espacio y la Mónada, pero como que no puede contenerla todavía, viene el plano búdico y le ofrece la intuición, y entonces, el pensador desde el plano causal se da cuenta de que aquello es verdad, y ningún instructor espiritual por grande que sea podrá desviarle de esta verdad que él ha conquistado. La intuición no puede venir por el esfuerzo, cuando estamos indefensos, cuando nada tenemos que ofrecer, ni nada que recibir, cuando nos hemos liberado de la Cruz y somos la Rosa, viene un estado nuevo de conciencia, un estado de conciencia en donde la mente no tiene gran importancia, me refiero a la mente intelectual, entonces, se forma encima de la persona y a su alrededor una especie de Cáliz, el Cáliz de los tres cuerpos sumisos en la voluntad del Ego, y aparece entonces la intuición que se introduce en el recipiente de Manas, y da la sensación clara, permanente y absoluta de la verdad, que el Ego ha conquistado, y esto trae como consecuencia una paz, una plenitud, un orden, un equilibrio, y a partir de aquí tenemos ya el principio del Hombre Nuevo, del verdadero mago, de aquel que puede vivir por sí mismo, porque se ha convertido en un Dios en potencia, y puede actuar a la manera de los Dioses. Tengamos en cuenta ésta diferencia, intención, atención, intuición y aceptación de la intuición, de la idea pura por el pensador, y el pensador puede transmitirlo después a través del intelecto, pero el intelecto no ofrecerá resistencia al pensador, será un campo abonado ya, será el instrumento verdadero del pensador, pero hay que tener verdadera intuición para que se realice este prodigio, para que la mente se convierta en el instrumento del pensador, y el pensador entonces es el canalizador de las fuerzas del Espacio a través de la Mónada, y el ego es un indicio que irá desapareciendo, porque a pesar de su gran evolución, el cuerpo causal es sólo un elemento circunstancial que con el tiempo desaparecerá, y todo, porque la Mónada a través de vehículos muy especializados, muy bien organizados ha logrado introducir el fuego del propósito a través de una atención persistente y continuada, y entonces surge la estirpe de los Grandes Instructores.
Pregunta - ¿Qué diferencia hay entre persona intelectual y persona inteligente?
Vicente - La persona intelectual suele vivir abarcando conocimientos, y cuantos más conocimientos tiene más intelectual, se extiende en horizontal, ve las cosas en forma periférica, y por grandes que sean sus conocimientos, siempre estará preso de su mente concreta. Pero, la persona inteligente no precisa de conocimientos variados en profusión, porque esta observando directamente como se producen las cosas, no a través del intelecto, el intelecto es un tamiz que separa al hombre de la verdad, de la realidad, y ésta realidad esta aquí presente en todos y cada uno de nosotros, y cómo vamos a comprendernos si nos enjuiciamos a través de la medida del intelecto. La medida del intelecto es causa de muchos de los males de la sociedad, en cambio, que la inteligencia no tiene medida, porque la inteligencia es un equilibrio entre la razón y el amor, no hay una diferenciación, es un impulso constante de equilibrio, las cosas se ven desde el corazón no desde la mente, porque, como hemos dicho en varias ocasiones, la mente conoce pero el corazón sabe, ahí está, el conocer y el saber, la diferencia entre el hombre intelectual y el hombre inteligente. Además, el hombre intelectual siempre esta pendiente de nuevos conocimientos, se convierte en un erudito, pero la erudición no es inteligencia, es una acumulación de datos dentro de su conciencia, dentro de sí, y cuanto más peso tenga su mente, más difícil será emprender el vuelo hacia la verdad. En tanto, que si la persona, sin querer pretender ampliar tanto el campo conceptual de los conocimientos, se impregna del destino de los demás, de lo que sucede estando muy atento, se produce una metamorfosis, una transmutación dentro de sí, aprende las cosas por intuición no por ejercicio mental, no por esfuerzo, si el hombre tiene que esforzarse para pensar siempre será un intelectual, no un hombre inteligente, pero si deja el ejercicio de la mente, si deja de esforzarse por adquirir conocimientos pero esta muy atento y vigilante, entonces atesorará una experiencia que le permitirá adueñarse del secreto de las edades. No es por conocer mucho, sino por saber las cosas tal como son, como crecen los grandes seres o se estilizan los grandes magos o los grandes argonautas de la humanidad. Se ha perdido ya el misterio, la fe, el sentido íntimo de la iniciación, se ha perdido todo, porque en realidad estamos buscando constantemente resultados lo cual es intelectual, y cuando no busquemos resultados, cuando estemos atentos a la ley, cuando la ley se hace carne en nosotros, cuando vivimos de acuerdo con la realidad, entonces, surgirá – repito – el hombre nuevo, ojalá estuviésemos preparando el camino para el hombre nuevo, que lo que estamos tratando de descubrir Uds. y yo, se convirtiese en un elemento fecundo de integración espiritual y no simplemente en un ejercicio mental para después empezar a decir, esto me parece bien y esto me parece mal. Lo ideal sería que Uds. saliesen de aquí con la mente libre, sin pensar en lo que hemos dicho, porque si Uds. han estado atentos, todo cuanto se ha dicho se ha convertido en fertilidad dentro del corazón, ¡lo saben ya!, ¡no lo conocen simplemente!
Pregunta - ¿La atención tiene que ver algo con la constitución del cuerpo mental?
Vicente - Naturalmente, si la persona está atenta impone un desarrollo más rápido a sus vehículos de manifestación, porque en cierta manera los purifica, los enaltece, les quita bagaje, y éste bagaje que les está quitando es lo que permite orientarse definitivamente hacia la verdad, hacia síntesis. Todos estamos pendientes de lo que va a suceder o de lo que sucedió, y sin embargo, lo que está sucediendo ahora que es tan interesante y es la base de la realización, pasa inadvertido, y todo cuanto estamos diciendo aquí, sea cual sea el enfoque desde el cual surgimos como base de comentarios, siempre dirá lo mismo, que la atención es básica y que el intelecto no soluciona el problema del hombre, y que la verdad se descubrirá cuando la mente se convierta realmente en un ente investigador, no en un ente que trata de formular ecuaciones acerca de cualquier expresión que esté considerando. La verdad es fácil, el camino hacia la verdad es difícil, porque lo estamos tratando de descubrir a través del intelecto, y yo les digo y les aseguro, que el intelecto deberá desaparecer, al menos como factor potencial, y dejar que sea la parte interna quien gobierne los impulsos mentales, y esto solamente se podrá realizar cuando exista una gran atención, una observación profunda y serena hacia todos los acontecimientos que tienen lugar dentro y fuera de sí, de esta manera crearemos el atalaya inmenso que nos permitirá descubrir las orillas más lejanas de la verdad, y sin embargo, estaremos tranquilos y confiados, y por lo tanto, estaremos avanzando sin que nos demos cuenta y sin que nuestra atención se paralice un solo momento, esto trae como consecuencia fruición, plenitud, éxtasis. Un poco de silencio.
CONFERENCIA VICENTE BELTRAN ANGLADA
14-Febrero-1987