Vicente Beltrán anglada en Argentina
Buenos Aires, lunes 7 de octubre de 1985
Lugar: Hotel Presidente
Presentación
Hoy, lunes
7 de octubre de 1985, en la ciudad de Buenos Aires tenemos el alto honor de
tener entre nosotros a un verdadero servidor de la Raza de los hombres Vicente
Beltrán Anglada. Su presencia en la Argentina ha convocado a todos los
grupos estudiosos en el arte del vivir, alrededor de una propuesta: la Unidad.
Las
inquietudes espirituales del señor Vicente Beltrán Anglada se iniciaron desde
su más temprana juventud. Durante muchos años perteneció a la Escuela Arcana,
la que estaba destinada a entrenar esotéricamente a los discípulos de la Nueva
Era; participó en ella, primero como estudiante de la sección española, más
adelante como secretario del grupo en esta sección y finalmente como miembro
responsable de la Sede Europea, en Ginebra, Suiza. Colaboró siempre
desinteresadamente en algunas publicaciones españolas, entre ellas: Akenatón,
Solar, Karma 7 y durante varios años en la Revista Conocimiento -originalmente
Sophía- de Buenos Aires. Algunos de los artículos enviados a esta revista
argentina bajo el título genérico "Las luces de mi Ashram", sirvieron
de base para su primer libro “La Jerarquía, los Angeles Solares y la Humanidad”.
Ha pronunciado conferencias en diversas ciudades de España: Madrid, Barcelona,
Valencia, Victoria, Mallorca y otras; las llevadas a cabo en Barcelona, durante
períodos regulares mensuales, constituyeron la estructura del libro
“Conversaciones Esotéricas”. Su obra literaria, en permanente creación consta
de los siguientes títulos:
- “La Jerarquía, los Angeles Solares y la Humanidad”,
Edit. Kier, Bs.As. 3ª edición.
- “Los Misterios del Yoga”, Edit. Kier, Buenos Aires 2ª
edición.
- “Conversaciones Esotéricas”, Edit. Kier, Buenos Aires.
- “Un Tratado Esotérico sobre los Angeles”, tríptico:
Tomo I: “Las Fuerzas Ocultas de la Naturaleza”, Edit.
Eyras, Madrid.
Tomo II: “La Estructuración Dévica de las Formas",
Edit. Eyras, Madrid.
Tomo III: “Los Angeles en la Vida Social Humana”, Edit.
Noguera, Barcelona.
- “Introducción al Agni Yoga”, Edit. Cárcamo, Madrid.
- “Mis Experiencias Espirituales”, Edit, Cárcamo, Madrid,
El señor
Vicente Beltrán Anglada, siguiendo las grandes corrientes espirituales de la
Nueva Era, no acepta consultas de carácter personal, su labor ashrámica está
especialmente destinada a los grupos de aspirantes espirituales, al espíritu de
grupo y a la participación conciente grupal. Nunca se ha considerado un
instructor espiritual de la categoría que fuere, sino que ha afirmado siempre
su condición de discípulo, pues según su opinión, todos los verdaderos
aspirantes espirituales son discípulos de algún grado, en la dilatadísima
jerarquización de la vida. Trata de cumplir adecuadamente su parte dentro de esta
inmensa área de participación espiritual, irradiando, a través de toda su obra
de servicio, su comprensión profunda de la Verdad.
El señor
Vicente Beltrán Anglada afirma que una de las condiciones rectoras de la Nueva
Era en torno de Instructores Espirituales es la desmitificación, así nunca se
presenta como un innovador o como un filósofo de la Nueva Era, tal como le han
designado algunos, sino simplemente como una persona sencilla que trata de
ajustarse lo mejor posible a los supremos dictados de los tiempos que estamos
viviendo.
Una frase
de su libro “Mis Experiencias Espirituales”: “Los grupos esotéricos y místicos
de la Nueva Era, dentro de los cuales se van integrando muchos discípulos del
pasado, tienen como divisa el servicio por medio de la alegría y sus técnicas
de aproximación individual al grupo son: la sincera amistad, la jovialidad y el
rebosante optimismo en el orden de las relaciones. Los discípulos integrados en
grupo constituyen una verdadera familia espiritual, siendo la alegría del contacto
la que marca la pauta del servicio coordinado y la acción grupal".
Ahora con
nosotros, Vicente Beltrán Anglada...
Están
ustedes expectantes. Para mí la expectación es algo supremamente importante,
constituye el núcleo vital de la existencia en estos momentos trascendentes de
la vida humana. Solidarizándome con todos ustedes, con el profundo amor que
siento por la República Argentina -desde siempre- tengo que decirles que la
vida, tal como la hemos considerado hasta este momento, tiene radicalmente que
cambiar. Estamos llegando casi al final del siglo XX y continúan imperando las
guerras, la enfermedad y la muerte violenta. Me pregunto y les pregunto a
ustedes que son mis hermanos, si no podemos hacer algo conjuntamente para
cambiar la situación, pues a los tiempos nuevos corresponden medidas nuevas de
aproximación a la Verdad y para ennoblecer el espíritu de la raza. Por lo
tanto, si les digo a ustedes que una de las grandes incidencias del siglo XX, y
avisorando lo que será el siglo XXI, en orden a la aproximación a la Verdad y
haciendo que triunfen las energías de la constelación de Acuario, de la cual
todos sabemos algo, hay en nosotros -en particular en los países que mucho han
sufrido, como el de ustedes o el de la propia España- un espíritu latente de
revolución interna. No les hablo de revolución social, de momento, sino de
esta revolución interna, que es la gestación de las nobles virtudes de la raza,
que tiene que ver con la dignificación del espíritu. Y hoy más que nunca hay
que hablar en términos de espíritu, y darle al espíritu su verdadera
significación, no la significación religiosa tradicional, sino aquella que le
asignaron los grandes filósofos del pasado, que es el ennoblecimiento de la
cultura, de la civilización, este movimiento interno que no persigue una meta
reconocida sino que es un movimiento constante que lleva a la superación, más
allá de toda alternativa conocida. Es el movimiento de la perfección y no
podemos considerar a la perfección como una meta; desde el momento que consideramos
la meta como una perfección o la perfección como una meta, ya se ha perdido el
éxtasis creador.
Pues bien,
les voy a hablar muy ocultamente tal como es mi costumbre, sólo les ruego si
alguna cosa ustedes no la admiten de principio, debido a su propia tradición, a
su propia herencia y a su propio código genético, que no lo rechacen de
inmediato, que acepten todo cuanto vaya a decirles con un espíritu
verdaderamente crítico y espiritual, con atención suprema hasta el final, no
antepongan la barrera de su propia mente porque entonces no comprenderían lo
que yo trato de decirles.
Existe un
principio oculto en nosotros y en la naturaleza entera, que exige ser revelado
y la revelación de este principio se manifiesta como ustedes ya están
manifestándolo ahora, en forma de unidad, en forma de este principio, de este
aleteo interno que les impulsa hacia adelante venciendo las barreras de toda
imposición. Hoy día la humanidad está sujeta a grandes crisis y tensiones, y
estas crisis y tensiones están producidas precisamente porque hay una invasión
de energía cósmica sobre la Tierra, que no todos hemos sido capaces sin duda,
de asimilar, pero que constituye la levadura de este movimiento internacional
que debe producir la unificación de todas las naciones, sin pensar cada nación
en su propio bienestar y en su propio beneficio, siguiendo las normas vivas de
la fraternidad del corazón.
Hoy día se
impone un nuevo lenguaje, se impone una nueva corriente de pensamiento, y este
pensamiento noble que está tratando de utilizarnos a nosotros como vehículos de
expansión es precisamente la voz del corazón. Hay que hablar hoy día con el
corazón, y ustedes me preguntarán: ¿cómo podemos hablar con el corazón, si no
sé exactamente lo que es el Corazón? Hasta aquí el corazón ha sido conceptuado
como un simple órgano físico central de vida orgánica; si examinamos los
tratados sobre Yoga, lo consideraremos el centro cardíaco, pero si lo
consideramos desde el ángulo oculto y espiritual, lo consideramos como un
Centro Vivo de la Gran Fraternidad de Relaciones Cósmicas, que tienen en el
Corazón de la Tierra -si es que puedo expresarlo sin ser inadecuadamente
interpretado- que ha de constituir el principio de una nueva serie de
relaciones.
Hay tres
principios fundamentales hoy día, que desde el ángulo de la Gran Fraternidad
Oculta de la Tierra se imponen como un dechado de vida para todos y cada uno de
nosotros: Primero es tratar de averiguar, por el estudio y por la averiguación
conciente, ¿cuál es el principio de vida que lleva toda la evolución hacia
adelante? Eso sólo puede ser debidamente comprobado si nosotros, anteponiendo
al principio egoísta que todos llevamos dentro este principio inmanente de
fraternidad, logramos penetrar en el alma oculta de todas las cosas. Existe una
Gran Fraternidad Oculta en nuestro Planeta, que es la que dirige la evolución,
que es la que dirige todo el movimiento de expansión, proceda de donde proceda,
y este movimiento, esta procedencia mística, está ahora surgiendo en las
naciones -como les decía anteriormente- que mucho han sufrido. No se puede
comprender la vida en su aspecto más sintético y oculto si el Corazón no ha
sufrido mucho, si no ha sufrido desengaño, si no ha vencido en cierta manera la
pasión, si no ha logrado consolidar dentro del Corazón aquello que constituye
el sentimiento vivo de unidad; no me refiero a la unidad de los grupos
particularizados, me refiero a la unidad de todos los grupos participando
íntegramente de los Principios, los Propósitos, que tiene el Dios Creador del
Universo con respecto a Su Planeta, con respecto a Su Universo, con respecto al
Ambiente Cósmico.
