CONFERENCIA
 

VICENTE BELTRAN ANGLADA
 


 
 

Los Misterios de Shamballa

Los Centros del Señor del Mundo.

Barcelona, 19 de Octubre  de 1.983

  

"LA VERDAD HA DE PRESENTARSE DE TAL MANERA, QUE CONVENZA SIN ATAR Y QUE ATRAIGA AUN SIN CONVENCER. ESTO SOLO PUEDE REALIZARLO EL LENGUAJE DEL CORAZON".

-VBA: Introducción al Agni Yoga, p. 49
 


Los Misterios de Shamballa

Los Centros del Señor del Mundo

 

Esta es la sexta charla acerca de Shamballa. Como he tenido ya el gusto de decirles en otras ocasiones, el tema de Shamballa es el más esotérico, el más profundo, el más complejo y el más difícil de ser captado por la mente humana. A pesar de que Shamballa es conocido por la tradición esotérica y mística de todos los tiempos bajo distintos nombres, como por ejemplo Shangril-la, Agharta, Avallón, la Ciudad perdida en el Desierto, la Isla Blanca, y también el Santuario del Santo Grial, el significado de Shamballa siempre es el mismo. Es el centro unificador de nuestro planeta, no podemos pasar de nuestro planeta cuando hablamos de Shamballa a pesar de que existen las grandes vinculaciones cósmicas de nuestro planeta. Pero hay que captar el sentido íntimo de Shamballa más con el corazón que con la mente, porque como ustedes saben la mente trata de especular y cuando la mente especula se aparta de la verdad. La verdad está más allá de la especulación mental. Por lo tanto, si se está muy atento, si se procura que la mente no divague simplemente es posible que captemos algunos de los misterios implícitos en Shamballa, advirtiendo ya de principio, que todo cuanto podamos decir acerca  de Shamballa se refiere única y exclusivamente a aquello que técnica y esotéricamente definimos como los Misterios Menores. Hay la posibilidad, si hay atención, que se pueda captar algo que esté más allá del misterio menor, y esto, naturalmente, pertenece a la mente intuitiva, aquella mente que no especula, que ve las cosas en su justa dimensión. Para decirles lo que implica la dificultad de nuestra mente, para poder rasgar los velos que encubren el Sancta Sanctorum de Shamballa tendré que decirles que estamos condicionados por una serie de circunstancias ambientales. Segundo, que la orientación mental del hombre esta basada en la previsión,  en el pasado. Y tercero, que nuestro planeta con respecto a la eclíptica esta inclinado 23º 28’, lo cual significa una deformación de los rayos solares, y como que hay una relación directa entre los rayos del Sol y los rayos del entendimiento, por ley de plano, por ley de analogía, hay una distorsión, y Shamballa no puede ser considerado a través de la refracción de los rayos solares, tiene que ser captado por algo que esté por encima de esta refracción o por esta inclinación con respecto a la eclíptica, y es poniendo todo el empeño, toda la atención en descubrir estos misterios, que sin embargo, tienen su contraparte en nosotros. Por ejemplo, el hombre tiene 7 centros o chakras en su cuerpo etérico, tiene 7 glándulas endocrinas en su cuerpo físico denso, y cada uno de estos 7 chakras y las 7 glándulas, están conectados con 7 planetas, estos planetas están vinculados con 7 rayos y estos rayos tiene su origen cósmico. Entonces, una de las formas para poder comprender algo el misterio de Shamballa, es mirándonos a nosotros y proyectándonos hacia el cosmos. Si logramos esto por ley de analogía, que es la ley esotérica por excelencia, nos será posible comprender algo de los misterios y a ser posible rasgar el gran misterio que encubre la triple pregunta del hombre: “¿Quién soy, de donde vengo y adonde me dirijo?”, que es virtualmente lo que trata de hacerse. A menos que no respondamos en cierta manera y hasta cierto punto estas tres preguntas no podemos comprender nada.

 

Sin embargo, hemos hablado de las Estancias de Shamballa, hemos hablado hasta donde nos fue posible de las vinculaciones cósmicas de Shamballa con el Logos Solar y con los Logos del Sistema Planetario al cual pertenecemos. Hemos tratado de penetrar en aquello que todavía no se ha dicho, aquello que debe ser captado por la intuición y no simplemente por la mente especulativa; y hoy continuaremos, porque cuando hemos hablado de las Esferas de Shamballa, dividiendo Shamballa en 7 esferas, como dividimos el Sistema Solar en 7 planos, igualmente podemos situar en cada una de las Esferas de Shamballa un centro definido, y tratar de profundizar tanto como nos sea posible en la formación de este centro, teniendo en cuenta que un centro es una entidad viva compuesta por muchas entidades, ya sea el centro de un Hombre Celestial, el centro de un Logos Planetario o el centro humano. Cada uno de los chakras tiene vida propia, tiene consciencia propia y están construidos por materia consciente, por entidades inteligentes, sea cual sea la característica del centro. Hoy trataremos de hablar algo de los centros del Señor de Shamballa, —el Señor del Mundo—, utilizando como punto de referencia los siete chakras del hombre y teniendo en cuenta la Ley de la Analogía.

