Conferencia
Vicente Beltrán Anglada
[edición en curso]
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La verdad ha de presentarse de tal manera, que convenza sin atar y que atraiga aun sin convencer. Esto sólo puede realizarlo el lenguaje del corazón.
[VBA: Introducción al Agni Yoga, p. 49]
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Conversaciones Esotéricas
Las puertas de entrada a Shamballa
Barcelona, 14 junio 1984
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Barcelona, 14 Junio 1984. —Conversaciones Esotéricas: El Libre Albedrío en el Hombre y el Plan de Dios. Libre albedrío, voluntad espiritual y el reloj cósmico de los astros. El karma individual. Proyectos Jerárquicos hacia la Humanidad y los Avatares. Los riesgos del gregarismo, la imitación, etc., en la Humanidad, sus consecuencias y la ley de la Jerarquía. El karma conjunto. La conversión en discípulo y el milagro que se produce a través de la serena expectación.
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Interlocutor.— Ayer cuando dijiste tan evasivamente que el Avatar volvería cuando los tiempos fueran cumplidos, bueno, indudablemente contestaste a la pregunta, pero, entonces se abrían a la vez otros interrogantes. Uno de ellos es el famoso libre albedrío; otro, las pequeñas voluntades de los hombres, entonces yo pregunto: Si, de una manera muy interrelacionada, la humanidad depende de este gran reloj cósmico, y su pequeña voluntad no acelera para nada este reloj cósmico, que los acontecimientos se cumplirán cuando llegue el momento a pesar de las pequeñas voluntades de los hombres, a pesar de que el hombre tiene la facultad de equivocarse, de elegir un camino u otro, a pesar de todo ello, más allá de todo esto está inexorablemente el reloj cósmico. Entonces, ¿de qué sirve el libre albedrío? ¿De qué sirve esta pequeña voluntad? ¿Qué puede hacer el hombre para sacarse o sacudirse el yugo de los astros?
Vicente.— Bueno, en primer lugar hay que decir que el libre albedrío y las pequeñas voluntades de los hombres es la misma cosa, pero cuando se trata de acelerar el proceso evolutivo de un ser humano, o de un grupo de seres humanos, entonces hay que contar con la voluntad espiritual que nada tiene que ver con el libre albedrío, porque el libre albedrío se mueve dentro de las cárceles del círculo-no-se-pasa de los vehículos, en tanto que la voluntad espiritual es como si fuese una participación directa, sensible y consciente con la voluntad del Padre. La voluntad del Padre ha dispuesto, por ejemplo, un tipo de civilización para la humanidad que deberá tener sus inicios en determinada época coincidiendo con grandes conjunciones astrológicas. Entonces, el problema que planteas, es si una vez ha sido planteado por el Logos, o por el Señor del Mundo, determinado tipo de civilización o de cultura de los pueblos de la Tierra, si deberán conformarse rígidamente a aquel proceso marcado por las estrellas en el reloj cósmico, o si bien los hombres podrán acelerar de una u otra manera cuando tengan voluntad espiritual las incidencias marcadas por aquel reloj cósmico. Lo único que se opone y resiste a la voluntad de Dios es el libre albedrío, entonces, las pequeñas voluntades de los hombres tienen su importancia, porque realmente están de una u otra manera alterando todo lo que el Logos haya dispuesto kármicamente para una era determinada. Entonces, puede haber un retardo en la evolución no por parte de los hombres espirituales o de aquellos que han alcanzado la voluntad espiritual, sino por aquel grupo que llamamos las pequeñas voluntades de los hombres y que están sujetos a este gran problema que mencionábamos ayer de la masificación. Entonces, hay un bloque que reacciona contra la voluntad de Dios dentro de la propia voluntad de Dios, podíamos decir que viene a ser de una u otra manera como las células del cáncer que van al revés de todo el conjunto corporal y causan una fricción y esta fricción causa dolor, causa una enfermedad y puede causar la muerte; en el caso del cáncer será la muerte de un cuerpo físico, en el caso de un programa cósmico, de un programa del Logos, puede ser la muerte de un tipo de civilización que tendrá que posponerse hasta determinado ciclo.