Esta
alegría de vivir a la cual hicimos referencia, la tienen ustedes cuando están
debidamente interpretando la vida en términos de realización, no en términos de
grupo, el grupo interno que está llevando al Planeta hacia fines desconocidos
para la mente simplemente intelectual, sino que tiene unos planos, unos niveles
que exigen ser descubiertos, que exigen ser revelados y todo esto está aquí,
ahora, es un permanente océano de luz que tenemos actualmente a nuestra
disposición. Hay que seguir los signos de los tiempos, hay que interpretar
debidamente estos tiempos y hacer que los tiempos se conviertan en espacio en
nuestro corazón, es decir, que en contacto con el corazón el tiempo se vaya
disolviendo y quede solamente el espacio, siendo el espacio tal como podemos
averiguarlo internamente, la Fraternidad Oculta del Corazón, de la cual cada
uno de nosotros somos una pequeña aunque bien arreglada y mecanizada pieza. Estamos
trazando caminos nuevos entre todos nosotros, estamos tratando de averiguar
conjuntamente el Principio, no sólo de la Fraternidad Oculta de los Corazones
sino también averiguar el Principio de la Energía, porque sin esos Principios
no podemos comprender la Vida en su totalidad, estaremos pendientes siempre de
lo que nos diga la tradición, de aquello que fue en el pasado, de aquello que
viene del anacronismo de los tiempos pretéritos. Ha llegado a un punto, el ser
humano, en este presente estadio de la vida, en esta Era, de comprender la
Verdad en toda su plenitud; no solamente comprender la Verdad de una forma
mental, que a veces suele quedar mecanizada, prostituida, sino abrir el
corazón, hacer que el corazón triunfe de la mente y haga que la mente y el
corazón completamente armonizados, se constituyan en la verdadera inteligencia
del hombre de nuestros días.
Otro de los
puntos interesantes al hablar de las causas supremas de la Energía, es que
ustedes saben que la Energía constituye todavía como esencia, un secreto, un
misterio para los hombres de ciencia. No está todavía establecido realmente en
la mente de los científicos de nuestros días esta gran verdad de que existe una
sola y única Energía y que esta sola y única Energía, surge precisamente del
fondo místico de la Gran Fraternidad Oculta que guía los destinos del Planeta
Tierra, y más allá del Planeta Tierra, que guía todos los Esquemas Planetarios
de nuestro Sistema Solar, que guía también los destinos del Sistema Solar
inmerso en un Sistema Cósmico de Energía, y este Sistema Cósmico está dentro de
la Vía Láctea, la cual es un solo punto dentro de la inmensidad aterradora de
los espacios siderales. Estamos entonces en presencia de un fenómeno jamás
realizado, jamás visto en el Planeta Tierra. Hemos tenido épocas florecientes,
hemos tenido la vida de Cristo que trajo Su Mensaje, hemos tenido la época del
Renacimiento, hemos seguido después con el maquinismo, la industrialización de
la vida y hoy poseemos una inmensa maquinaria técnica. Ahora falta solamente el
complemento para avivar, para llamar la atención de la humanidad sobre el
peligro que entraña la gigantesca maquinaria de lo técnico que va absorbiendo
progresivamente la vida de los seres humanos y les impide acercarse noblemente
al Corazón. Cuando llegamos a este punto, ya estamos, casi podemos decir, en el
principio de aquello que llamamos Energía y que llamamos Fraternidad.
¿Se dan
cuenta de que ustedes cuando piensan, cuando hablan, cuando actúan, cuando
sienten profundamente algo, están realmente unificando energías en sus
corazones, y están acercándose de una u otra manera, a este mundo oculto de
donde surge toda la Energía? Inevitablemente siempre viene en el mundo aquel
aspecto mental que codifica la energía, que la dosifica, por decirlo de alguna
manera, que trata de aprovechar su recurso, que trata en cierta manera de
ennoblecer la técnica de los descubrimientos que se van sucediendo. Pero
siempre ha de tenerse presente, que cuando existe una técnica muy depurada,
automáticamente debe surgir el amor del corazón; si no la técnica se hace
absolutamente condicionante y hace que nuestra mente y nuestro corazón se
sientan arrastrados a aquello que promueve la técnica, el confort individual
por ejemplo, todo el sentido de valores que le damos a las cosas, para quedar
finalmente tan absorbidos dentro de las cosas, que progresivamente hemos ido
legando y perdiendo la facultad creadora de pensar.
¿Podemos
decir con justicia -a veces- qué estamos pensando? Esta es una razón que quiero
que consideremos juntos muy profundamente. El pensar es un arte, es una
ciencia y al propio tiempo es una liberación, pero, ¿cómo nos atreveremos a
situar el pensamiento en aquellas dimensiones que por su propia extracción van
más allá y por encima de aquello que llamamos recursos humanos? Es decir que
para empezar a encontrar la Fuente de la Energía, lo cual significa que
progresivamente tendremos que ir acercándonos al centro de la Gran Fraternidad
Oculta del Corazón; existe siempre un resorte vivo que es la atención del
Pensador, que es el darse cuenta constantemente, que es la observación serena
de los hechos. ¿Podemos decir con justicia entonces que observamos
concretamente los hechos y que sentimos profundamente en nuestro corazón
aquello que consigo traen los hechos? Porque pensar hermanos míos, es algo
supremamente importante, es situar la mente más allá de sí misma, eso es
pensar, porque lo que hacemos habitualmente es sentirnos pensados. ¿Qué nos
piensa? El ambiente, la circunstancia, los acontecimientos, la tradición, los
problemas cotidianos, el propio código genético, el triple código genético,
porque no solamente estamos condicionados por el código genético físico, sino
que hay un código genético de tipo emocional y un código genético de tipo
mental, y aquí tendremos que extremar nuestra atención como pensadores
absolutos, como personas interesadas en descubrir el magnífico campo de le
Energía, que está aquí y ahora y que debemos tratar de aprovechar.
Los niveles
ocultos son paralelos a los niveles objetivos y hay que tratar de que no exista
una división entre el propósito oculto y la forma expresiva, que tiene que
condicionar en forma objetiva este propósito oculto. Esto implica en nosotros
un gran esfuerzo porque tenemos, como decía anteriormente, que pensar en
proporciones cósmicas si queremos comprender el noble propósito de la vida; no
podemos pensar con retazos o con remiendos o pensando a través del ramillete
vivo de los recuerdos del pasado, habida cuenta de que todo cuanto sucede es
nuevo, y todas las cosas nuevas que contienen la clave de la vida, están
observadas por nosotros con los códigos del pasado, y así siempre existe una
desunión, una desvirtuación, un desequilibrio entre la Voluntad del Pensador
que quiere conquistar la Verdad y la Verdad que constantemente se le está
escapando, ¿se dan cuenta? Y esto es una cosa que hay que hacer aquí y ahora, y
ustedes están capacitados para pensar, para sentir en profundidad, para hurgar
creadoramente en los recovecos de lo eterno, sentirse implicados en la gran
tarea que, más allá de los sentidos y aún del propio entendimiento, están
llevando adelante Aquellos que llegaron antes que nosotros, Aquellos Seres
inmortales que pertenecen al 5to. Reino de la Naturaleza.
Aquí es
donde hay que empezar la búsqueda, nosotros estamos relacionados más
íntimamente con el Reino Mineral, el Reino Vegetal y el Reino Animal, y todavía
el Reino Humano tiene zonas muy oscuras, pero para las personas verdaderamente
interesadas hay que decir que existe el Quinto Reino, el Reino de los Cielos,
el Reino de Dios o como ustedes quieran llamarlo, existe el Reino de Aquellos
que se liberaron de la condición humana y -naturalmente- tiene que tener un
principio establecido completamente en orden a la sociedad actual, este código de
valores absolutos que debe triunfar de todos los códigos establecidos, creando
entonces, una verdadera revolución de principio que constituye el alma de la
sociedad moderna. No podemos andar por la vida corriendo la suerte de las razas del pasado, de aquellas que se
equivocaron, de aquellas que nos legaron la tradición, de aquellas que se
equivocaron tan profundamente que sólo nos dejaron códigos de justicia pero no
códigos de amor.
Hay que empezar de nuevo con la vista hacia adelante, no
mirar jamás hacia atrás, porque haríamos lo mismo que la mujer de Lot de la
Biblia, que quedó petrificada al dirigir la vista al pasado, ése es un símbolo
de la Biblia completamente esotérico y oculto, y que puede ser utilizado para
comprender el eterno mecanismo de la vida en nuestro corazón, el mecanismo del
propio pensamiento, el mecanismo del deseo, el mecanismo que pone en juego y en
vitalidad todos los sistemas del organismo: el sanguíneo, el nervioso, el
chákrico, el nádico, todo esto está en nosotros y debe ser completamente
comprendido para ver qué realidad nos espera aquí y ahora. Que podamos
realizar, sentir la integración de la que nos hablan todos los Grandes Seres
del pasado, los Filósofos, los Santos que nos han precedido, los Grandes
Iniciados de las Logias, de las distintas Logias de Aquellos que buscaron la
Luz y la Fraternidad, y alcanzaron estas cosas y después las vertieron en forma
de conocimiento, en forma de ideas y en forma de ideales.