 

Entonces, empezaremos por el centro superior del Señor de Shamballa, —el Señor del Mundo— el centro que constituye su propia morada, el centro que constituye la síntesis de todos los demás centros. Este centro, según sabemos se denomina en sánscrito Sahasrara, es el centro coronario, el de la cúspide de la cabeza. Hurgando en los anales esotéricos se puede llegar a concebir que este centro esta constituido primero y ante todo, por el propio Señor de Shamballa, el sintetizador de todos los centros. Esta asistido por un Señor de la Llama de primer rayo. Los Señores de la Llama son tres grandes seres, discípulos de Sanat Kumara que vinieron con él desde la cadena de Venus a la Tierra cuando se instauró por primera vez la Jerarquía o Gran Fraternidad Blanca. Hay también unos Ángeles de tipo cósmico, —y estoy hablando del centro Sahasrara— a quienes, técnicamente, se les denomina Los Señores del Fohat. Fohat es el Fuego Eléctrico del Espíritu.

 

Entonces, tenemos que el centro, —en evolución constante, de Sanat Kumara o de Shamballa—, está constituido por Sanat Kumara, por un Señor de la Llama de primer rayo, —un Gran Kumara—, por unos Ángeles Cósmicos,   —Agnis Cósmicos, Señores del Fuego, aquellos que se les denomina Señores de Fohat—, y después una serie de Chohanes pertenecientes a la cadena anterior, emparentados místicamente y kármicamente con el Señor del Mundo.

 

Este es el centro que atrae, canaliza y distribuye las energías del Primer Rayo Solar, y cuando me refiero a los rayos que inciden sobre nuestro planeta, o sean diferenciados en nuestro planeta, hay que entender que son subrayos del Segundo Rayo Solar. Esto lo sabemos, porque todos hemos leído esotéricamente la composición de los planos del Sistema Solar.

 

Tenemos después el Segundo Gran Centro. Tengo que advertirles que en nuestro planeta hay tres grandes principales, que son los que vamos a analizar primeramente, Shamballa, la Jerarquía y la Humanidad. Esto son los tres centros principales de nuestro planeta, después analizaremos los secundarios.

 

El segundo gran centro planetario se denomina el Centro de la Gran Fraternidad o de la Gran Logia Blanca o simplemente el Centro de la Jerarquía. El Centro de la Jerarquía esta constituido, como núcleo básico, estoy hablando del chakra que está vitalizado por la entidad Jerarquía. En el fondo de la cuestión, en el núcleo vivo, existe un Kumara del Segundo Rayo, otro de los Grandes Kumaras, Señores de la Llama, que asiste al Bodhisatva, es decir, al Jefe, por decirlo de alguna manera, de la Jerarquía, el Señor Maitreya o aquella entidad que conocemos como Cristo aquí en Occidente. Existe, después, dentro de este centro Jerárquico, los tres Señores de Departamento, el Señor Manú, el Señor de la Raza y de la Política de las Naciones, —el Bodhisatva en sí,  que constituye la propia vitalidad Jerárquica— y el Mahachohan. El Mahachohan es el Señor de la Cultura, y de la Civilización de los Pueblos, el que tomando a una serie de jerarquías de devas, que tienen que ver con la evolución de la cultura, la civilización, el lenguaje, todo cuanto implique algo psicológico del ser humano. Conectados con estos grandes Señores de Departamento, existen los Siete Chohanes de Rayo. Los siete Chohanes de Rayo distribuyen a través de su Vida los Rayos que proceden del Rayo Cósmico del Sistema, del Segundo Rayo. Lo diferencian, lo caracterizan, lo vitalizan, lo distribuyen. Entonces tenemos, primero un Señor de la Llama del Segundo Rayo, el Bodhisatva como Jefe y a su lado derecho e izquierdo al Manú de la Raza. Los Siete Señores de Rayo, el Maestro Morya, el Maestro Koot Humi, el Maestro Veneciano, el Maestro Serapis, el Maestro Jesús, Maestro Rakoczi y el Conde de Saint Germain, tal como dice la tradición esotérica. Cada uno de estos Chohanes tiene a su cargo siete rayos menores distribuidos en forma de Ashrama. Entonces, 7 Chohanes, por cada uno de ellos siete Maestros de Compasión y Sabiduría, son 49 Adeptos. Existe después una pluralidad de Iniciados de 1º, 2º y 3º Iniciación y menos de la 4º Iniciación que llamamos Arhats. Esto constituye en síntesis, más una hueste de Ángeles del Segundo Rayo que proceden de Venus, que son los llamados “Ángeles Integradores del Amor Universal”.  Esto es el segundo gran centro planetario.