Ahora bien, si decimos que cuando el hombre ha acelerado su proceso particular, se acelera todo el todo el proceso ambiental que le circunda, hay que tener en cuenta entonces la voluntad espiritual, tiene que tener un efecto directo sobre las pequeñas voluntades de los hombres o sobre el libre albedrío de los hombres, creando zonas, digamos, de fluir intenso de vida divina en aquellas porciones donde exista un hombre que ha educido de una u otra manera la voluntad espiritual, como el caso de los iniciados. Un iniciado, por el solo hecho de serlo, acelera el curso de los acontecimientos individuales, no altera el programa cósmico sino que lo favorece. Es decir, que de acuerdo con la pregunta, si el Logos ha establecido –en este caso el Logos Planetario para no ir al Logos Solar– ha establecido una cultura determinada para un determinado pueblo de la Tierra, o determinadas fracciones de pueblos en la Tierra, todo está determinado de acuerdo a cálculos cíclicos perfectos, porque conocen la astrología, no solamente la normal, la conocida, sino quien domina la astrología esotérica y además la astrología jerárquica que tiene que ver con las mónadas de los hombres y no con las pequeñas personalidades, en tanto que la astrología esotérica tiene que ver con el alma de los hombres, con el Ego, con el alma solar digamos. Entonces, al haber está infusión de energía poderosa, en el caso del iniciado que irrumpe dentro de su contexto social, implica que por radiación, porque la radiación magnética es una ley, un principio de la naturaleza, por radiación pone en incandescencia, o pone en vibración, aquella parte de la voluntad imperfecta de los hombres, el libre albedrío, y le da un estímulo que le ayuda a evolucionar. Así que los máximos colaboradores del Señor del Mundo son los Iniciados. Los Iniciados participan activamente de la gloria del Logos y entonces son sus avanzadas, y de acuerdo con estas leyes, si todos los hombres fuesen perfectos, o hubiesen educido hasta cierto punto los proyectos y anteproyectos del Logos, se cumplirían matemáticamente en el momento oportuno.
En cambio, existe lo que llamamos el karma individual, todos tenemos un karma y nos debemos a este karma. Se nos dice que nosotros no podemos alterar el curso del karma, pero sí podemos hacer algo: podemos situarnos en conciencia por encima del karma y contemplar cómo se está liquidando el karma desde el puente. Cuando va pasando el río de los acontecimientos, nosotros estamos encima del puente contemplando impersonalmente que va pasando sobre nuestra pequeña vida aquello que está marcado por la ley, favorecemos entonces, por adaptación sincera, el trabajo de los Señores del Karma, no nos entrometemos en su voluntad o en su justicia, sino que lo acatamos. El caso de los suicidas, como hablábamos el otro día, es el caso completamente distinto o contrario de el del Iniciado, éste va a favor de la ley, y el suicida o el mago negro van contra la ley, porque si el karma tiene que cumplirse en el año 1980 y se quita la vida en el año 1920, quedan sesenta años. Entonces, ¿qué haremos con los sesenta años? Esotéricamente no se miden en forma temporal sino en términos de energía, la energía que se hubiese generado durante sesenta años de acuerdo con las analogías cósmicas, de acuerdo con el karma y de acuerdo con las posibilidades o grado de evolución de aquella entidad que se ha suicidado. Como veis, en el caso del Iniciado se va a favor de la ley, en el caso de un mago negro y en el caso de la persona que atenta contra su vida, que se la quita voluntariamente, va contra la ley, altera todos los planes del Creador con respecto a su minúscula vida, pero, ¿qué sucedería si fuese una cantidad impresionante de seres humanos que se hubiesen muerto voluntariamente por no querer afrontar el riesgo de la acción, el riesgo del karma?, ¿qué sucedería entonces?, porque el Logos Planetario sabía exactamente a qué se exponía allí cuando al hombre-animal le dotó de mente, y al dotarle de mente le dotó de autoconciencia, y al dotarle de autoconciencia le dotó de voluntad individual o individualizada. Y esto es el libre albedrío, y sabe Dios que durante el curso de los siglos esta voluntad ha estado constantemente en contra de los principios divinos, en contra de los planes establecidos. Así que cuando la Jerarquía prepara un Plan, digamos, para dentro de cien años, no sabe si la humanidad podrá responder a las exigencias del Plan, si podrá corresponder con su propia voluntad al desarrollo de este Plan, no lo sabe, ¿verdad? Pues entonces la Jerarquía tampoco, ni cualquier entidad espiritual dentro de este gran cuerpo que es el Logos Planetario, no podrá disponer una actividad dentro de la humanidad si la humanidad no se lo consiente. Y como hay una ley que no se puede alterar el karma de la humanidad y aquella voluntad del hombre está creando karma, resulta que el karma de la humanidad se está agrandando cada vez más llegando a extremos inverosímiles. No está escrito dentro de los planes, digamos, del Logos planetario, ni de Sanat Kumara, que exista una degradación artística, que exista una degradación moral, que exista una degradación humana, no está escrito, está escrito el progreso constante. ¿Qué sucede entonces? Entonces, lo que puede hacer la Jerarquía, inspirada por Shamballa, es aumentar el ritmo espiritual sobre los discípulos, porque a medida que van avanzando los discípulos se contrabalancea el peso de aquellos que van en contra de la ley, y establecen un ritmo positivo dentro de un caos negativo, y entonces se va cumpliendo la ley más lentamente, pero se va cumpliendo.