Todo esto sí que constituye algo que debemos aprovechar y
hay que surgir triunfantes de esta era de grandes tensiones haciendo que las
tensiones que están a nuestro alcance, que se están librando en nuestra vida
sean un vehículo de liberación, no un vehículo de encadenamiento de las cosas
del pasado, aquellas cosas que pasaron, aquellas cosas que dejaron de ser,
aquellas cosas que constituyen únicamente recuerdos. Hay que vivir más allá de
los recuerdos; feliz será el ser humano que cuando vaya a acostarse por la
noche no tenga recuerdo de nada de lo que ha hecho durante el día, porque nada
tendrá que reconvenirse, ni criticarse, y bendito será el ser humano que al
levantarse por la mañana se levante alegre y jovial, con la alegría de la
naturaleza como lo hace un pájaro o cualquier animalito que nos enseña la vida.
Pero nosotros no queremos aprender la vida porque estamos dentro de los códigos
tradicionales. Y hay que ver si es posible establecer las bases de algo tan
mágico y sorprendente que todo cuanto hasta aquí hemos considerado como magia,
sea algo que también pueda ser relegado al olvido. En los tiempos nuevos
existen ideas nuevas, energías nuevas y también una forma distinta de magia, la
magia del Verbo, la magia de la Palabra, no la magia de las costumbres, la
magia que tiene que producir un siglo de oro en este siglo de caos. Y esto
tenemos que hacerlo nosotros.
Siempre rogamos a Dios que nos ayude, pero nosotros no
hacemos nada para ayudar a la humanidad, estamos siguiendo el compás del
tiempo, este tambor incesante que penetra por los oídos y llega a los corazones,
enturbiando todo cuanto de bueno tenemos en los corazones. Estamos siguiendo
una línea definidamente arcaica y hay que sufrir por ello, hay que sentir la
tensión producida por aquello que fue equivocado en el pasado, para sentir
realmente el triunfo de las cosas buenas, de la Idea Creadora.
La Idea Creadora, la Magia Organizada, el sentir de la
energía cualificada, y después, este poder infinito de la Magia Oculta o
Fraternidad Oculta en el Corazón, es todo cuanto quisiera conversar con
ustedes; entonces quisiera que fuesen ustedes ahora, que preguntasen para
extendernos sobre todo cuanto someramente acabo de decir.
Pregunta: Le solicitaría a
nuestro amado hermano que nos diga, qué ejercicio podría ser dado para todos
nosotros, para unificarlo en un trabajo de conjunto, y que pueda ayudarnos a
mejorar las energías y hacer la propuesta de despertarlas hacia lo que usted
nos estaba diciendo hacia la nueva etapa, las nuevas fuentes que tenemos que
tratar de explorar.
Respuesta: Usted me hace una
pregunta que me han hecho infinitas veces ya, porque todo el mundo quiere un
ejercicio y siguiendo este ejercicio llegar a una finalidad. Pero, se dan
cuenta de que cuando una persona ofrece un ejercicio está creando un
"Karma", de ejercicio precisamente. Como digo, estamos viviendo una
era totalmente nueva y estamos adaptándonos a esta Nueva Era de una forma
similar a como hicimos en el pasado, lo cual quiere significar que no podemos
comprender exactamente qué trae esta Era para nosotros. Si le ofrezco a usted o
a ustedes una disciplina, ustedes se atan a mí por la disciplina y yo si se las
doy me ato a ustedes por la disciplina. Me pregunto y les pregunto a todos
ustedes, ¿podemos vivir sin disciplinas o hacer que la disciplina sea la propia
vida? Es decir, si ustedes están muy atentos como ahora, ustedes están
naturalmente disciplinados sin que su voluntad intervenga, pero si doy una
disciplina, ustedes adaptarán la voluntad, la plegarán a la realización de esta
disciplina y esta disciplina quizás no pueda ser adecuada para usted, porque
toda persona es singular, no es un rebaño, no constituye un grupo meramente
inoperante o amorfo sino que los grupos deben estar constituidos por
singularidades individuales, es decir con personas altamente dispuestas a la
acción, más allá de la disciplina. Cuando se está muy atento tiene usted una
disciplina, y está atento sencillamente, está comprendiendo el alto significado
de lo que se presenta a su opción o a su elección. Porque cuando la vida nos
presenta algo, este algo es una totalidad, no un fragmento de una totalidad, es
simplemente la totalidad y si nosotros nos embarcamos en una disciplina, esta
disciplina solamente podrá captar una pequeña parcela de esta absoluta
realidad, y es por esto que jamás asigno disciplinas. Pero les digo a las
personas: estén atentos siempre, porque la atención no es una mera disciplina,
sino que es un deber social y este deber social es el que hay que emprender
como disciplina, si es que podemos asignarle este nombre a nuestro deber
social. El deber social es ser humanos y comprensivos con los demás, y muy
profundos en el pensar y esto jamás lo dará una disciplina. ¿Qué sucede con la
meditación por ejemplo? y hay un sinnúmero de meditaciones. Si embargo, toda
meditación exige en el principio atención y que esta atención sea de tipo muy
impersonal, no podemos meditar aparte de todo cuanto nos rodea, Cuando una
persona se sujeta a una disciplina meditativa o de Yoga o de cualquier tipo de
expresión, buscando un descubrimiento de algo, o un entrenamiento espiritual,
solemos acoger una disciplina, y los maestros que dan disciplinas, los
"gurús", los que enseñan Yoga suelen impartir siempre algo, en forma
generalizada, sin tener en cuenta la singularidad, a la cual yo hago
referencia, porque sólo en la singularidad individual, se halla el profundo
asiento de la verdad. Entonces, lo que hacemos siempre es situar la mente
como una barrera con el corazón, y a esto llamamos disciplina. Disciplina,
hermanos míos, es esfuerzo y no se puede llegar a la Verdad con esfuerzo,
porque la Verdad carece de esfuerzo y carece de disciplina. Es como la pureza,
cuando se persigue la pureza a través de la disciplina, se pierde la pureza
instantáneamente, y donde existe pureza no hay disciplina, y donde existe
disciplina no puede haber pureza. Entonces por esto es que no puedo, noblemente
y honradamente, asignar una disciplina determinada para ser mejores, para
crecer espiritualmente, porque es falso. No se puede crecer en la Verdad, la
Verdad está aquí, es todo cuanto nos rodea, es toda nuestra vida y la
meditación tal como solemos hacerla, es esta fracción de nosotros mismos que
dedicamos a la disciplina, ¿y cómo podrá un fragmento de nosotros mismos
comprender la absoluta grandeza del Yo, el Absoluto en nosotros?
Pues bien, la única disciplina - y es la disciplina que
conduce a la liberación humana -, es la atención, es la observación constante
de los hechos, que suceden dentro y fuera de todos nosotros; nada tiene que ver
con el ritmo de lo tradicional. Estoy tratando a ustedes como discípulos, no
como párvulos que van buscando disciplinas y el Maestro asigna disciplinas a
sus párvulos, sino que les considero -como digo- discípulos, personas
creadoras, llenas de fe en el ideal - y ustedes lo están demostrando - , ¿qué
puedo deciros de esto? Porque están por encima, están empezando a trabajar más
allá de las parcelas buscando lo Absoluto, la grandeza inmensa del Ser.
Cuando están atentos se produce un fenómeno en vosotros y es
el fenómeno que están tratando de buscar a través de las disciplinas variadas,
todos los Yogas y todas las fuerzas mentales que entran en juego en
determinados ejercicios, porque cuando decimos “voy a meditar”, ¿qué hacemos
realmente? Estamos separando de la totalidad de nuestro día, unos minutos, una hora
o lo que sea, para dedicarlo a la meditación y, ¿qué hacemos después? ¿Estamos
meditando después? Entonces, la meditación no es un recogerse aparte de todo lo
demás, y hay que ser muy inteligente para meditar y no quedar preso en la
propia meditación. Es decir, que si vivimos atentamente, siempre, en todos los
momentos, llegará un momento en que nos daremos cuenta de que "este
yo" que tratamos de destruir porque su base es falsa, se ha convertido en
el verdadero Yo Superior, es decir, sin darnos cuenta hemos ido pasando de la
inmanencia de nuestra humilde condición humana, a la trascendencia del propio
Dios. No hemos creado esquemas, no hemos creado metas, no hemos creado
ejercicios, no hemos creado nada que pueda separarnos de la Verdad, pues el
Hombre es la Verdad, el Hombre es el Camino, el Hombre es la Vida, la Verdad,
el Camino que conduce a la Vida, y esto somos nosotros, ¿y cómo vamos a crear
una disciplina sobre aquello que somos nosotros, sin crear al propio tiempo
dentro de nosotros mismos, una frontera que nos separa de la propia Verdad?
Querer a Dios por ejemplo, desear a Dios, es una dualidad;
sólo cuando dejamos de desear a Dios lo tenemos ya, sólo cuando dejamos de
utilizar la barrera, la limitación de una técnica, nos estamos acercando a aquello
que carece de técnica, aquello que es supremamente vívido y eterno, y a esto me
remito. Si ustedes aquí están atentos, expectantes, cálidamente vibrantes,
sintiendo en su corazón esta serenidad que solamente puede producir aquello que
está más allá de la técnica, ustedes progresivamente se irán liberando. Y
entonces se darán cuenta de que en los momentos actuales las técnicas tienen
que reducirse al máximo, para que impere el deber social, y el deber social es
la atención: la atención al hermano, la atención a los grupos, la atención al
propio espíritu de uno mismo. Esta es mi opinión que les ofrezco honradamente.