 

El centro de la Humanidad esta compuesto por todo cuanto implique a la humanidad, teniendo en cuenta que hay alguna raza aborigen que no pertenece a nuestra humanidad, porque todavía no está individualizada. Hay que distinguir la forma humana de la conciencia humana. Se puede tener la forma humana y no tener todavía la conciencia humana. Se trata de ciertos aborígenes de Australia y África, que tienen la figura, forma y perspectiva del hombre,  pero que todavía no han penetrado dentro de la individualización. Tienen la forma porque así ha venido por la fuerza de las cosas y están haciendo una proyección evolutiva distinta de la nuestra y llegarán a ser hombres enteramente en la 5ª Ronda. Ahora están solamente vegetando, por decirlo de alguna manera. Se puede decir también que hay animales muy avanzados, que quizá están a la altura de ciertos hombres. La humanidad entonces está constituida por: Un Kumara de Tercer Rayo, por la Humanidad corriente, y por la humanidad avanzada,  y dentro de ésta tenemos a los discípulos mundiales y a los aspirantes espirituales.

 

Todo esto constituye por así decirlo estos tres grandes centros. El centro de la cabeza, el centro de la garganta y el centro del corazón. Pero naturalmente, esotéricamente se nos habla siempre de los tres grandes centros planetarios, pero en un Universo de tipo septenario y en un planeta como el nuestro, y como todos los demás planetas, que también es septenario por analogía al proceso solar, también tiene otros cuatro centros que distinguir. Vamos a analizar quizá por primera vez aquí, como están constituidos estos cuatro centros.

 

Tenemos en la cabeza, en el entrecejo, un centro que llamamos Ajna o centro del Entrecejo. Este centro esta compuesto, primero, por un Buda de Actividad del 5º Rayo. Por una serie impresionante de Ángeles Agniswhattas, según la tradición mística-esotérica de Oriente, a quienes la tradición asigna el nombre de Dhyân Chohanes o bien de Ángeles Solares, constituyen este centro, más una serie de Iniciados, que por decirlo de alguna manera, están siendo polarizados en este centro, partiendo del centro de la garganta, porque el centro de la garganta pertenece al centro de la Humanidad, el centro superior pertenece a Shamballa y el centro de la Jerarquía pertenece al Corazón, es decir, el chakra principal, el de la vida.

 

La composición del 5º gran centro que canaliza unas  energías procedente del 5º Plano Cósmico a través del 5º Plano del Sistema Solar, es el más importante para la humanidad en esta 5ª Subraza de la 5ª Raza. Dense cuenta que siempre, aplicando la analogía cabalística de los números, tenemos 5º Rayo, el 5º Plano Cósmico, el 5º Plano Solar y tenemos entonces también, la 5ª subraza de la 5ª Raza. Siempre el número 5, es quizás el centro más desarrollado hoy día y el que están activando constantemente los Ángeles Solares en contacto con aquellas Almas a las cuales que están instruyendo.

 

Tenemos después el centro Manipura, el centro del Plexo Solar. El centro del Plexo Solar esta totalmente ocupado por, primero por un Buda de Actividad del 6º Rayo, y también por una serie de huestes y jerarquías de tipo astral. Es un centro típicamente astral, aun cuando se trate de la esplendente vida de Sanat Kumara. La polarización del hombre que debe constituir el centro de la Garganta de Shamballa o del Señor del Mundo, siendo atraído por las vibraciones del 6º Rayo o astrales, impide que la corriente de vida de la Garganta pueda ascender al centro Ajna. Esto hace que el mundo este pasando una grave crisis de valores psicológicos, porque no acaba de ser comprendido el valor de la mente como el orientador psicológico de la conducta humana en tiempos difíciles y críticos como los del presente. Entonces, cuando en las escuelas se nos está hablando constantemente de elevar la sintonía del plexo solar o de la naturaleza astral del hombre, tratando de vincularla a la aspiración superior, que no sea simplemente devocional, sino que sienta sentimientos de Libertad, de Belleza e incluso de Síntesis. Es la necesidad que tiene la Jerarquía y Shamballa de que la Humanidad responda de una vez para siempre a los impulsos superiores que están marcando constantemente la pauta de la evolución a través del Gran Señor Sanat Kumara.

 