Entonces, yo creo que estamos aquí, más que por escuchar lindas frases y por hacer una meditación donde nos encontramos bien, es para que tengamos conciencia de que somos una entidad consciente dentro del Logos Planetario, y que cuando tenemos un poco de conciencia dentro del Logos Planetario es cuando debemos trabajar conscientemente para que sus planes no sean alterados, porque a través del tiempo la mayoría de discípulos han sido ejecutados por las fuerzas que van contra la verdad. El caso reciente, por ejemplo, de los mártires de los conflictos sociales del mundo, los mártires de la Edad Media en la Inquisición, el testimonio de Giordano Bruno, de Galileo y de todos los grandes hombres que han testificado la verdad y han muerto por la verdad, han sido ejemplos que han dado una revalorización, un oasis de frescura dentro del reseco desierto de la humanidad. Y es por esto que a los discípulos se les denomina místicamente “la Sal de la Tierra”, porque la tierra es desaborida, no tiene sabor si no existen los discípulos. Solamente hay caos y confusión y, por lo tanto, hay dificultades tremendas para ir avanzando, para ir evolucionando, para ir cumpliendo la ley. Y esto es precisamente lo que trataba de decir en cierta manera, que para ayudar al restablecimiento de la ley vienen cíclicamente los grandes avatares, los avatares del medio, los avatares menores y, por lo tanto, todos los avatares son aspectos de la voluntad de Dios perfecta que vienen a enseñar a que los hombres perfeccionen su pequeña voluntad y la conviertan en voluntad de Dios. Y cuantas más personas existan que estén dentro de la Voluntad de Dios, más posibilidad habrá de que se cumpla la ley exactamente y en su momento justo. La referencia es ésta. Entonces, la pregunta siempre será un desafío a nuestra conciencia: ¿qué debemos hacer para cumplimentar la ley?..., ¿O si lo que estoy realizando es un cumplimiento de la ley, o si mi actividad o mis actividades en vez de acelerar el proceso místico de la ley, entorpecen el cumplimiento de la ley? Y, entonces, existe un karma para aquellos que comprendan, y por esto se les pide a los discípulos que no quieran aprender demasiado sino que se limiten a complementar sus pequeños conocimientos esotéricos utilizándolos en el devenir de lo más corriente de cada día, en sus relaciones sociales con la familia, con el grupo pequeño que es la profesión, con el grupo que es el grupo donde estamos integrados: grupo espiritual, grupo cultural, grupo artístico, y que continuemos expandiendo la conciencia sin querer pasar más allá de lo que permiten nuestras fuerzas. Esto es lo que tratan de hacer en nosotros los grandes Avatares: darnos una conciencia plena de donde estamos situados, y en esta conciencia de situación encontremos el impulso para seguir adelante, venciendo todos los obstáculos del karma y adentrándonos cada vez más dentro del libre ejercicio de la ley.