Pregunta: Señor, yo con todo
respeto le quiero hacer la siguiente pregunta: Si hemos llegado a una altura en
la que podemos comprender, gracias a Dios, e interpretar sus palabras, no es
debido a que hemos asimilado verdades que nos han llegado a nosotros por
grandes maestros del pasado, cuyo pasado no podemos dar la espalda; debemos a
Moisés descubrir la fuerza energética en sus palabras cuando dijo que:
"Dios, hágase la Luz y la Luz fue hecha”, ahí ya Moisés nos deja la verdad
de la fuerza de la palabra, cargada de deseo de realización y de voluntad;
después más tarde San Juan, el apóstol, inicia su evangelio con la expresión
cargada de fuerza y de voluntad: “Yo Soy el Verbo”.
Vicente: ¿Cuál es su
pregunta?
Pregunta: Esto que nosotros
comprendemos hoy, lo debemos y lo tenemos que agradecer a esos Maestros del
pasado, que ya nos dieron los jalones para que nosotros podamos seguir e
iniciar el camino, ¿y gracias a todos esos conocimientos llegar a poder ser
libres...?
Respuesta: Comprendida la
pregunta. No se extiendan en las preguntas porque entonces ustedes comienzan a
divagar, perdóneme. Una pregunta para ser respondida adecuadamente debe ser
concreta, ¿verdad? Entonces voy a decirles algo muy importante. Usted ha
hablado que todos los grandes Maestros del pasado nos han legado sus verdades;
yo soy el primero en reconocer humildemente que Ellos nos legaron Una Gran
Verdad, y que nosotros hemos fraccionado esta Gran Verdad, en múltiples
pequeñas verdades. No hemos comprendido señora, a los Instructores del pasado
porque todos dijeron una Única Verdad, la Verdad esencial de Dios, ¿y por qué
entonces se han creado tantas religiones y tanta lucha entre las religiones, y
entre los grupos de todas clases que buscan a Dios? ¿Por qué esta lucha? Porque
no han comprendido a los Instructores del pasado, y como que no han comprendido
a los Instructores del pasado, constantemente tenemos que estar meditando en
aquellas pequeñas verdades cuando tenemos la Vida ante nosotros, que es la Gran
Verdad de la Existencia. No existe una matización de la Verdad, señores, no
existe, es imposible, existe Una Verdad que matiza todas las pequeñas verdades.
Pero por favor, no hagamos de una pequeña verdad una estructura que luche
contra otra estructura, que es lo que está
sucediendo actualmente, no sólo en el aspecto religioso, sino en el
aspecto político de las naciones; por doquier vemos que no ha habido
comprensión de las Altas Verdades. ¿De qué nos sirve hablar del Amor de Cristo?
Si Cristo es una ilusión mental para nosotros. No es algo creado y que surge
raudo en el corazón. A esto me refiero yo, hermana mía, no creo, ni creo que
ninguna persona inteligente crea que la Verdad pueda hallarse simplemente
siguiendo un camino muy ideal, luchando contra otros caminos que puedan ser
ideales también, sino en la unificación de todas las pequeñas verdades,
rompiendo las estructuras religiosas, económicas, políticas o sociales que
encubren estas verdades. No podemos hablar de Paz, de Amor y de Justicia
surgiendo de las pequeñas verdades. Por lo tanto les hablo de una sola cosa, de
La Verdad que todos somos y que todos podemos desarrollar al máximo, sin
pasar por la técnica y sin pasar por las pequeñas verdades. Creo que este
es un punto que merece una gran atención.
Pregunta: ¿Está el hombre
capacitado para amar?
Respuesta: El hombre está
capacitado para amar, para servir y para convertirse en un Dios sobre la
Tierra, pues tal como dice la tradición religiosa, somos hechos o Su imagen y
semejanza. ¿Por qué desdecimos de Su imagen y semejanza? Esta es la
respuesta. Si la persona se da cuenta de por qué no refleja esa semejanza
íntima que nos unifica al Creador, naturalmente entonces que si no nos
unificamos con esto no podemos tener la capacidad de amar aunque esté inmanente
en nosotros. Digo que si la persona quiere verdaderamente amar, tendrá que tener una atención preferente sobre sus
hermanos. Si queremos amar tendremos que comprender y no podremos comprender si
no tenemos esta atención hacia aquéllos que nos rodean. Para amar tendremos que
salir de los caos de los pequeños grupos y unificarnos en grandes grupos. No
digo que tendremos que desdecir de los ideales de los pequeños grupos, sino que
existe siempre un ideal mayor que unifica a todos los grupos. Si hay amor no
hay problemas de unificación de grupos, pero si hay solamente una mente
enfocada en la estructura positiva de su pequeño grupo, habrá entonces
desunión. Y voy a decirles a ustedes algo muy oculto, muy profundo y muy
mágico: y es que una parte considerable de lo que ustedes han conquistado aquí
en la República Argentina, en el aspecto político y democrático buscando la
libertad de todo argentino, y de toda persona que viene aquí a acogerse a sus
sagradas leyes, es porque ustedes han trabajado internamente, es porque ustedes
han amado internamente y es porque ustedes se están reuniendo, conjuntamente,
creando un vórtice de energía que está más allá de las reacciones posibles que
van atentando siempre contra las leyes invictas de los pueblos.
Pregunta: Me puede, por
favor, ampliar el verdadero concepto de pensar, no como una técnica, porque
quizás no haya una técnica, sino el verdadero concepto que no lo he captado muy
bien.
Respuesta: ¿Lo que es la
técnica del pensar o algo así? Mire usted, en el individuo considerado en su
aspecto total hay muchas facetas, cuando estoy hablando del triple código
genético me refiero a causas existentes antes de que el hombre nazca y que le
condicionan cuando renace, si es que ustedes aceptan la idea de reencarnación
como algo natural y lógico. Entonces, el hombre posee tres cuerpos, tres
vehículos: con uno de los vehículos -que constituye la proyección de uno de los
códigos genéticos- aprende la técnica del pensar y se organiza el cuerpo
mental, igual que se organiza el cuerpo físico, como un organismo entero. Viene
después el segundo de los códigos genéticos que constituye el asiento de
aquello que llamamos el cuerpo emocional, del cual surgen todas nuestras
emociones, nuestros deseos y nuestros sentimientos más o menos elevados. Y
tenemos después el código genético más conocido que es el código genético
físico que trae los valores de la herencia, de aquello que fueron nuestros
padres y lo que fueron nuestros antepasados, Pero cuando nos ciframos al
pensamiento, en tanto se va estilizando y reorganizando el cuerpo mental,
entonces el pensamiento es aquello que el Pensador observa y que retiene como
memoria. Es decir, un pensamiento que absorbe el Pensador se convierte en algo
que queda dentro en forma de recuerdo y a medida que sucede el tiempo, a medida
que se van acomodando los estratos de pensamiento se nos forman tres capas
dentro del código genético mental: que es la subconciencia o el subconciente,
la conciencia o conciente y la supraconciencia o supraconciente, todo esto sin
movernos de las áreas de la mente. Pues bien, la organización del pensamiento,
tal como es representado en esta pequeña disertación, es ver la manera de cómo
podemos trabajar, sin estar atados al ruedo de los pensamientos que constituyen
el ramillete de recuerdos, que constituyen la estructura de nuestra conciencia,
que constituyen nuestro yo. Pero estoy hablando de un sistema natural, sin
técnica, que hace que por propia lucidez, y utilizo esta palabra con mucha
intención, si hay una gran lucidez lo cual significa que hay una gran atención,
entonces los pensamientos de recuerdos mentales pasan fúlgidamente por la
conciencia y se transforman en supraconciencia, y tenemos entonces los valores
del pasado arcaico y tradicional. Después los valores de aquello que percibimos
en el presente, y como que en el presente todo cuanto observamos lo estamos
vivificando a través de los recuerdos, o de los pensamientos del pasado, resulta
que no somos libres ni creadores, y cuando estamos inmersos en este
desbarajuste, en esta terrible tensión, pedimos técnicas, disciplinas, para
surgir triunfantes de estas cosas, lo cual significa que nos atamos todavía más
al ruedo de los pensamientos y de los recuerdos adquiridos. Para mí la
liberación, el contacto con la Verdad, es convertir la subconciencia en
supraconciencia pasando por el eterno ahora de la conciencia; ésta es la
realidad. Por lo tanto, siempre tengo este aspecto dentro de mi, que me mueve a
tratar de decir a las gentes, que la técnica, a menos que la persona sea muy,
muy inteligente, es algo que ata, porque tiende a cristalizar las actitudes del
yo, el yo es el conjunto de los pensamientos incomprendidos, de aquello que no
hemos logrado consumar, de aquello que no hemos logrado liberar y constituyen
recuerdos.
Por esto les decía anteriormente que no pensamos, somos
pensados, porque cuando yo digo pienso, es el Pensador, y no es el ambiente que
piensa a través de mi mente, a través de los recuerdos, porque los recuerdos
están ahí, los hemos creado nosotros; a través del tiempo. Y llegado un
momento, cuando existe una Era supremamente importante como la presente, en que
se presenta la oportunidad de dejar libre el pensamiento, que se libere el
recuerdo - y esto solamente puede ser verificado cuando el Pensador está tan atento al objeto de su veneración,
de su atención, de su búsqueda, - que el espacio que existe entre el Pensador y
aquello que está pensando desaparece. Es decir, que si ustedes me contemplan
muy atentamente a mí, el espacio que nos separa se acorta, porque existe más
espacio que tiempo, y el tiempo es el que genera pensamientos, sea del tipo que
sea. Hemos creado una tensión mental, lo cual no es la verdadera actividad del
pensamiento creador que se nutre de las cosas superiores de la existencia.