Tenemos después el centro más activo, quizás hoy día, debido a que estamos penetrando rápidamente en la constelación de Acuario o por aquella zona del espacio que está dinamizada por la constelación de Acuario, o dinamizada por aquella entidad psicológica que da vida a la constelación de Acuario, el cual, a través del 7º Rayo esta penetrando en el centro Sacro planetario, constituyendo una lucha tremenda, porque Uds. saben que por el centro Sacro están penetrando energías de varios tipos. La constitución de este centro es, primero, un Buda de Actividad del 7º Rayo, el Rayo de la Devoción Ceremonial, el Rayo de la Magia Organizada. Una Rayo que está potentemente organizado hoy día y que según se nos dice es responsable de las dictaduras de la Tierra. Un exceso de energía, sin que haya podido ser controlada esta energía por la mente, se constituye siempre en un caudal de discordia y de crisis para la Humanidad y eso hay que tenerlo en cuenta. Por este centro y por este Buda de Actividad del 7º Rayo penetran las energías de Acuario, y la constitución de este centro, además de éste Buda de Actividad, es una hueste de Devas procedentes del Sol, a quienes se les denomina esotéricamente “Los Impulsores del Prana Solar”, los cuales a su vez, están secundados dentro del propio centro sacro, por una hueste de devas que pertenecen a la Tierra y que se llaman “Los Creadores del Prana Planetario”. Prana es energía, la energía Solar, la energía Cósmica, la energía indiferenciada de todos los tipos, penetra para dar vida física a todo el sistema por este centro sacro. Y tenemos finalmente, el centro que pertenece al chakra Muladhara. El chakra Muladhara es un misterio, está ocupado por un Buda de Actividad del 4º Rayo. Muchos situaron en el pasado el 4º Rayo en el corazón, pero solamente en los Iniciados, estamos hablando de la Humanidad en su conjunto y de aquel ser que forma todo este conjunto, el Señor del Mundo.  La misma característica de este chakra, con cuatro pétalos, nos habla del Karma, nos habla de un Buda de Actividad que se ha sacrificado cósmicamente hablando,  para mantener vivos los Fuegos de Kundalini. Se trata de una entidad cósmica de gran categoría. El sacrificio es que ha atraído a su alrededor a una serie impresionante de Agnis del Fuego por fricción, Agnis que están todavía luchando entre ellos, y la lucha y la fricción entre todos estos Devas crea la fuerza que impulsa al planeta. Si ustedes hacen un hoyo en cualquier lugar del planeta y van profundizando, cuanto más avancen, más aumentará el calor. Ellos están en el centro místico de la Tierra, en sustancia de fuego ígneo por fricción material, sustancia casi objetiva que puede ser percibida por los clarividentes que tengan cierta maestría y cierta pureza, porque este fuego destruye.

 

Estos son los siete centros que constituyen nuestro planeta, considerado como un cuerpo en el espacio, un cuerpo como el nuestro, con sus siete cuerpos, con sus siete centros en cada uno de estos cuerpos localizados en el nivel etérico, y en cada uno de esos niveles se expresan las jerarquías y las entidades psicológicas que hemos estado describiendo. Naturalmente, todo cuanto hemos estado diciendo es siempre en relación con lo que sabemos de nosotros, solamente hay que extremar la percepción interna a fin de que por una traslación de conciencia podemos suponer que la entidad que llamamos Logos, aquellas propiedades y cualidades que tenemos nosotros. Desdichadamente, también le atribuimos nuestros defectos, ahí está la dificultad de que no podamos tener una panorámica perfecta de lo que implica Shamballa en su totalidad. Hay que reseñar también, como ocurre con nuestros chakras, que hay una interacción constante entre todos y cada uno de ellos, que hay constantemente un trasiego de valores espirituales entre los centros, que cuando un ente humano se libera o se purifica hasta cierto punto, pasa a otro centro, de ahí, que la Humanidad en su conjunto constituye el centro Laríngeo de la Divinidad.

Puede pasar, en virtud de sus esfuerzos, en virtud de la Iniciación, a ocupar, o bien, un lugar en el centro del Corazón, o bien un lugar en el centro Ajna, porque los centros son vida consciente, no son solamente unas esferas radiantes u oscilantes a gran velocidad con ciertos colores definidos. Esto constituye solamente la expresión de la vida consciente que se está desarrollando en cada uno de los centros y que en su proyección dan notas y colores definidos. Tenemos que dentro del Sistema Solar hay una serie de planetas que llamamos sagrados y otros no sagrados, que constituyen, digamos, el bagaje kármico o los centros que está desarrollando el Logos Solar, el cual a su vez es un centro dentro de una entidad cósmica. Si pudiésemos ampliar nuestra visión a grandes perspectivas, si dejásemos que por la amplitud del concepto, nuestra mente, incapaz de percibir más allá de sí misma, se dejase por completo y viese la realidad, se daría cuenta de que todos estamos hermanados, y que el Cosmos constituye una familia de Dioses con conciencia social y que los astros son hermanos a pesar de sus distintas peculiaridades, cualidades, rayos de poder o rayos de misericordia. Todos estamos unidos, por lo tanto, cuando estamos hablando de relaciones, como por ejemplo, la relación mayor que existe entre Shamballa, la Jerarquía y la Humanidad y los demás centros subalternos o menores que hemos descrito,  que constituyen un cuadrado. Estamos diciendo que ya estamos yendo a la Casa del Padre, porque en realidad se forma una casa. El Cuaternario más la Tríada constituye el siete de la Perfección, y cuando hablamos de estos centros, para que vean su interdependencia cósmica, habrá que decir, que más allá de este centro existe otro triángulo en el espacio cósmico, enlazado con éste triángulo, de Shamballa, Jerarquía y Humanidad, ocupado este triángulo por tres grandes entidades cósmicas que denominamos el Avatar de Síntesis, el Espíritu de la Paz y el Señor Buda. Uno, el Avatar de Síntesis, está enlazado con Shamballa, el Espíritu de la Paz enlazado con la Jerarquía y el Señor Buda, constituye la entidad humana que se ha convertido por sus características en el intermediario o en el Mensajero de los Dioses, está regido por Mercurio, se dice que es el Señor de Mercurio, pero todavía hay más. Si tenemos en cuenta que este centro está en constante armonía y sintonía con la Constelación de la Osa Mayor y está con la Constelación de las Pléyades y está con nuestro Sistema Solar, tendremos una pequeña idea de la interpenetración que existe entre todo cuanto implique Shamballa, Jerarquía y Humanidad. 