Interlocutor.— Estoy de acuerdo contigo, pero vemos por ejemplo que posiblemente un anteproyecto del Logos Planetario sería pues lograr un resurgimiento glorioso, etc., etc., de la raza, pongamos no mongólica pero la situada concretamente en el Japón, ¿no? En la China quizás con un poco más de retraso, con otra filosofía más orientalista, pues va siguiendo también los mismos pasos. Ahora bien, hoy he leído en el Times que decía:” En Japón el año pasado han habido dieciocho mil, no recuerdo si doscientos o cuatrocientos suicidios, y cuarenta y seis mil doscientos, no sé cuantos divorcios. Entonces, yo vuelvo un poco quizás a la pregunta de la semana pasada, en la cual una catástrofe de esta magnitud no puede estar fuera del control del Logos, o sea, para mí, mi tesis sería de que todo esto está perfectamente programado por el propio Logos, que todas estas enormes energías entrantes de Acuario y del 7º Rayo, y quizás por contraposición las salidas del 6º y de Piscis, este desequilibrio psicológico, etc., etc., que causa en las masas, digo quizás menos evolucionadas o menos preparadas, entonces, claro, si vemos que es una magnitud de esta manera para un solo país, no sé, posiblemente esto se pueda interpolar o extrapolar a decir que bueno, si en un Japón ha habido dieciocho mil suicidios, pongamos que haya habido doscientos mil en todo el mundo, entonces esto me refiero que es una catástrofe a nivel planetario para el propio Logos. Entonces, yo veo que estas pequeñas voluntades no han sabido afrontar o enfrentar esta dura lección. Entonces, claro, ¿es la personalidad la que no estaba preparada para esta dura faena, esta dura lección, o bien, verdaderamente, cuando ya hablamos de estas cifras, no sé, tan espeluznantes, no cabe pensar de que verdaderamente hay un plan durísimo por parte del Logos o de la Jerarquía para que verdaderamente se separe el trigo de la paja, se separe todo esto? Es decir, como una propia lección exigida desde los planos superiores, no desde los planos de la personalidad. Entonces, me refiero que aquí la pequeña voluntad del hombre es prácticamente anulada, el libre albedrío en todo caso no existe porque tiene que estar programada desde arriba. O sea, yo me niego de alguna manera a aceptar a que es la pequeña voluntad del hombre, de acuerdo a este nivel desde abajo, que no ha sabido ganar esta batallita ¿no? En todo caso, pues para ver, para comprender quizás un poco más el problema, veo que es desde arriba que está decretado que no podrá soportar nada más que hasta que sea un nivel siete u ocho esta lección y que acabará suicidándose. O sea, que esto ya me atrevería a decir que está ya programado por arriba.
Vicente.— Date cuenta que ayer hablamos del gregarismo, de la masificación y de la imitación. Hay una enfermedad colectiva dentro de la imitación que siempre es pernicioso para la humanidad porque va contra la ley. Si en un país hay suicidios es porque hay una forma gregaria que alimenta la sed de suicidarse de muchos ciudadanos. La voluntad de Dios no es que existan egregores, porque Dios no ha creado egregores, Dios le ha dado al hombre una mente razonadora, una capacidad volitiva, la voluntad, y le ha dado también un sentimiento para que amase a su prójimo. ¿Qué ha hecho el hombre con este equipo?... Entonces, no es que Dios haya dispuesto que dentro de su absoluto seno exista una particularidad minúscula, o más compleja, o más numerosa de personas que no puedan resistir el empuje de la ley, pero es la ley, se limita a cumplir la ley; da las normas para todos los ciudadanos del mundo. Entonces, ¿por qué no todos los ciudadanos se suicidan?, ¿por qué no todos los ciudadanos toman drogas?, ¿por qué no todos los ciudadanos odian a sus hermanos? Porque existe una parte considerable dentro del propio Logos que vive de acuerdo con la ley. Y como la ley es justa y tiene que cumplirse porque está dispuesto no solamente en los planos del sistema solar, sino en