La Paz interna.
Ese estado de intenso dinamismo, que
libera, trasmuta, sutiliza y redime el entorno.
Solemos entender que si hay paz, no hay
conflictos, pero si no hay conflictos no significa necesariamente que haya
paz, puede ser que haya un estancamiento, una fase pasiva del conflicto,
donde las causas del mal van creciendo, alimentándose en las aguas
estancadas hasta tomar entidad propia, lo que empezó con una falta de
comprensión o de interés por el prójimo, ahora es un monstruo con vida
propia que exige un tributo de odio y dolor.
Imaginémonos en la época escolar, el
estrés de los exámenes son como la tensión de las crisis que afrontamos en
la etapa de adultos, y no solo tienen en común sendas etapas la tensión,
también el hecho que en ellas tenemos que demostrar que en las etapas entre
exámenes, entre crisis hemos aprovechado el tiempo para afrontar con éxito
un nuevo reto, una nueva experiencia, un cambio de ciclo, una nueva
oportunidad de aprender y trabajar.
Si la paz del tiempo entre ciclos, entre
exámenes, la usamos para dar soltura a impulsos primarios, sin estar
atentos para diferenciar estos impulsos de los signos e intuiciones con que
los Ángeles Solares tratan de guiarnos, entonces las oportunidades de
crecimiento que representan las dificultades, no nos parecerán tal
oportunidad, sino mas bien un tren que surge de Dios sabe donde con
intención de atropellarnos y de arruinar todos nuestros planes a los que
tantas horas hemos dedicado, y cuando pasa el tren solo queda nuestro yo
maltrecho, dolorido y desnudo, por que todo lo que ha construido a su
alrededor para protegerse y darse calor, ha quedado en nada.
Cuando pase uno de estos trenes por
nuestra vida, aprovechemos la oportunidad que nos ofrece, no busquemos
refugio en estructuras mentales y emocionales que nos den falsa seguridad,
aprovechemos la desnudez ante el mundo, para comprobar que el mundo es
nuestro hogar, que no necesitamos protegernos, ni ocultarnos, que podemos
ver el mundo sin necesidad de prismas, ni elaboradas suposiciones mentales,
ni apegos emocionales de simpatía o antipatía.
Poder ver el mundo tal cual es, sin
adornos, ni espejos, para poder comprobar con los propios ojos, por que a la
separatividad se la llama espejismo y herejía.
Si la paz fruto de la ausencia visible de
conflicto, tensión o crisis, no es mas que otro espejismo, entonces ¿qué es
la Paz?.
La Paz es ese estado de intenso
dinamismo, que libera, trasmuta, sutiliza y redime el entorno.
No se consigue en conferencias, ni en
despachos, ni firmando documentos que hagan alusión a ella, en esos casos lo
máximo que se puede conseguir es un reconocimiento de las partes de que es
mas rentable social y económicamente renunciar a ciertos privilegios que
creaban injusticia, malestar y violencia. Pero si esa paz que es efecto de
haber corregido injusticias, no ha llegado a los corazones de las personas,
si estas personas mantienen viva en su memoria viejos agravios, incluso los
trasmiten a nuevas generaciones, si no dejan que el Agua de Acuario, el
Amor, limpie heridas, renueve las aguas estancadas, entonces la Hidra
volverá a reclamar su reino y su tributo de odio y dolor.
Por el contrario si en una circunstancia
de injusticia, la parte perjudicada en lo difícil de tal circunstancia es
capaz de romper la inercia de considerar la violencia, el conflicto como un
recurso, de renunciar ya no solo a generar conflicto, si no también ha
sentir o pensar algo que no sea amor respecto a los causantes de las
injusticias, entonces la renuncia de usar herramientas incorrectas y el amor
que no ha dejado de estar presente aun cuando nos hacen daño, van a poner en
marcha unos mecanismos de alquimia, que van a solucionar la injusticia y en
esta ocasión desde las causas.
Cuando renunciamos a la violencia física
descubrimos la palabra, cuando la palabra expresada correctamente no sirve y
renunciamos a usarla incorrectamente estamos dando la oportunidad a los
devas del silencio y a los Ángeles Solares de que puedan ayudarnos.
La renuncia de usar el poder físico
incorrectamente, descubre el poder de la palabra.
La renuncia de usar el poder de la
palabra incorrectamente, descubre el poder del silencio, el poder del
pensamiento consciente y consecuente con un corazón puro, que se ha olvidado
de si mismo.
Este es el principio del trabajo grupal
con los Ángeles Solares y un nuevo campo de fascinantes y hermosas
experiencias, donde no hay lugar a equipajes, los recuerdos del pasado y las
esperanzas del futuro nos atan al espejismo de la separatividad del tiempo y
nos impiden situarnos en corazón, mente y alma en el eterno presente, el
punto de la cruz donde se unen las líneas vertical, del servicio al Padre y
horizontal, del servicio al prójimo, el punto de síntesis de la Paz interna.
Nuestra conciencia dispersada en
innumerables fragmentos, persiguiendo impulsos, emociones, dispersada en los
laberintos de la mente a de concentrarse en el punto de luz del corazón, el
lugar de intensa Paz y Amor. Intentemos que nuestro corazón este serenamente
expectante, lo suficiente como para percibir la alegría de la comunión con
todos los seres, vayámonos un día al campo, a la playa, al jardín con esa
intención, intentémoslo innumerables veces no con el propósito de conseguir
nada sino de disfrutar con la alegría de la contemplación, si miramos un
árbol, que no exista otra cosa que el árbol, si miramos una nube que nos
sintamos nube, todo nuestro ser focalizado en el punto del aquí y ahora,
allí donde dirijamos la atención, sintiendo la alegría de sentir la unidad.
Cuando descubramos nuestra Paz interna
será como un faro que nos guiará a través de dificultades, espejismos y
errores, y sabremos que la senda nos lleva a ese faro de Paz que esta en el
corazón de nuestro corazón, y los obstáculos, las barreras, los
impedimentos, no están en otro sitio que en nuestro corazón, son las
impurezas internas las que llaman a otras impurezas en otros corazones para
dificultarnos el camino, a no ser que aprovechemos la información de saber
que cosas y que personas atraemos a nosotros, para saber donde limpiar, que
parte de nuestro corazón necesita un poco de atención, de luz del Sol, de
Amor, para que todo el corazón pueda Amar.
Proponiéndonos Ser Paz, nos ponemos en
camino para ir siéndolo poco a poco, no importa que un día no lo seamos,
pero el día que lo seamos, la hora o el minuto, será una hora o un minuto
especial, por que seremos un poco mas libres y cualquier cosa o persona que
se acerque a nosotros se contagiará de esa paz y libertad.
El foro VBA --y sus
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dedicada a honrar la vida y obra de Vicente Beltrán Anglada
a través de la meditación, el estudio y el servicio.
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