Debido a estas leyes de semejanza cósmica, no es posible adquirir el conocimiento esotérico. El conocimiento esotérico se basa en la analogía, tal como hemos dicho. El investigador que no utilice la analogía no podrá llegar a Shamballa. Refiriéndonos concretamente a Shamballa, habrá que decir, que no es simplemente un lugar físico, que hoy día constituye materia de especulación, no científica, pero sí metafísica, y son muchas las personas que dicen haber visitado Shamballa. Yo digo que habrán visitado la cáscara de Shamballa, pero que el centro de Shamballa todavía no ha sido descubierto, porque incluso para los Grandes Iniciados, Shamballa es el lugar más secreto e impenetrable. Solamente a través de las Iniciaciones que se van produciendo, se van acercando aquellas fuerzas vivas que constituyen la Jerarquía a Shamballa. Es en virtud de la Iniciación solamente, de la misma manera que las entidades humanas a través de la Iniciación pasan a formar parte de la Jerarquía. La ley es la misma. La Jerarquía va hacia la Humanidad y la Humanidad a través de la Jerarquía puede comprender a Shamballa, y todo cuanto se dice acerca de Shamballa, todas las orientaciones que se han dado hasta aquí acerca de este centro inmaculado tienen algo de verdad y algo de ilusión, algo que inspira los poetas y los místicos en direcciones astrales. Hay que ser muy duro, y permítanme ustedes utilizar esta frase, para poder penetrar siquiera en el primer antro de Shamballa, primera estancia de Shamballa. Duro consigo mismo claro esta, porque cuando aumenta la dureza consigo mismo y aumenta la ternura hacia los demás, es cuando empieza a descorrerse el velo de la Jerarquía, y cuando toda la vida del ser humano sé esta convirtiendo en una llama de amor y de compasión y de servicio, es cuando se penetra en Shamballa. Estamos trabajando así a través del tiempo y podemos decir que hoy día existen las pruebas de Shamballa. Si aplicamos los ojos para ver y los oídos para oír, para ver lo interesante y profundo, para oír aquello que precisamos oír, entonces nos daremos cuenta que nuestra vida se está desarrollando de otra manera, porque constituimos, no lo olvidemos, una parte integrante de Shamballa, porque si evolucionamos nosotros individualmente, al propio tiempo está evolucionando el propio Logos Planetario. Hay que ser conciente para llegar a este punto. Si no nos damos cuenta que la vida de Sanat Kumara está dependiendo de cada uno de nosotros para su propia evolución y para la evolución del propio sistema solar, quizás adquiramos progresivamente algo más de responsabilidad. Hasta aquí hemos crecido a través del poder, de la suficiencia, pero hemos perdido la capacidad de ser responsables. Y me parece, que sobre el punto de hoy que es muy extenso, no vale con que haya sido con pocas palabras, sino que está muy apretado este contexto, porque por primera vez se está diciendo que un centro no es una cosa, sino que es alguien, lo mismo que un estado de conciencia del hombre, lo mismo que una enfermedad no es solamente algo sino alguien y que hay que introducir en la consciencia de la raza las nuevas formulaciones esotéricas para la nueva era, y al decir las nuevas previsiones para la nueva era, me refiero también que hay que adoptar un sentimiento de integridad o de aproximación, si ustedes lo prefieren, que consideremos que Shamballa al igual que la Jerarquía, que el Reino de Dios y el Reino de los Cielos están aquí con nosotros, y que hay que verificar el esfuerzo necesario para que esta vinculación que existe eternamente se haga objetiva y tal es el trabajo de los discípulos de la Nueva Era, tal es el trabajo del hombre responsable, tal, es en esencia, la necesidad pura de la raza. Teniendo en cuenta, que a través de la responsabilidad, al ir acercándonos a la Jerarquía, nos iremos acercando también a Shamballa, y que Shamballa debe dejar de ser progresivamente un lugar tan místico como lo conocemos. Hay que darse de la situación que ocupa el ser humano hoy día, el ser humano responsable, que se da cuenta de la necesidad y no se limita a acumular conocimientos esotéricos, sino que lo poco que ha logrado captar íntegramente lo pone en práctica y tenemos entonces los grandes valores psicológicos de la Nueva Era, porque una era no se está desarrollando en virtud de una posición astrológica de los astros, sino virtualmente por la capacidad que tiene el hombre de organizar aquellas energías transmitidas por los astros. Hay que convertirse en grandes canalizadores de las mejores energías de los astros o purificar tanto nuestra naturaleza que cuando la energía de los astros penetren en nosotros, salgan tan limpias que como han entrado. Esto no es un consejo es la realidad. Y ahora podríamos discutir entre todos, porque el tema, para mí, es tan grande y al propio tiempo tan profundo, que precisa una atención también muy profunda, de carácter, casi diría yo, esplendente y trascendente.