los planos del sistema cósmico, del cual nuestro Logos forma una pequeñísima parte; y que por lo tanto, la marcha del progreso no se detiene. ¿Y qué ocurre? Que al llegar a cierto punto, al llegar a una etapa que podemos llamar del juicio final, la cantidad de egos que no supieron adaptarse a la ley son eliminados, no son aniquilados, son mantenidos, digamos, en tensión creadora a la espera de otra Ronda, y a veces a la espera de otro Universo. ¿Qué ocurre, por ejemplo, -ya que has hablado de la raza amarilla- con los mongólicos, con estos seres desgraciados? Según se nos dice esotéricamente, es una proyección de una subraza de la 4ª Raza que pecó contra la ley, y quedó oscurecida durante varios millones de años hasta que ahora, dentro de la 5ª Raza -en la 5ª Subraza de la 5ª Raza- están emergiendo entre nosotros, y también en vidas pasadas, estos seres a quienes falta un cromosoma, y que les da unas características raciales y la oportunidad para ellos es estar entre nosotros, entre familias de todos los niveles sociales. Todos tienen idénticas características, tanto en el aspecto masculino como en el femenino, tanto si nacen en el Japón como si nacen en Rusia, como si nacen en los Estados Unidos o aquí en España, todos tienen unas facciones raciales bien características, es la característica de una subraza que pecó -hablando en un sentido místico- o que de una u otra manera se opuso a la ley. Sabemos que hubo el gran hundimiento de la Atlántida, sabemos que se salvaron únicamente los hijos de Noé, que no es más que el símbolo de los grandes iniciados que pudieron salvarse, porque pudieron salvarse porque era el fermento redentor para la próxima subraza. Así que en las planicies de Egipto y en Abisinia encontraremos personas que son residuos de aquellos antepasados. ¿Por qué al negro se le llamaba el descendiente de Salomón, por ejemplo? Porque la estirpe es la misma de aquellos atlantes que pudieron salvarse y que fundaron las primeras dinastías egipcias; y que por lo tanto, todo este proceso, que no es un proceso mecanizado sino que es un proceso que va surgiendo en la medida que el Logos va programando para otras edades futuras, para nuestra propia raza. ¿Y acaso no habrá entre nosotros alguna subraza dentro de esta 5ª Raza que no haya atentado contra la ley, como por ejemplo la segregación racial de la quinta hacia la tercera raza? Esto tendrá que pagarse, es un karma dentro del Logos, pero que corresponde saldar a la propia humanidad, pues aquellos blancos, aquellos arios que trajeron a las subrazas que estaban viviendo en África su propia vida, los llevaron a participar de su mal llamada civilización blanca, y que ahora tienen que afrontar el problema racial en sus propias entrañas, y todos aquellos que antaño hicieron sufrir a la raza amarilla procedente de la raza aria. Sabemos las invasiones de China, sabemos todo el proceso que fue llevado a cabo por ciertas entidades blancas, los ejércitos que penetraron saqueando un país que hubiera sido floreciente, donde el arte, la ciencia, la religión habían llegado a estados maravillosos de conciencia. Pues es un karma que tendrá que pagar la raza blanca y que tarde o temprano tendremos que ver gobernantes negros y gobernantes amarillos dentro de la raza blanca dictando sus leyes, sus principios, porque estarán de acuerdo con la ley del karma. Y esto que parece algo del futuro, puede que esté más cerca de lo que creemos. ¿Qué decíamos el otro día? ¿Qué defensa ha hecho el negro contra el blanco? Le ha traído la música rock, el jazz y todas estas cosas, ¿por qué?, porque es una contramedida, y la contramedida de los hindús, a quien fueron a civilizar los cristianos, los misioneros. Ahora estamos siendo invadidos por los gurús que nos están marcando las reglas de la evolución, pues siempre veremos la contraparte. ¿Por qué el hombre ahora come carne de los animales? Porque durante siglos y siglos los animales se comieron a los hombres