Quizás tendremos que hablar de niveles abstractos de la mente, a los cuales
difícilmente accedemos, pero progresivamente, a medida que la atención gane a
la distracción la batalla del tiempo, entonces el pensamiento se difuminará,
desaparecerá y tendremos, como consecuencia, una nueva apertura mental que
desconocemos, pero que será el instrumento mediante el cual podamos conquistar
la Verdad.
Pregunta: ¿Qué influencia
tiene el Quinto Reino en nosotros, ahora?
Respuesta: Pues bien, les
estoy hablando de la supraconciencia, les estoy hablando de la subconciencia y
les estoy hablando de la conciencia. A ver si comprenden el símil del Reino de
los Cielos a través de estos conceptos. La subconciencia pertenece al mundo
animal, la conciencia pertenece al mundo humano y la supraconciencia pertenece
al Reino de Dios, pero como que el Reino de Dios está en nosotros, es
actualizando las energías del Quinto Reino en nosotros a través de la búsqueda
constante de la supraconciencia que podemos conquistar la verdad.
Pregunta: Hermano, en una
parte de su disertación usted habló que los nuevos tiempos necesitan un nuevo
tipo de magia, me hubiera gustado que ampliara ese concepto.
Respuesta: Perfectamente ¿Qué
entendemos por magia? Cuando hablamos de magia, consideramos la magia como algo
más allá del conocimiento profano y algo que han conquistado los sabios y las
personas doctas, los alquimistas de la Edad Media por ejemplo, que
transformaban el plomo en oro, o bien aquellas personas que viven de la
superstición. Hemos hecho de la magia, que es algo natural, algo tan distinto
de la naturalidad de los principios, que prácticamente se ha perdido la esencia
de la magia. Pues bien, la Magia es el Arte de la Creación. Dios cuando crea el
Universo, cuando dice “Hágase la luz” está creando la Magia. ¿Y qué responde
la Naturaleza? “Hágase Señor Tu Voluntad”.... Tres palabras de pedido.
Cuatro palabras de respuesta que constituyen la séptima parte de una sinfonía
cósmica. El hombre es septenario, ¿verdad? Todos ustedes lo saben. Pues bien,
ese septenario surge, primero de la Creación de Dios y después de la Naturaleza
que está sumisa a la Voluntad de Dios. ¡Hágase la Luz!... y todo el espacio
responde: ¡Hágase Señor Tu Voluntad!... y así empiezan a crearse los Mundos.
Pues bien, todo cuanto existe en la Naturaleza es una
Creación, ¿acaso no es un misterio, una obra mágica, el crecimiento de una
planta o la formulación de un pensamiento o el hecho de que mi palabra llegue a
ustedes a través del oído? ¿Qué misterio existe en el espacio que hace que mis
palabras lleguen a ustedes? ¡Magia! La misma Magia del Creador, porque la magia
es el arte de medir, con nuestra pequeña medida, lo que hace Dios en los cielos
infinitos, es tratar de actualizar correctamente aquello que somos. ¿Cómo creen
ustedes que se ha creado un ambiente social, ya sea el ambiente social de una
familia, de una profesión, de cierto ambiente o grupo socialmente descripto, o
el ambiente social de la propia nación, o más grande, el de un continente?
Porque los seres humanos que viven en la familia, que viven en la profesión,
que viven en los grupos, que viven en la nación y que viven en los continentes,
están pensando, están sintiendo, están actuando, están hablando... eso es
magia. Un ambiente social lo creamos nosotros con la Magia de la Palabra o la
Magia del Verbo. ¿Por qué se nos dice “en el día del juicio te serán tenidas en
cuenta, incluso, tus más livianas palabras”? Porque la Palabra es mágica, el
Pensamiento es mágico. ¿Qué es una enfermedad en esencia? Es una magia que
hemos creado a través del tiempo, tan grande que ahora esta maquinaria, este
elemental psíquico que hemos creado con la magia del pensamiento, la palabra y
el deseo, nos está avasallando. Hay que salir de este punto de una manera
vibrante, comprensiva, de que todos nosotros estamos creando magia
constantemente, que el mago no es alguien a quien tenemos que mirar como
mirando por encima de las estrellas. En un ser humano como nosotros que
utiliza, conscientemente el pensamiento, como hacen los grandes pensadores o
los grandes místicos que utilizan el corazón, o el deseo, o el sentimiento
creador, o aquellas personas que como yo -humildemente- hablan a grandes
auditorios. Podríamos suponer a Dios, con todas Sus Creaciones, Sus Planetas,
Sus Sistemas de Evolución dentro de estos Esquemas Planetarios, los Asteroides,
todo cuanto existe en un Universo, en el centro a Dios hablando a todos. Esto
es la Magia de la Creación, Dios habla, los cielos responden y surgen las
formas. Entonces, la Magia es aquella rara cualidad que poseemos todos, que
convierte el pensamiento en cosas, y esta cosa puede ser el ambiente social.
¿Qué les decía anteriormente...? ustedes con la magia de la intención, con
la magia del sufrimiento han creado un Estado nuevo, aquí en la Argentina.
Y les digo, les aconsejo que continúen con esta tensión creadora, porque
mantendrán de esta manera la democracia en este gran país, porque ustedes han
creado esta magia, que ha derrumbado lo que tenía que ser destruido y ahora hay
que crear por encima de todas esas cosas, una cosa nueva más importante, que es
el Amor que está más allá de la Democracia.
La Democracia, ustedes saben, es sólo una palabra, no es un
hecho; una palabra que tratamos de asimilar de una manera concreta y positiva,
hay que esforzarse, ¿verdad? Pero de esta manera, sin disciplinas, viendo la
cosa clara y entonces muy atentos a lo que sucede constantemente en ustedes y a
su alrededor, y tendrán entonces a su alrededor y con ustedes siempre, a los
ángeles guardianes por decirlo de alguna manera, los grandes
"avatares" de la energía, que han producido este tremendo despertar
espiritual... Podemos extendernos todavía sobre la magia porque es muy
interesante, porque podemos hablar cómo y de qué manera se utiliza la magia,
por los Grandes Pensadores, por los Grandes Iniciados, y cómo podemos nosotros
emular en cierta manera a los Grandes Iniciados ¿Acaso el hombre no es en
esencia un Dios? Lo somos. Hay que pasar de la esencia a la potencia y entonces
veremos lo que sucede.
Pregunta: ¿Qué opina la
Jerarquía de la homosexualidad y cuál es su incidencia en el camino espiritual?
Respuesta: Bueno, esta es una
pregunta muy delicada y quisiera que ustedes interpretaran mi respuesta de una
manera muy honrada, sincera y comprensiva. Como ustedes saben, Dios que es un
solo ser, para poder manifestarse en la vida de la Naturaleza, ha tenido que
dividirse en dos y ha creado el hombre y la mujer. La mujer porque debe contener
la semilla del Espíritu Santo, el hombre porque lleva la semilla del Padre, y
el Hijo que vendrá porque debe perpetuar la especie. El Hijo, yo hablo siempre
en términos de Hijo, es el Amor; el Padre siempre es la Voluntad, y la Madre la
Inteligencia, la Madre, la Virgen. Siempre veremos estos tres capitales
pronunciando la voz, el AUM de la Creación, es el puntal de la Creación. Pues
bien, si Dios ha creado el hombre y la mujer, forzosamente ha tenido que haber
en algún momento cumbre de la Vida de la Naturaleza, una cierta
desvirtualización de este sentido inmanente de polaridad. La luz que ustedes
observan, a la que ni siquiera damos importancia porque la tenemos siempre acá
es el resultado de una gran polaridad, una polaridad masculina y una polaridad
femenina, o positivo y negativo, el hijo es la luz.
Bien, cuando existen movimientos aparte de esta polaridad
natural, hay que pensar en causas que estén más allá de lo que llamamos cuerpo
físico, tendrá que estar en regiones desconocidas de la conciencia, en las
cuales no podemos penetrar sin el riesgo de equivocar el camino o en el hábito
de emitir juicios; y ningún hijo de Dios debe emitir juicios; debe aceptar las
cosas tal como son. Existe una dualidad en el hombre, ayer hablábamos por
ejemplo del andrógino, el hombre y la mujer; naturalmente poseen
indistintamente el aspecto masculino y el aspecto femenino. Cuando en un ser
humano predomina el elemento masculino tenemos un hombre y cuando predomina el
aspecto femenino tenemos una mujer. Entonces, la homosexualidad puede ser algo
que escapa al razonamiento, algo psicológico que no corresponde al cuerpo
físico; yo nunca, por sistema, anatematizo algo tan sagrado como es la vida
interna del ser, su propia singularidad, la manera cómo enfrenta la lucha de la
vida, este sistema concatenado de verdades que constituye un ser humano. La
homosexualidad puede ser algo, un camino aproximado a lo que llamamos
andrógino, porque cómo se explica si no, la tendencia de la humanidad en los
últimos tiempos a la homosexualidad, los movimientos gay, que se han convertido
en fuerza política, al menos en nuestro país, y que constituyen desde el punto
de vista de las personas encuadradas en este grupo, una serie infinita de
dolores y tensiones psicológicas. Hay que ser entonces muy analíticos y
comprensivos, hay que utilizar lo que a ustedes les decía, una atención suprema
para comprender el alcance de esto que llamamos homosexualidad, para
mantenernos al margen y ver la situación como algo que puede venir como
consecuencia de ciertos movimientos astrológicos.