 

 

Pregunta - Una de las cosas que también dice el Maestro Tibetano que se habría de inculcar en la mente de los hombres, es, de alguna manera, la información errónea transmitida a través de los siglos por la Iglesia, la Iglesia Católica sobre todo, en la cual dice que el Maestro Jesús, el Cristo, está en presencia física en la Jerarquía, en Shamballa, es decir en los Himalayas. Entonces, la pregunta es que de alguna manera, siempre nos has presentando estos tres centros, bueno la Jerarquía y Shamballa, siempre como en materia etérica muy sublime, sin embargo, el Maestro Tibetano da constancia de que están en el plano físico y pronta a reaparecer. Entonces, ¿cómo es posible esta aparente contradicción, es que es una cuestión de sensibilidad, o donde radica el misterio este?

Vicente - El hecho de que un Iniciado de gran categoría como Cristo, esté en materia física, en cuerpo físico, no implica limitar su grandeza, porque el planeta es su entero, es el cuerpo físico del Logos Planetario o del Hombre Celestial de nuestro esquema terrestre. Por lo tanto, la presentación que se hace de los Maestros que viven en Shigatsé por ejemplo, es una parte de la Jerarquía. Diré que hay un lugar común dentro del planeta, en el cuál hay una reunión incesante de los Adeptos, que no se realiza en cuerpo físico, porque, solamente por decir, un Iniciado o quizá no Iniciado, un discípulo muy avanzado, o un Hincado de la 1ª y 2ª Iniciación, tiene la capacidad de abstraerse de su cuerpo físico y penetrar en el mundo espiritual sin perder la conciencia. Se trata de conciencia iniciática y no de una conciencia corporal, porque el cuerpo físico, ya sea el del propio Cristo o el del Sistema Planetario, no constituye un principio, es un vehículo, un vehículo que será mejor o peor organizado o dirigido, dependiendo de la actividad de la entidad que lo informa. El cuerpo físico es un robot, no es un principio, ahora, el cuerpo emocional, el del deseo y el cuerpo mental son principios. Significa que todavía tenemos que desarrollarlos, porque al llegar a cierto punto de la evolución, ni el cuerpo astral ni el cuerpo mental nos seguirán, tendremos que proyectarnos en cuerpo Búdico, de ahí que lo que se atribuye a Cristo y a algunos Adeptos en cuerpo físico aquí en la Tierra, por motivos de trabajo y de servicio o para mejor galvanizar las energías del 2º Rayo, o del Rayo al que pertenezca el Iniciado tiene un cuerpo físico. Por tanto, no tiene mucha importancia el que un Iniciado o un Gran Adepto como el Cristo, esté en cuerpo físico y tengamos incluso la fotografía de Maitreya o de esos grandes Maestros que conocemos, de Chohanes de Rayo, porque un cuerpo físico, aunque sea sublime se puede fotografiar, siempre que el Adepto quiera, porque posee la fuerza mágica para desviar cualquier vibración que no le interese. Las fotografías que se poseen de los Maestros y aún del propio Maitreya, fueron, digamos, tratadas de una manera especial, no fueron fotografiados, sino que fueron proyectadas mentalmente por Madame Blavatsky cuando estuvo en el Tíbet. Por lo tanto, indicaba que había unos cuerpos físicos de unos Maestros que estaban trabajando para la Humanidad, y todos hemos visto algunas de estas fotografías. No es que haya que prestar reverencia a la foto, par mí no tiene ningún valor, lo digo sinceramente, sino para demostrar que existen  y que hay una majestad física incluso, que atrae la atención, porque sus cuerpos son distintos a los nuestros, más puros, más radiantes. También hay que decir que cuando un Adepto ha llegado a la 5ª Iniciación, que por esto es Adepto, puede fabricarse un cuerpo a voluntad utilizando los devas sustanciadores del éter. Por lo tanto, como digo, no tiene mucha importancia, la importancia que tiene todo el contexto es el aspecto espiritual, el aspecto radiación magnética. ¿Quién no ha sentido alguna vez en su corazón la radiación de Cristo, en cualquier momento, cuando estamos en grupo o una impresión telepática de algún Maestro, nos hayamos dado cuenta o no de ello? Porque estamos dentro de un océano de Luz y de Armonía y de vibraciones de todos los tipos, porque todo está ahí, solamente hay que coger lo bueno de lo que hay ahí, no como sucede, desdichadamente, que cogemos más lo indeseable que lo bueno que existe en la naturaleza. Si desglosásemos el camino del ambiente, si nos hiciésemos inocuos a lo malo, lo bueno vendría por añadidura. Hablamos del significado de las palabras de Cristo, porque lo bueno es el Reino de Dios y la marcha de lo indeseable es cosa por añadidura, no hay que preocuparse, no hay que luchar contra las tentaciones, sino dejar que las tentaciones se aparte de uno verdad, porque cuando luchamos con la tentación a lo mejor nos llenamos de más tentaciones, porque queremos apagar el fuego con bencina, pero ¿qué pasará si tenemos la idea de la sublimidad constantemente? Nos haremos inocuos, es decir, nos haremos invulnerables al mal y vulnerables al bien, sin necesidad de esforzarnos. Claro que la dificultad del hombre es dejar de luchar, porque todo cuanto constituye una posesión del hombre ha sido a través del esfuerzo, de la disciplina o de la ambición, y si se dice, si quieres que todo desaparezca abandona la ambición y te quedará lo necesario, que eran las palabras de Cristo también: “Déjalo todo y sígueme”. Y todos siguen a Cristo con todo su bagaje. Claro, no pueden seguirlo porque va ligero, porque no lleva peso kármico alguno.