y crearon un karma de reino. Solamente cuando se comprenda a través de la iniciación que el hombre debe comer puro, lo más puro posible, entonces se saldará la gran deuda, y ya el animal no tendrá que matar nuevamente al hombre, ni el hombre tendrá en justa correspondencia con la ley, de tener que comerse a los animales, o matando salvajemente a los animales, más salvajemente que los propios animales salvajes, porque están alterando la ley, en tanto que el animal sigue el principio de la ley, de la propia supervivencia. Es solamente para que veamos que el proceso que estamos llevando a cabo conjuntamente puede ser un proceso bueno o malo de acuerdo con nuestros actos, de acuerdo con nuestros sentimientos, de acuerdo con nuestra propia ley, porque todo cuanto hagamos dentro del círculo-no-se-pasa de nuestra propia conciencia unido a lo que ocurre dentro del círculo-no-se-pasa de todas las demás conciencias humanas, constituyen el círculo-no-se-pasa de la conciencia de la humanidad y, por lo tanto, el karma está ahí, que estamos encerrados dentro de unos límites estrechos como es la propia condición egoísta del hombre, que es y actúa dentro de sus propios límites, dentro de sus propias esferas, está prisionero dentro de la jaula que él mismo se ha fabricado. Pues bien, lo que tratamos de hacer nosotros es liberarnos de una u otra manera de la jaula dentro de la cual estamos prisioneros: y para mí esto es saldar el karma, porque la única manera de saldar el karma es unir voluntariamente nuestro karma o añadir nuestro pequeño karma dentro de la voluntad del karma planetario, no del karma de la humanidad ¡cuidado! Con esto hacemos una obra redentora porque actuamos de acuerdo con ley. Desde el momento en que hemos roto las fronteras que nos condicionaban, estamos entonces dentro del karma planetario, y lógicamente trabajamos para ayudar a los demás a liberarse de sus propios condicionamientos, de su propia esfera de contención que cada ser humano se ha creado, y si nosotros comprendemos esta lección podemos convertirnos en un pequeño avatar humano, ya que no en un avatar planetario o en un avatar extraplanetario solar. Si hacemos esto dentro de nuestra pequeña esfera, si permitimos que a través del círculo-no-se-pasa de la conciencia irradie nuestra luz, nuestra verdad o nuestro amor, entonces ayudaremos a que esta eterna sucesión de testigos de la luz, o esta sucesión apostólica de los hijos de Dios se vaya transmitiendo y entren zonas de luz en la mente oscurecida de los hombres, y cumplamos con la ley tal como debe ser para un discípulo.
Yo no sé si habéis enfrentado en alguna ocasión el término discípulo aplicado a vuestra vida, y preguntaros también si obráis de acuerdo con este discipulado utilizando la técnica “como si…”, y preguntaros: ¿lo haría esto un discípulo? Más adelante, cuando seáis discípulos, os preguntaréis: ¿haría esto un Iniciado? Y el iniciado se preguntará a su vez: ¿lo haría esto un Adepto? Y el Adepto pregunta: ¿lo haría esto el Logos Planetario?... Siempre “como si…”, como si fuésemos un discípulo, ¿para qué ir más adelante? Si todos somos discípulos, si Cristo es un discípulo, si el Logos Planetario también es un discípulo de Logos Solares, por ejemplo; y los Logos Solares son pequeños discípulos dentro de Grandes Constelaciones. Y, por lo tanto, es fácil estas cosas de comprenderlas, la razón es la que mejor se libra dentro del libre albedrío y ayuda a desenvolverlo, a convertirlo en voluntad, nos dice que realmente debe ser así, que deberemos enfrentar definitivamente esta ley de grupo. Y esta ley de grupo deberá partir lógicamente de nuestra propia comprensión individual, y el grado de justicia que sepamos imprimir en nuestras actitudes, y el grado de amor que podamos desarrollar en nuestros ambientes sociales, y el grado de inteligencia que podemos aplicar también en nuestra vida individual, comportándonos, tal como es de ley, como verdaderos discípulos.