Ustedes me dirán: ¿Es que acaso no ha habido siempre
homosexuales? Yo les digo a ustedes que ha existido siempre y es la
reminiscencia del andrógino. Sucede sin embargo, que en ciertos seres esto
constituye una tensión, un sufrimiento como decía anteriormente, y hay que
evitar este sufrimiento porque desconocemos las causas. Annie Besant, una gran
escritora teosófica, decía en uno de sus libros: "Cuando un ser humano en
virtud de su "karma", ha pasado por muchas vidas en cuerpo de mujer,
en la próxima vida cuando tiene cuerpo de hombre, todas aquellas virtudes
esenciales femeninas de la mujer, quedan todavía impresas en el átomo
permanente físico constituyendo códigos genéticos, y entonces nace lo que
llamamos un homosexual, o al revés una lesbiana. Es decir que, cuando un ser
humano ha pasado muchas vidas -dijo Annie Besant- en cuerpo masculino, cuando
toma un cuerpo femenino, tiene todavía las tendencias en el átomo permanente de
aquello que fue en vidas pasadas, y constituye para aquella persona que lo
sufre un motivo de sufrimiento por incomprensión social. Les pido comprensión a
todos por este problema, porque escapa a las leyes previstas dentro de nuestra
sociedad moderna.
Pregunta: ¿Cuál es la
incidencia en el camino espiritual?
Respuesta: ¿La incidencia...?
Bueno, usted sabe que el espíritu está por encima de estas cosas. El espíritu,
por favor hermanos, está por encima de la forma, siempre triunfa de la forma,
por lo tanto desde el ángulo de vista de la Gran Fraternidad esto no tiene
importancia. Es el ambiente social, la falta de documentación esotérica y la
ausencia casi total de principios morales y éticos humanos, hace que surjan
estas cosas. Pero yo, en todas mis charlas, conferencias, libros y escritos hablo
de una sola cosa que une a los corazones, y es el Espíritu, lo demás no tiene
importancia. Es el "karma" de cada persona porque el espíritu no
tiene "karma", pero sí el cuerpo físico, entonces el
"karma" a que me refería, el sufrimiento de todas estas cosas, las
tensiones, la falta de comprensión social, esto constituye el
"karma", es el "karma de las formas", y el
"karma" que tiene que ver con la forma mental, con la forma emocional
y con la forma física. Pero el Espíritu triunfa de todo, está por encima de todas
las cosas, el Pensador está por encima del pensamiento y de todo, de la emoción
y del cuerpo. Hay que trabajar este aspecto tan desconocido del Espíritu, por
eso les atraía a ustedes hacia la Gran Fraternidad Oculta, que es una llama
viviente de amor, que no tiene tiempo de detenerse en las pequeñas
consideraciones humanas.
Pregunta: ¿Está en contra de
la ley de Dios?
Respuesta: No hay nada contra
de la Ley de Dios. Existe únicamente un conocimiento o un desconocimiento de la
Ley de Dios, pero nada puede ir contra la Ley de Dios. Si no todo cuanto sucede
en la vida sería en contra de Dios, y todo es para mejoramiento social, ustedes
lo saben.
Pregunta: ..... (No salió
grabada).
Respuesta: Bueno, usted quiere
que les diga cuáles son las señales de los tiempos. Pero voy a decirles algo
que está muy unido a esto, el que tiene ojos para ver, verá, y el que tiene
oídos para oír, oirá. No les canso mucho, ¿no?
Pregunta: ..... (No salió
grabada).
Respuesta: Hombre! ¿Por qué
no? Estamos aquí para hablar de todo. Bueno, el señor pregunta, ¿qué relación
existe entre el ser humano y el caballo, el perro, el gato y el delfín?
Bueno, voy a decirles algo, ya hemos empezado a decir que
ustedes adquieran de lo que diga, lo que mejor les parezca; en eso siempre soy
muy impersonal. Vamos a hacer un poco de historia, ¿eh? Hace 19 millones de
años aproximadamente, unos más, unos menos, según nos dice la Tradición Oculta,
hubo un gran movimiento en la Tierra que trajo como consecuencia la Venida
aquí, de Aquellos misteriosos Agentes que llamamos los Prometeos del Cosmos o
los Angeles Solares. ¿Por qué vinieron a la Tierra los Angeles Solares? Porque
había una serie de animales que habían adquirido un cierto grado de conciencia
que les asemejaba al hombre, y entonces la Ley, el Orden, el Equilibrio que
rige a las Esferas actuantes hizo que la promesa, la invocación de aquellos
animales tuviera repercusiones cósmicas. La Venida de los Angeles Solares fue
precisamente para ennoblecer el cerebro instintivo de los animales que usted ha
mencionado, elevando la pequeña chispa de la mente que en aquellos momentos
estaba en el centro del plexo solar, y lo elevó en aquello que entonces sería
el cerebro de aquellos animales, y aquí empezó la gran unificación de
principios que trajo como consecuencia la individualización de aquellos
animales, constituyéndose entonces el 4º Reino de la Naturaleza, que entonces
todavía no existía. Es decir, que procedemos del Reino Animal; cada cual tiene
un punto de contacto con su animal de procedencia mística. Pero esto es muy
largo de explicar, ¿verdad?, porque hay un proceso que dura 19.000.000 de años
y tenemos todavía aquí en la Tierra personas que todavía (con perdón de los
animales) están actuando en forma muy animal. Solamente hablo de historia y cuando
algo no lo comprendan cito algún avatar místico como Madame Besant, lo hago con
mucha intención, porque el conocimiento esotérico, el conocimiento místico,
viene siempre como consecuencia de verdades que han sido asimiladas por
aquellos discípulos y se transforma en los libros, se transforma en las
conferencias, se transforma en aquello que ennoblece la conciencia de la raza.
Pero ya, sintetizando, la tradición es una cosa, la realidad de lo que estamos
observando es otra, ¿se han fijado ustedes en ciertos rostros humanos, cómo
todavía tienen ciertas características de los animales que constituyen en
cierta manera su código genético? No me refiero a cosas psíquicas, sino
simplemente físicas. Creo que esto contesta bastante, si se están muy atentos,
¿eh?
Pregunta: .... (No salió
grabada).
Respuesta: Porque usted sabe
que el Reino Animal tiene muchas especies, las especies que en aquellos tiempos
estaban mayormente evolucionadas eran el caballo, el perro, el gato y el
elefante; del delfín no nos habla la doctrina esotérica, pero el delfín es un
animal muy inteligente, ustedes lo saben, sabe contar incluso, conoce la música
en cierta manera, demuestra que con el devenir del tiempo hay muchos otros
animales que han exigido del Creador su condición humana, porque la tienen en
latencia, como nosotros en latencia tenemos el germen de Dios, y toda semilla
contiene siempre el germen de aquello que es su antecesor. Así que como
decíamos, el Reino Mineral constituye el asiento del Reino Vegetal, el Vegetal
se alimenta del Reino Mineral; el Reino Animal se alimenta del Reino Vegetal y
se alimenta entre sí, por la depredación, por la destrucción de cuerpos para
alimentarse; y tenemos el cuerpo humano, que es el nuestro, que está
constituido por tendencias minerales, vegetales y animales Y aquí está el gran
problema de la época, ¿cómo podemos liberarnos de este contexto? Porque por un
lado nos sentimos dioses, pero por otro lado nos sentimos atados a la
animalidad que constituye el fundamento de nuestra vida orgánica. Entonces todo
esto tenemos que tenerlo en cuenta, porque seremos humildes, ¿verdad? No somos
dioses enteramente, somos pequeños dioses que tratan de unificarse con la
propia divinidad; todo el trabajo que debemos realizar es resistir el empuje de
los instintos primarios, instintos que proceden del Reino Animal, con lo cual
ennobleceremos al Reino Animal, y después tratar de conquistar el Reino Divino,
el 5º Reino de la Naturaleza. Entonces una vez conquistado el 5º Reino veremos
lo que pasa... Ahora lo que interesa es, como decíamos antes, vencer la
subconciencia que tiene sus raíces en el Reino Animal; estar muy concientes,
muy atentos en el mundo de la conciencia, que es la conciencia de vigilia que
nos acompaña constantemente y tratar a través de la atención -esta atención
formidable que hay que depositar en todas las cosas- de situarnos en el Reino
de la Intuición Espiritual o en el Reino de los Cielos. Entonces a pesar de
nuestra humilde procedencia, seremos grandes en la propia divinidad.
Pregunta: Usted propone que
el camino sería el corazón, pero, ¿cómo podemos amar a la persona que tenemos
al lado si no la conocemos, y la vamos a conocer en la proporción que nos
conocemos a nosotros mismos, y cómo hacer para que no se nos mezcle la mente
con el corazón, y nos perdamos en un esquema mental en vez de ampliar el
corazón? ¿Cómo sé yo que es verdaderamente intuición, o atención, o no sé cómo
lo llama?
Respuesta: Atención...
Atención... No hay otra palabra.
Pregunta: ¿Cómo sé bien, para
aclarar qué es mente y qué es corazón, para saber por qué me estoy guiando?