 

Bueno, todo esto es solamente para decirles que el matiz de Shamballa, el matiz que impregna la Jerarquía y que se proyecta sobre la Humanidad, es un misterio que hay que tratar de revelar, que no siendo simplemente buenos adquirimos el pasaporte para Shamballa, si podemos decirlo así, sino por el trabajo lento, sencillo, sin espectacularidad alguna, de día y de noche, aquella pequeña lucecita abierta en el compartimiento del corazón, que no se apague nunca, más que las grandes llamaradas del genio. Es el esfuerzo constante de cada día, no por el trabajo espectacular lo que nos acercará a Shamballa.

 

Pregunta - Has omitido, no sé sí expresamente o no, el centro del bazo, sabemos que es el distribuidor de energía cósmica.....

Vicente - ......Bueno, es el centro sacro.......

 

Interlocutor - .......funciones diferenciadas.........

 

Vicente - No, porque el chakra esplénico o sacro, su contraparte, su glándula es el bazo, o su expresión física es el bazo, y por aquí vienen las energías del prana, en tanto que por el plexo solar vienen las energías astrales. Lo que pasa es que no hemos hablado de las glándulas planetarias, entonces tendría que hablarles de las ciudades magnéticas de la Tierra, que son las glándulas planetarias de Sanat Kumara. Conocemos cinco glándulas perfectamente delimitadas que están en orden a los cinco sentidos que poseemos actualmente y a las cinco razas evolucionantes hasta aquí, que son las ciudades de Londres (Reino Unido), Ginebra (Suiza), Nueva York (Norteamérica), Tokio (Japón) y Darjeeling (Norte de la India) son las glándulas que están trabajando ya activamente. Pero de la misma manera que solamente hay cinco razas y tenemos cinco sentidos, solamente conocemos cinco ciudades magnéticas. Pero, podemos decir, —quizá lo hablaremos en la próxima conversación— cómo se forma una ciudad esotéricamente, cómo se crea esotéricamente una raza, cómo se crea esotéricamente una religión, para que vean que todo ese conglomerado de centros que hemos ido describiendo, tiene su función y que hay Adeptos que trabajan a las órdenes del Mahachohan para crear ciudades, poblaciones y continentes. Que el Manú trabaja con las razas a través de ángeles especializados y que el Bodhisatva, o el Cristo como lo llamamos en Occidente, trabaja con las religiones, con el aspecto espiritual y místico de la Humanidad. Pero esto pertenece a un trabajo digamos más exhaustivo hablando de glándulas. Hoy hemos hablado de centros y nos hemos quedado cortos, porque no se dice todo cuanto se puede decir ¿Qué sabemos de las entidades de carácter planetario o cósmico que desconocemos? ¿Qué sabemos de las civilizaciones perdidas, actuantes todavía en ciertos niveles? ¿Qué sabemos de las humanidades que pueden coexistir con nosotros en distintos niveles de la Tierra? Solo esto nos dará la idea de la dificultad de llegar a una síntesis de todo el proceso, pero al propio tiempo, nos damos cuenta, en vista de la relación que existe entre centros del contexto planetario y también de la interpenetración de los centros con las ciudades magnéticas, para que nos demos cuenta de que todos participamos de la fuerza de la ciudad en la cual vivimos a través del espíritu nacional, regional o local. Van aun país extranjero y notan la diferencia psíquica, porque no es el mismo ángel nacional que el nuestro, y si van a otra región que no sea Cataluña, o que no sea Castilla, o que no sea León, encontrarán la diferencia ambiental en virtud de que los devas que crearon aquellas regiones o ciudades son distintas, en orden de rayo, de cualidades y de centros con los cuales están enlazados. Yo creo que el estudio de los arquetipos que trae a la existencia las grandes razas, y el estudio de síntesis que crea las religiones, para que el hombre pueda acercarse a Dios de una u otra manera, y todo el contexto de lo que hemos ido aprendiendo a través del tiempo, a través de los distintos libros de historia y los libros esotéricos, tendremos la capacidad de poder ver las cosas con una visión más certera y volviendo al principio del recorrido de esta conversación, reorientaremos  nuestros ángulos de visión. Por muy inclinado que esté el eje de la Tierra con respecto de la eclíptica, hay un tipo de visión que no admite deformaciones, y este tipo de visión es la recta conducta, tal como está escrito en los libros santos de todas las Religiones: “Enderezad los caminos del Señor”. En realidad, se trata, de que entre todos, pongamos el eje de la Tierra perpendicular por completo desde el punto de vista del ángulo de la eclíptica, porque entonces el karma de la Tierra sufrirá hondas transformaciones. Hoy día tenemos el frío digamos más crudo y el calor más irresistible, si vamos a los polos o al ecuador. ¿Por qué estas diferencias?, por el karma de la Tierra, porque hay seres humanos que tienen que sufrir por el frío, porque hay seres humanos que tienen que pasar por la prueba del calor, pues si entre todos ayudamos a enderezar el camino, enderezando el nuestro, entonces habrá la posibilidad de que el karma de la Tierra sufra también hondas transformaciones en orden a lo correcto, en orden a la ley de Dios.