Siempre hay una norma que marca el discipulado, y es el silencio vibrante que se apodera de él en ciertos momentos, cuando se da cuenta de que existe algo por encima de él, y que sin embargo no deja de ser él. ¿Os dais cuenta cuando estamos aquí y de improviso se hace un silencio expectante?... Es el reconocimiento de que en cierta manera formamos parte de un grupo subjetivo mayor que el nuestro, que estamos en contacto con potencias dévicas y que estas potencialidades dévicas nos ayudan. Si analizáis vuestra vida os daréis cuenta que los grandes acontecimientos que marcan el rumbo de vuestro karma siempre viene precedido por unos momentos estáticos de silencio, como preparándoos para la prueba. Puede ser que este silencio que no nos invita a la reflexión, que no nos invita al análisis ni al discernimiento, sino que nos invita al recogimiento puro, puede que nos lleve más allá de lo que podemos pensar, de lo que podemos llegar a imaginar, que puede llevarnos más allá del círculo-no-se-pasa de nuestra esfera, y entonces darnos cuenta definitivamente, porque esto viene progresivamente, de que realmente en nuestra vida se están realizando grandes transformaciones, unas transformaciones que quizá no sean apreciables desde el propio ángulo de vista individual, pero que los demás tienen que verlo forzosamente porque se está produciendo un milagro dentro de nosotros, y este milagro es que nos estamos convirtiendo en discípulos, lo queramos o no. Y el que nos esté preparando para ser un discípulo no vendrá aquí, o no dejará de venir, pues en tanto exista la posibilidad vosotros estaréis aquí y yo también, o viceversa, ni vosotros estaréis ni estaré yo. Eso tenéis que irlo, no meditando sino de vez en cuando un poco de atención, no en el grupo, en lo que sucede a vuestro alrededor, en lo que sucede internamente, porque estáis dando un paso tremendo en vuestra vida individual y sin daros cuenta quizá estáis pasando del libre albedrío a la voluntad espiritual, y sin daros cuenta también estáis irradiando, y con esta irradiación de la que no sois conscientes estáis empezando a hacer cambios a vuestro alrededor en las personas y en el contexto ambiental. Estad atentos, es la norma. Y la atención debe ser serena, sin impaciencia, observando solamente, observando es como se discierne mejor, pero sin utilizar el discernimiento, observando simplemente. La solución del problema no está en cómo voy a resolverlo sino enfrentarlo directamente, porque el problema ha tenido un principio y por lo tanto debe tener un final, y este final es la resolución del problema. La gente está habituada a esforzarse, a disciplinarse, porque en el fondo quiere ser algo en el mundo de los hombres, sin darse cuenta de que los últimos serán los primeros. No es que tengamos que desear ser los últimos, me refiero a que no hay necesidad de esforzarse demasiado sino observar mucho y atentamente. Me podéis decir que la observación os trae problemas, que la observación os fuerza a cierta disciplina en la acción, pero eso sucede sólo al principio, porque la observación será con el tiempo espontánea, estaréis atentos en cualquier dirección que sea necesario estar atento, principiáis estando atento a todo y os fatigáis. Con el tiempo os daréis cuenta que sólo hay que estar atento a lo importante y, sin embargo, tampoco hay que distinguir por el discernimiento qué es lo más importante porque volveréis a caer en el ruedo de la acción negativa, sino que al estar muy atentos hay unas zonas profundas de la conciencia que son plenamente intuitivas, porque creo que os habréis dado cuenta de que la serena expectación es intuición, y que a la intuición se llega por la serena expectación, y que la intuición se manifiesta al mundo de los hombres a través de la serena expectación. Es un fenómeno conexo, ser intuitivo es estar atento, expectante, y estar siempre atento y expectante es ser intuitivo. La intuición, quizá, en las primeras subrazas de la raza aria, en lo que al discipulado hace referencia, era esforzarse por discernir, esforzarse por pensar, por comparar, por memorizar, por extraer –tal como se dice esotéricamente- el jugo de los acontecimientos. Pero es que ahora los tiempos han cambiado radicalmente por motivos de Rayo, por motivos de constelaciones astrológicas, por motivos de la propia evolución de nuestra 5ª Subraza dentro de la 5ª Raza. Quizá os asombrará si os digo que en conciencia muchos de nosotros pertenecemos ya a la 6ª Subraza de la Raza Aria, porque una cosa es el cuerpo que tendrá la 6ª Subraza de nuestra Raza Aria y el tipo de conciencia que corresponderá a aquella raza y que corresponde a muchos hombres actuales, a muchos quizá de entre nosotros, como por ejemplo dentro de esta 4ª Ronda tenemos individualidades que se mueven en una 5ª y 6ª Ronda dentro de nuestra Cadena, nuestra 4ª Cadena planetaria. Pues bien, si la ley es justa y se aplica de acuerdo con la analogía, hay que trabajar para tener la conciencia de la 6ª Subraza que será una raza muy intuitiva, y es por esta razón que ha surgido el Agni Yoga, y es por esta razón que siempre estamos hablando de la expectación serena, de la observación constante de todos los hechos y acontecimientos que suceden dentro y fuera de nosotros.
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Conferencia Vicente Beltrán Anglada
Barcelona
14 de junio de 1984
Digitalizada por el Grupo de Transcripción de Conferencias
10 diciembre 2008
Editada por el Centro de Estudios VBA (en curso)
3 MARZO 2009
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