Respuesta: Mire usted, si la
persona tiene que despertar el corazón, forzosamente la mente tendrá que ceder,
y voy a ser muy claro y conciso, para que el corazón resplandezca, la mente
debe quedar reducida a cero y usted pregunta: ¿ cómo voy a quedar, cómo dejar
la mente vacía? Cuando el pensamiento ha desaparecido queda una sola cosa: la
Verdad, porque la Intuición y la Verdad son el Corazón hablando a través de la
Mente. Tienen que tratar de comprender esto. No hagáis más preguntas porque es
difícil, ya lo sé. Estoy hablando el lenguaje de esta Nueva Era; de esta Nueva
Era nos ha hablado muy absoluta y correctamente Krishnamurti. Krishnamurti ha
sido, dentro de la Raza, aquel ser insigne que ha dicho “He conquistado la
verdad y ¿cómo he conseguido la verdad?, porque he vaciado la mente de todo
contexto memorial.” Y cuando el pensamiento no contiene memorias, ¿qué contiene
entonces? Contiene ideas creadoras que son intuitivas. Una idea por su propia
condición de síntesis puede derivar en una multiplicidad de pensamientos, y
nosotros nos deleitamos con los pensamientos, nos recreamos con los
pensamientos pero no sabemos su significado, nos limitamos a reproducir y a
reproducir, pero no a crear. La creación viene por la idea intuitiva, lo
habitual -el pensamiento que utilizamos- viene de recuerdos. Y cuando se
presenta una Nueva Era, cuando se presenta un acontecimiento nuevo en nuestra
vida, nos sentimos desarmados, porque enfrentamos el grupo de recuerdos del pasado
para resolver este problema actual, y este problema actual no se resuelve
nunca, porque tratamos de aquilatarlo o de resolverlo a través del grupo de
recuerdos, que desconocemos que existen en la subconciencia, y entonces hay un
gran problema de adaptación y de sufrimiento, y no sabemos exactamente lo que
hacemos. No pensamos, somos pensados, hay que ser muy exclusivos en el pensar y
darse cuenta de esta cuestión, el análisis intelectual no libera, ni recrea con
los pensamientos por elevados que sean. Sólo cuando la mente ha quedado
completamente vacía, huérfana de todo apoyo, es cuando puede contener la
Verdad, no antes. Entonces, como consecuencia, cuando aquí no queda nada, se
abre el amor del corazón, porque no quiere decir éste es mi padre, ésta es mi
madre, éste es mi amigo, sino que todos somos iguales, todos somos Hijos de
Dios. Esta verdad, esta idea es difícil de comprender, me doy cuenta.
Pregunta: ... (No está
grabada).
Respuesta: Haces una pregunta
intelectual y el amor no resiste preguntas intelectuales, las esquiva, no
quiere. Tú cuando amas, si amas realmente, te das cuenta de que la mente no
funciona en nada cuando amas. Es cuando no amas que funciona la mente, entonces
es fácil de comprender y difícil de practicar, pero hay que saberlo realmente.
Dense cuenta de que la persona utiliza la mente como instrumento de reacción
contra los demás y esto tiene que desaparecer si queremos descubrir el amor del
corazón, por esto les señalaba no una técnica; es un deber social el estar
atento. ¿Se han dado cuenta de lo difícil que es estar atentos cuando una
persona nos desagrada? Estamos pensando en todo, menos en la persona aquella,
si nos está hablando y estamos Dios sabe dónde. Y ustedes cuando están
escuchando muy atentamente, sin darse cuenta están vaciando la mente y como
consecuencia de este vacío de la mente se está desarrollando el corazón, y aman
sin que se den cuenta, se extiende el radio de su amor que ahora está limitado
a lo que les rodea simplemente, a sus caras amistades. Hablamos de una técnica
-no mental- de aproximación a la Verdad, hablamos de la Verdad que no tiene
técnica, salvo este deber social de ser humanos, pues si queremos llegar a la
divinidad debemos ser muy humanos en sensibilidad, en comprensión y en afecto.
Y esto nos falta. Esto es lógico porque estamos siguiendo la ruta de muchas
tradiciones, pero ha llegado el momento en que decimos: se acabó, me doy cuenta
de que soy un resultado del pasado, y me doy cuenta de que realmente estoy
introduciendo factores destructivos y nocivos dentro del ser, voy a actuar de
una manera completamente distinta. Y así surge la comprensión más real de la
Verdad, no el análisis analítico, mental, de las pequeñas verdades que todavía
sostenemos en la mente y que constituyen quizás, nuestros grupos dentro de los
cuales actuamos. Por eso les digo, habrá que ser una persona muy inteligente
para que pueda quedar dentro de un grupo y de una estructura definida, sin
quedar preso en esa estructura y que esta estructura la separe de las demás
estructuras, no constituya eso una lucha religiosa como las que hemos tenido a
través del tiempo, luchando por "yo tengo más Dios que tú"; por lo
tanto "yo tengo que luchar contra tí", es la nota dominante todavía
en la sociedad. Ahora ya no lucha tanto la religión, pero son los partidos
políticos y los grupos sociales los que están luchando; luchan porque están
introducidos dentro de la estructura que han creado y ahora, esta estructura
que han creado, les condiciona y les impide percibir la Verdad y esto constituye
un pecado contra la Ley, contra el Orden y contra la Fraternidad.
Pregunta: Mi pregunta es la
siguiente, ¿tenemos realmente libre albedrío?
Respuesta: Estén atentos y no
se preocupen. ¿Qué es exactamente el libre albedrío? Visto muy analíticamente,
el libre albedrío es la capacidad que tiene el hombre de equivocarse
constantemente. Ahora bien, ¿es que no existen valores permanentes dentro del
espíritu del hombre, que ennoblezcan tanto el libre albedrío que lo conviertan
en algo más allá del libre albedrío? Yo voy a establecer dos diferenciaciones:
Primero, el libre albedrío que corresponde a nuestra capacidad de decidir, de
elegir y de equivocarse en las elecciones; y segundo, una voluntad libre de
acción que trasciende completamente el libre albedrío. Voy a ser muy analítico
sobre esta cuestión porque debe ser absolutamente comprendida, para ser
realmente asimilada. La voluntad corresponde a los niveles internos, a la
supraconciencia; el libre albedrío pertenece a la condición humana. Entonces si
a través de esta atención formidable a la cual haré referencia constantemente,
llega el momento en que el libre albedrío que surge con la subconciencia, se
convierte en conciencia, después pasa a convertirse en voluntad. ¿Qué
diferencia hay entre la voluntad intuitiva o voluntad verdadera, y el libre
albedrío? ¿Por qué el libre albedrío suele equivocar al pensador, en tanto que
la voluntad jamás equivoca al pensador. Es decir, pensar más allá de la mente o
tener una voluntad más allá del libre albedrío, todo está fundamentado en la
misma causa original, es consustancial con el principio de la evolución, el
hombre pasa del instinto gregario a la comunidad social y, dentro de la
comunidad social adquiere el libre albedrío que es aquello que lo diferencia de
los demás, que es su propia matización y, al propio tiempo, es aquello que lo
separa de los demás. Esta capacidad de elegir, esta capacidad de decidir y esta
capacidad de equivocarse tiene que superarse, tiene que convertirse en voluntad
y esta voluntad se adquiere por la atención. La atención desarrolla la
voluntad, no el libre albedrío. Cuando la persona llega a educir una voluntad
perfecta se libera de la necesidad de decidir. ¿Por qué? Porque cuanto elija es
correcto, no se equivoca como con el libre albedrío, y aquí hay un delicado
punto de atención, porque es muy difícil de comprender esta diferenciación,
pero alíen ustedes el libre albedrío con el grupo inmenso de recuerdos que
constituye el sedimento de nuestra conciencia y decir, al propio tiempo, que
todo esto tiene que ser destruido para poder tener una voluntad libre. La
verdadera libertad no está en el libre albedrío, sino en la voluntad, por
esto hago siempre esta tremenda diferenciación que puede parecer que trato de
disolver el libre albedrío o no darle importancia. Tiene su importancia el
libre albedrío, pero sólo en aquellas etapas en que el libre albedrío es
necesario, ¿Qué pasará cuando nuestra mente esté completamente vacía del
pasado? ¿Dónde estará entonces el libre albedrío? Habrá una voluntad que -
igual que el Gran Pensador interno o Alma Solar - se manifestará en forma tan
libre y espontánea, que entonces no hay riesgo de equivocarse. Nos equivocamos
porque utilizamos el libre albedrío, porque el libre albedrío está establecido
sobre suelos de recuerdos, y el recuerdo ata por noble, bello y poderoso que
haya sido. La propia idea de Dios se puede convertir en un recuerdo y
constituir un impedimento para llegar al propio Dios, lo cual implica la
elección que existe entre el Pensador que ama y Dios que es el amor.
Pero la
Voluntad, la Voluntad ejercitada a través de la destrucción del libre albedrío
trae como consecuencia algo completamente nuevo, trae la ordenación de los
principios, la verdadera legislación social, la fraternidad de los pueblos, la
unidad de los grupos y singularmente la Paz en el corazón, que tanta falta nos
hace.