 

Pregunta - Has hablado antes del centro Ajna ¿Cómo tenemos que hacer para poner la atención allí?

Vicente - Poniendo atención. La atención esta conectada con Shamballa, no está conectada con el centro Ajna, entonces no podemos decir que vamos a enfocar desde el centro Ajna la atención hacia nosotros mismos porque paralizaríamos la acción. Para estar atento al centro Ajna hay que ascender al centro Sahasrara. Estar atentos simplemente, no decir “voy a estar atento”, estar atento simplemente, que se desvía la atención, volver a ponerla. Porque el hombre no piensa correctamente porque está pensando con la atención en otro nivel, y el nivel de la atención debe estar aquí, en el centro Ajna, el pensador piensa a través de este centro, el Observador Silencioso a través del centro superior, el sentimiento a través del corazón. Cada centro tiene su cualidad y su función realmente particular, específica.

 

Pregunta - Has dicho que la humanidad tiene un karma, yo digo que el karma son las guerras ¿es eso?

Vicente - Bueno, una guerra sucede cuando un individuo lucha. Como no hay amor sino que hay enemistad y odio, estamos creando una figura elementaria, un egregor. Este egregor se traslada al mundo mental y está luchando allí, y aparentemente no hay guerra porque no hay disparos, pero la guerra está, entonces, como el feto que se crea con el tiempo, el feto de la guerra se está creando en la mente de los hombres. Entonces, tenemos también que, cuando se hizo por primera vez la Declaración Universal de los Derechos Humanos y cuando se trabaja con la UNESCO para unificar el mundo, en el preámbulo de la UNESCO se dice textualmente: “La guerra se forja en las mentes de los hombres y es en la mente de los hombres donde tenemos que fraguar los baluartes de la Paz”. Entonces, claramente dice, que hay guerras porque estamos luchando mentalmente, emocionalmente y físicamente. La guerra es inevitable cuando estamos luchando, cuando la lucha a llegado a cierto punto, cuando trasciende la propia mente porque ya no puede contener más energía negativa o más ofensividad, entonces estalla la guerra. Todos estamos luchamos, no es por ejemplo aquí o en el Líbano o en América del Sur, estamos luchando en la mente, no el corazón. Si tan solo durante diez minutos no luchásemos se  terminarían todas las guerras. Estamos luchando constantemente, con el vecino, con los familiares, con nosotros mismos porque no acabamos de comprendernos. Entonces, la guerra cuando surge, es la expresión exagerada de todo cuanto están haciendo los hombres, cada día, cada momento. Entonces, se ve claramente que lo que necesitamos es dejar de luchar. Y quizá sería interesante, utilizando la analogía, que cuando ustedes están muy atentos no están luchando, estando atentos se crea una situación psicológica en la cual la lucha cede. Estamos enfocados en un punto, el punto que sea, estamos atentos, y a fuerza de atención vamos a tener que despertar la pequeña llamita del corazón a fin de que se convierta en un centro radiante que llegue a inflamar la mente, que llegue hasta arriba, hasta el centro de la cúspide de la cabeza, y entonces, quizás podamos llamarnos hombres con mayúscula, o Hijos de Dios,  porque este es nuestro destino, convertirnos en unos testigos de la Luz y en unos Servidores del Plan. No quiero cansarles más, un momento de silencio.


CONFERENCIA VICENTE BELTRAN ANGLADA

Barcelona 
19-Octubre
-1983

Conferencia digitalizada por el Grupo de Trascripción de Conferencias (G.T.C.)

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