Pregunta: ¿Qué significado
tiene para usted la muerte y resurrección de Cristo para la humanidad? ‘
Respuesta: Bueno, usted sabe
que los Misterios del Cristianismo son rigurosamente esotéricos. Existen como
usted sabe, cinco Misterios principales: el del Nacimiento, el del Bautismo en
el Jordán, el de la Transfiguración en el Monte Tabor, después existe la
Crucifixión, o Pasión y Muerte de Jesús en la Cruz, y después existe la
Ascensión a los Cielos. Esto es el símbolo de las iniciaciones que tiene que
sufrir el hombre para pasar de la subconciencia a la supraconciencia, es decir
los pasos obligados que tiene que dar el hombre para pasar de su condición
humana a su condición divina; a esto se llama Misterios y, esotéricamente, les
llamamos Iniciaciones. Es decir que a la Primera Iniciación le llamamos la
Iniciación del Nacimiento, el Nacimiento en el Corazón, siempre el Corazón es
el arcano de los valores absolutos. Después tenemos el Bautismo en el Jordán,
que es el símbolo del cuerpo emocional, es el símbolo del deseo que tiende a
ennoblecerse, entonces viene la purificación del agua, y pasamos a la
Transfiguración de Cristo y del Alma humana en el Monte Tabor de la conciencia.
¿Qué sucede entonces? Que todos son Misterios que tenemos que ir absorbiendo;
pero para llegar a la Crucifixión, a la Pasión que es la etapa cumbre porque
precede a la Perfección. Hay que empezar a sufrir ahora, porque todos somos
crucificados, todos pasamos por ciertas pruebas, por cierta pasión en nuestras
vidas y entonces por estas crisis estamos acercándonos a la comprensión de lo
que significa realmente la Pasión y Muerte de Cristo. Pero entiendan ustedes
que, cuando hablamos esotéricamente, Cristo representa o dramatiza el alma
humana. Y que no hay que entender tanto el Cristo histórico, por motivos
históricos, como el Cristo místico que es el alma humana en proceso alquímico
de transmutación. Podríamos decir la transmutación del libre albedrío en la
voluntad, o la transformación del deseo en aspiración y en intuición, o la
transformación del pensamiento en algo que está más allá del pensamiento y que
desconocemos todavía. Pero todos son misterios que hay que resolver aquí y
ahora, en el fragor de la vida social, en la lucha por la existencia, tratando
de incorporar los verdaderos valores psicológicos de nuestra vida; entonces
seremos grandes y podremos realmente fructificar en frutos de Paz para todos
los demás.
Pregunta: ¿Por qué la
humanidad ha perdido la espontaneidad?
Respuesta:
Hemos perdido la
espontaneidad porque nos hemos hecho rigurosamente técnicos, dejamos que
piensen las máquinas por nosotros, hemos creado una civilización que se basa en
la técnica, ¿verdad? Y sin darnos cuenta, a través de la técnica, de esta
inmensa maquinaria, nos hemos mecanizado y entonces hemos perdido la
espontaneidad. Entonces, más que preguntar por qué hemos perdido la
espontaneidad, ¿por qué no preguntar cómo hallar la espontaneidad? Esta sería
la pregunta correcta y esto solamente se halla cuando trabajamos conjuntamente,
cuando no nos apegamos al fruto de nuestras acciones cuando tratamos de
unificar nuestro pensamiento con el de los demás sin que exista lucha ni
fricción, ni sufrimiento. Cuando amamos realmente, cuando estamos muy atentos a
todo cuanto ocurre-.., estar muy atento es una de las formas de ganar
nuevamente la espontaneidad, porque como estamos mecanizados psicológicamente,
hemos perdido lo mejor que tiene el hombre, la candorosidad del niño, su ingenuidad,
su espontaneidad, y ahora siendo hombres ya hechos y derechos, tenemos que
volver a conquistar la espontaneidad de los principios, aquella inocencia que
vemos reflejada en los ojos de los niños, y esto podemos hacerlo porque estamos
aquí y ahora. Por ello hay que tratar de ser humildes en la apreciación,
porque la riqueza de argumentos mentales no libera, como tampoco libera la
riqueza de bienes materiales; lo que libera es la atención, la observación,
porque con la atención y la observación sabemos exactamente cómo deberemos
actualizar los bienes que Dios nos ha concedido, y entonces ganaremos humildad,
espontaneidad.
Pregunta: ..... (No está
grabada).
Respuesta: Mire señor, La Gran
Invocación, según se nos dice, fue trasmitida por el propio Señor Maitreya o el
Cristo; por lo tanto, el que tiene una vista más allá del tiempo sabía cómo
ordenar los versículos o los mantrams para producir ciertos resultados
definidos, ¿me entiende usted? Podemos hacer mantrams humanos y utilizar magos
blancos para indicar nuestro trabajo de servicio creador a la Raza, pero no
podemos tratar de alterar los textos que vienen de la Gran Fraternidad Blanca,
como yo no me atrevería a desvirtuar ningún versículo de la Biblia, o del
Corán, o del Bhagavad Gita, o de los Vedas, o de los Upanishads. Están escritos
de esta manera, hay que comprenderlos tal como están escritos y, para mí, La
Gran Invocación constituye el más tremendo desafío de nuestra condición de
aspirantes espirituales en esta era de grandes transformaciones sociales; pero
hay que estar muy atentos a su significado.
Pregunta:
¿Cómo debe ser
buscado un grupo esotérico o buscadores de la verdad? ¿Cómo mantenerlo unido?
Respuesta: Bueno, un grupo
esotérico debe ser integrado siempre bajo el principio místico del amor porque
si es la mente la que impera en un grupo, automáticamente surgirá quién será el
líder de este grupo, y ustedes saben que el afán de ser líder o el complejo
mesiánico que está por doquier, constituyen un mal de esta época. Una de las
razones principales de este mensaje humilde que trato de traducirles a ustedes,
es desmitificar a los líderes, porque amo tanto al espíritu del hombre que no
puedo conceptuar que existan hombres superiores a los demás, aunque lo sean
jerárquicamente, pues si existe verdadera jerarquía, el hombre es humilde y
sencillo, no está nunca en un pedestal. Entonces el amor que lleva en los
repliegues de su aura, es tan grande que no tiene necesidad de hablar; es el
amor que conforma todas las cosas.
Si yo les dijera ahora: “Hay que hacer un grupo de esta
manera”, estaría conformando un grupo, pero estaría al propio tiempo
traicionando mi ideal, porque es el ideal del amor que debe traducirse, no en
normas rígidas de convivencia, sino en esta unidad de principios que constituye
la levadura, la sal de la Tierra. Por la sal de la Tierra, por esta levadura
insigne que es el Corazón del hombre, los grupos se irán conformando de acuerdo
con la Ley y no de acuerdo con el libre albedrío de aquellos que se creen más
altos que los demás, pues en el Reino de los Cielos los primeros serán los
últimos, y los últimos los primeros.
Pregunta: ¿Cómo amar y servir
mejor, de entre nuestros semejantes especialmente a los niños?
Respuesta: Bueno, ustedes
saben que los niños atraen nuestro corazón, no porque sean niños, sino porque
contienen todavía el tesoro de la Gracia, todavía no han sido absorbidos por la
trepidante situación ambiental que nos rodea a nosotros, están inmunes, son
angélicos. Por lo tanto, ¿qué amamos en los niños? Amamos a los ángeles que
están en los niños, y por lo tanto, el amor que sentimos por los niños es algo
natural, es el perfume de la existencia. "Dejad que los niños vengan a
mí", pero no porque sean niños, porque niño es aquel que siendo adulto
puede guardar fidedignamente la inocencia, la ingenuidad, la espontaneidad del
niño.
Pregunta: ¿La Verdad, puede
ser trasmitida del Maestro al discípulo o el discípulo debe recorrer el camino
solo?
Respuesta: La Verdad está en
nosotros, pero, ¿podemos negar acaso una jerarquía espiritual entre los
hombres? Hay quien sabe más, hay quien ama más, porque por su propia condición
ha evolucionado más. Toda persona que sabe más es capaz de convertirse en un
maestro de los demás que no sepan tanto como él Yo le decía a una señora amiga
mía hace muy poco, que me decía: “Cuánto sabe usted de la Jerarquía y todas
esas cosas!” Si, pero yo no sé coser, ni sé planchar, y aquella señora se
sintió halagada porque veía que algo que ella conocía, yo no conocía. Entonces,
el Maestro y el discípulo son términos que hay que juzgar con mucha
inteligencia, yo podría hablarles del Maestro, de contactos del Maestro con el
discípulo y del discípulo con el Maestro, pero el discípulo debe saber vivir
por sí mismo, porque si el Maestro es un verdadero Maestro, lo primero que hará
es enseñarle a vivir aparte del propio Maestro, para que sirva la ley y el
orden, y la inseguridad que se está exteriorizando en el corazón humano sea
posible realizarlo en poco tiempo, porque siempre nos damos cuenta de que
cuando buscamos la realidad, antes de buscarla por nosotros mismos, pedimos:
“¿Quién es el que nos la ha de confiar?" Porque olvidamos que la Verdad
está en nosotros, y que esta Verdad es nuestro Maestro, y por lo tanto, si
queremos hallar el Maestro que tiene que llevarnos a las puertas del Misterio
de la Iniciación, deberemos hallar primero el Maestro en el propio corazón.
Este es el primer paso. No puedo hablarles del Maestro más allá del corazón,
porque el corazón todavía no lo hemos desarrollado a un punto en que podamos
comprender exactamente la ley, el principio y el orden que deben regir para la
humanidad de esta Nueva Era y en todas las eras seguramente. ¡Muchas gracias!
Unidad de Servicio
Buena Voluntad Rosario
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